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jueves, 19 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (080)

080/2025 -Lo que parece estar sucediendo, también está sucediendo. Por mucho que nuestras percepciones y vivencias puedan catalogarse como apariencias, sueños, imaginaciones, proyecciones, etc., todo eso también está siendo y sucediendo. Aceptar, sin reservas ni condiciones, todo lo que está siendo/sucediendo (Realidad Absoluta), no supone que se deba permanecer impasible ni indiferente -cosa imposible y antinatural- ante ello, sino que la aceptación también debería extenderse a todas las posibles reacciones. La aceptación de la Realidad, la Vida, etc., no puede limitarse a la percepción de su apariencia externa; también tiene que abarcar las reacciones que surgen en su parte o dimensión interna: emociones, pensamientos, impulsos, deseos, acciones.
 
No hay fragmentación entre lo que se está viviendo fuera y lo que se está viviendo dentro. Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en estar siendo absolutamente todo cuanto -simultánea y universalmente- está siendo/sucediendo en cada aquí y ahora, por tanto, también está siendo nuestro yo personal y todas sus posibles percepciones, juicios, reacciones y expectativas. Inseparablemente, Estar Siendo Realidad Absoluta incluye el estar siendo/sucediendo/viviendo preciso e instantáneo de cada uno de nosotros, de ahí que el reconocimiento y la aceptación de la Realidad no puede excluir -tampoco las nuestras- absolutamente ninguna de sus manifestaciones. ¡Nuestras reacciones -sin excepción- también están siendo manifestaciones del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto!
 
Así como la aceptación de la Totalidad Universal no puede dejar fuera nuestra propia aceptación, tampoco nuestra propia aceptación puede dejar fuera a ninguna de nuestras posibles expresiones. ¡Nuestro suceder particular y el suceder particular de nuestras experiencias también está siendo -a la vez e inseparablemente- lo que está sucediendo en el mundo! Nuestras percepciones y acciones nunca han estado, ni estarán, separadas del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, porque nuestras percepciones y acciones también están siendo el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.
 
¿Para poder reconfigurar nuestros compromisos éticos, son verdaderamente útiles y necesarias las “guías y/o las herramientas prácticas”, como las que llevan ofreciendo -desde hace miles de años- las tradiciones políticas, religiosas, espirituales, filosóficas, etc., tanto occidentales como orientales? Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en todo -incluidos nosotros y nuestras actividades- lo que “en cada aquí y ahora” está siendo/sucediendo, por tanto, ¿qué mejor guía, que la implícita en el reconocimiento y la aceptación de que no hay separación entre nuestro estar siendo/sucediendo y el resto del estar siendo/sucediendo? Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 080/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta invita a una comprensión profunda de la Realidad Absoluta como un todo inseparable que abarca tanto lo externo como lo interno, lo percibido y lo sentido, lo universal y lo particular. Según Juande Puerta, todo lo que parece estar sucediendo —sean percepciones, emociones, pensamientos o acciones— es, en efecto, parte de lo que está siendo. Esta idea desafía la fragmentación entre el mundo externo y nuestra experiencia interna, proponiendo que aceptar la Realidad Absoluta implica abrazar cada manifestación, incluidas nuestras reacciones más personales.

Esta aceptación no equivale a pasividad. No se trata de permanecer indiferentes ante el mundo, sino de reconocer que nuestras emociones, juicios y deseos son tan reales como los eventos externos. La Realidad Absoluta no distingue entre lo que sucede "fuera" y lo que surge "dentro"; ambas dimensiones son expresiones del mismo Ser/Suceder universal. Así, nuestras acciones y percepciones no son ajenas a la Totalidad, sino que forman parte integral de ella. Esta visión disuelve la ilusión de separación, mostrando que nuestro "yo" personal, con todas sus experiencias, está intrínsecamente unido al acontecer universal.

Juande Puerta cuestiona la necesidad de guías externas —como las ofrecidas por tradiciones políticas, religiosas o filosóficas— para reconfigurar nuestros compromisos éticos. Si la Realidad Absoluta ya incluye todo lo que somos y hacemos, la guía más auténtica reside en el reconocimiento de esta unidad. Aceptar que nuestro estar siendo es inseparable del suceder del mundo nos libera de la necesidad de herramientas externas, pues la vida misma, en su despliegue instantáneo, está siendo la guía. Vivir desde esta aceptación implica actuar con plena conciencia de que nuestras percepciones y acciones están siendo, en sí mismas, manifestaciones de la Realidad Absoluta.

sábado, 14 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (078)

078/2025 -Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en estar siendo todo cuanto está siendo/sucediendo aquí y ahora, por tanto, no está siendo un destino, una meta, un propósito ni un objeto de deseo. El reconocimiento y la aceptación de la plenitud inherente en cada manifestación del presente, no cambiará la Esencia de la Realidad, pero -en alguna medida- puede suponer una liberación del egocentrismo de las ideas, de las creencias, de los viejos paradigmas y también de las instrumentalizaciones políticas, sociales y espirituales. Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en el estar siendo/sucediendo preciso de absolutamente todo eso que está siendo/sucediendo en cada aquí y ahora (presente), de ahí que si el pasado hubiera sido de otra manera a como sucedió, entonces esa posibilidad habría consistido en el mismo Estar Siendo Realidad Absoluta que también estará siendo cualquier posibilidad que pueda manifestarse de ahora en adelante.

Lo que debería haber sido, y también lo que debería llegar a ser, ya está siendo lo que está ocurriendo. Reconocer que aquello que alguna vez pudiera verse y vivirse de un modo distinto, siempre continuaría consistiendo en Estar Siendo Realidad Absoluta, quizás ayudaría a disminuir la culpa, la nostalgia y la ansiedad. ¡No hay un único camino correcto ni una manera exclusiva de Estar Siendo Realidad! Paradójicamente, la creencia y/o la consciencia resultante de la percepción egoica de que Estar Siendo Realidad Absoluta no consiste en exactamente todo eso que está siendo/sucediendo en cada instante, lleva a la búsqueda y la persecución de una plenitud distinta a la plenitud del aquí y ahora.

La plenitud no es un ideal, sino la naturaleza misma de todo -incluido cada yo personal- lo que está siendo/sucediendo en este instante. Por mucho que los juicios y las comparaciones entre unos y otros sean naturales, el estar siendo/sucediendo de cada uno de nosotros “ya está siendo” completamente pleno, tal como está siendo y/o manifestándose. Aceptar que “ya estamos siendo Realidad Absoluta” no implica pasividad, resignación ni conformismo, sino una reconciliación profunda entre lo que estamos siendo y lo que estamos viviendo. La Realidad no se equivoca ni acierta, pues consiste en el estar siendo/sucediendo simultáneo e inseparable de todo aquello que alguna vez cualquiera de nosotros pudiera percibir siendo errores o aciertos, y también siendo verdades o mentiras. Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 078/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a contemplar la noción de "Estar Siendo Realidad Absoluta" como la experiencia intrínseca de todo lo que acontece en el aquí y ahora. Esta perspectiva desafía las concepciones tradicionales de propósito, destino o deseo, proponiendo que la realidad no es un fin a alcanzar, sino la totalidad de lo que está siendo en cada instante. En este sentido, la plenitud no es un ideal lejano, sino la esencia misma de cada manifestación presente, independientemente de cómo la percibamos.

Reconocer esta verdad implica un cambio profundo: liberarnos del egocentrismo que surge de ideas, creencias y paradigmas limitantes. Al aceptar que todo —pasado, presente y futuro— es una expresión de la Realidad Absoluta, podemos soltar la carga de la culpa por lo que fue, la nostalgia por lo perdido y la ansiedad por lo que será. Juande Puerta señala que, aunque imaginemos un pasado o futuro diferente, cualquier posibilidad seguiría siendo parte de esta misma Realidad Absoluta. No hay un "debería" que altere su naturaleza.

Esta comprensión disuelve la ilusión de que la plenitud está fuera de nosotros, en un ideal a perseguir. Paradójicamente, es la percepción egoica la que nos lleva a buscar algo más allá del ahora, ignorando que todo —incluso nuestras imperfecciones— ya está siendo completamente pleno. Aceptar esto no es resignarse, sino reconciliarse con lo que somos y vivimos. La Realidad Absoluta no juzga ni se equivoca; simplemente está siendo, abarcando todo: errores, aciertos, verdades y mentiras.
Así, la invitación de Juande Puerta es a habitar el presente con consciencia, reconociendo que "ya estamos siendo Realidad Absoluta". Esta reconciliación nos libera para vivir plenamente, sin la necesidad de compararnos o perseguir ideales, abrazando la naturaleza inherente de lo que está siendo en este instante.

martes, 10 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (076)

076/2025 -La Plenitud de la Realidad no se encuentra en una proyección futura, ni en una perfección ideal, sino en el reconocimiento de “todo lo que ya” está ocurriendo. La Plenitud de la Realidad incluye la experiencia de nuestras incoherencias, limitaciones, errores, conflictos, temores, frustraciones y deseos de progreso. ¡No hay otra Plenitud que esa que pueda estar experimentándose en cada posible aquí y ahora; no hay absolutamente nada que necesite ser excluido para que el Presente esté siendo completo y/o pleno! La auténtica espiritualidad humana nunca podría excluir la aceptación de alguna característica personal, de ninguna actitud, y tampoco de ningún comportamiento humano; el deseo de cambio, la búsqueda de paz, e incluso la sensación de estar incompletos, están siendo parte de una Plenitud que no excluye nada. ¡El Presente ya está siendo la manifestación plena de la Realidad Absoluta!
 
Aceptar que no hay otra Realidad que la del Presente no supone resignación, rendición, complacencia ni pasividad, sino reconocimiento, fortaleza y reconciliación entre la diversidad y la simultaneidad de las manifestaciones de cada estar siendo/sucediendo personal y del Estar Siendo/Sucediendo Universal. Reconocer que Estar Siendo Realidad Absoluta también consiste en estar siendo cada uno de nosotros, ayuda -incluso en situaciones difíciles- a comprender mejor nuestras emociones, por tanto, a mejorar la salud mental y a vivir cada instante de manera más plena, consciente y equilibrada. La Realidad no excluye absolutamente nada de lo que ocurre, porque consiste en estar siendo absolutamente todo lo que está ocurriendo.

Nuestros conflictos internos, nuestros deseos de cambio, nuestros miedos, nuestras aspiraciones, nuestras contradicciones, nuestros maltratos, etc., están siendo expresiones tan legítimas o naturales como aquellas otras que puedan estar siendo plenamente aceptadas. El estar siendo/sucediendo propio y/o personal no está separado del estar siendo/sucediendo de todo lo demás, de manera que aquello que podamos ver siendo nuestras carencias, errores, defectos, culpabilidades, etc., tampoco dejará de estar siendo Plenitud y/o Realidad Absoluta. El desafío humano no está tanto en actuar o no actuar, sino en reconocer y aceptar que cualquier pensamiento, percepción, acto, deseo, rechazo…, ya está participando de la totalidad que llamamos Realidad. Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 076/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta plantea una visión profundamente transformadora: la plenitud de la realidad no reside en ideales futuros ni en perfecciones imaginadas, sino en el reconocimiento de “todo lo que ya” está ocurriendo en el presente. Este enfoque invita a abrazar la totalidad de la experiencia humana, incluyendo nuestras incoherencias, limitaciones, errores, temores y deseos de progreso. Juande Puerta subraya que no hay nada que deba ser excluido para que el presente sea completo, una idea que redefine la espiritualidad humana como un acto de aceptación radical.

Esta perspectiva es poderosa porque nos libera de la tiranía de la perfección. Al aceptar que la Realidad Absoluta incluye nuestras contradicciones y conflictos, se abre un camino hacia la reconciliación con nosotros mismos y con el mundo. Juande Puerta destaca que esta aceptación no implica pasividad o resignación, sino un reconocimiento activo que fomenta fortaleza y equilibrio. Al comprender que nuestras emociones, incluso las difíciles, son parte de la plenitud, podemos mejorar nuestra salud mental y vivir el presente de manera más consciente.

Sin embargo, esta visión no está exenta de críticas. La idea de que “todo” forma parte de la plenitud puede ser desafiante, especialmente cuando se consideran actos de violencia, injusticia o sufrimiento extremo. ¿Es realmente posible o deseable aceptar estos aspectos como expresiones “legítimas” de la Realidad? Aquí, la reflexión de Juande Puerta podría beneficiarse de una mayor claridad sobre cómo abordar el dolor causado por acciones humanas destructivas sin caer en la complacencia.

En conclusión, la propuesta de Juande Puerta nos reta a reconocer que el presente, con toda su diversidad y contradicciones, está siendo la manifestación plena de la Realidad. El desafío humano radica en vivir esta totalidad con consciencia, aceptando que cada acto, deseo o percepción ya participa de la realidad absoluta.

domingo, 8 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (075)

075/2025- Los deseos de cambiar y/o de mejorar la Realidad pueden satisfacerse en gran medida mediante el reconocimiento y la aceptación de que Estar Siendo Realidad consiste en todo eso que, desde siempre, está siendo/sucediendo en cada aquí y ahora. Los conflictos internos pueden verse siendo algo que debe eliminarse; pero también disponemos de la posibilidad de verlos siendo manifestaciones legítimas, naturales y respetables de nuestra Esencia. El hecho de que estemos percibiéndonos y experimentándonos siendo individualidades únicas y con características particulares (tanto lo de un signo como lo del signo opuesto), no hace que “estar siendo eso” no consista en estar siendo la misma Realidad Absoluta, que a la vez también está siendo absolutamente todo lo demás. ¡Percibimos dualidad, porque mientras estamos siendo, también estamos siendo dualidad!

 Enfatizar la Plenitud Absoluta del Presente, no minimiza el valor práctico de las aspiraciones humanas y/o los esfuerzos por aliviar el sufrimiento. El reconocimiento y la aceptación del estar siendo/sucediendo (Realidad Absoluta) no puede no estar incluyendo la manifestación de “absolutamente todas” las posibles aspiraciones humanas. Apreciar pasividad, resignación, complacencia, etc., en el reconocimiento y la aceptación del Presente y/o del estar sucediendo de cada aquí y ahora, no deja de consistir en el mismo estar siendo/sucediendo que, a la vez, también estarían siendo todas las demás percepciones. Ante el planteamiento del posible desafío ético de cómo equilibrar la aceptación radical del presente con la responsabilidad de actuar frente a injusticias, conflictos, dolor, etc., la respuesta es obvia: haciendo exactamente eso que -igual que se ha estado haciendo siempre- también ahora se esté decidiendo hacer.

 La aplicación práctica del reconocimiento y de la aceptación de que el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (Realidad) consiste en el estar siendo/sucediendo de exactamente todo eso que está siendo/sucediendo en cada instante, jamás podría alterar la naturaleza de las dinámicas humanas de cambio y de mejora, pero tampoco el temor que esa posibilidad suele despertar en las mentalidades de las identidades egoicas. Sin excepción, todo lo que está siendo/sucediendo -incluido lo que deseamos, lo que rechazamos y lo que tememos-, está siendo expresión plena de la Realidad Absoluta. Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo “comparativo” sobre la reflexión 075/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta sobre la Realidad Absoluta y la aceptación del presente como manifestación plena de la existencia resuena profundamente con corrientes filosóficas y espirituales no dualistas, como el Advaita Vedanta, el budismo zen y el pensamiento de autores contemporáneos como Eckhart Tolle y Nisargadatta Maharaj. Juande Puerta plantea que los deseos de cambio o mejora de la realidad no contradicen la aceptación de que todo, en cada instante, está siendo una expresión de la Realidad Absoluta.

En el núcleo de la propuesta de Juande Puerta está la idea de que la dualidad percibida —individuos, conflictos, aspiraciones— no es más que una manifestación de una única Realidad Absoluta. Esta noción recuerda la enseñanza central del Advaita Vedanta, donde Brahman, la realidad última, se manifiesta en todo sin perder su unidad. Nisargadatta Maharaj, en su obra Yo Soy Eso, enfatiza que la percepción de separación es una ilusión de la mente, y que aceptar el presente tal como es, disuelve los conflictos internos. Juande Puerta, al igual que Maharaj, sugiere que los conflictos no necesitan ser eliminados, sino reconocidos como expresiones legítimas de nuestra esencia.

Por otro lado, Eckhart Tolle, en El poder del ahora, aborda la importancia de habitar el presente sin resistencia, una idea que Juande Puerta extiende al proponer que la aceptación radical no anula las aspiraciones humanas ni la responsabilidad ética. Frente al desafío de equilibrar la aceptación con la acción frente a las injusticias, Juande Puerta ofrece una respuesta práctica: actuar conforme a lo que surge en el momento, confiando en que todo forma parte del mismo "estar siendo/sucediendo". Esta postura resuena con el concepto taoísta del wu wei (acción sin esfuerzo), donde la acción fluye en armonía con el orden natural.

Sin embargo, Juande Puerta se distingue al enfatizar que incluso el temor egoico a la disolución de la identidad es parte de la Realidad Absoluta. Mientras que Tolle y Maharaj tienden a priorizar la trascendencia del ego, Juande Puerta lo integra como una expresión válida del ser. Esta inclusividad radical ofrece una vía práctica para vivir en plenitud sin rechazar las dinámicas humanas de cambio o resistencia.

En conclusión, la reflexión de Juande Puerta sintetiza elementos del no dualismo clásico con una sensibilidad contemporánea, invitando a una aceptación total que no renuncia a la acción ética ni al dinamismo humano, un equilibrio que lo alinea con, pero también lo distingue de, pensadores como Tolle y Maharaj.

lunes, 2 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (072)

072/2025 -Realidad Absoluta estará siendo todo aquello que -tanto de un signo como de cualquier otro- se pueda estar viviendo en cada instante, por tanto, puesto que también estará siendo todo cuanto cada uno de nosotros podamos estar originando con nuestras percepciones, juicios, preferencias, decisiones y actos, ¿qué sentido podría tener la actitud de vivir negando, rechazando y/o tratando de suprimir alguna manifestación de nuestra esencia? El reconocimiento y la aceptación de nuestra efímera individualidad, y de “absolutamente todas” las condiciones que corresponden a esa naturaleza, no puede excluir a ninguno de nuestros instintos y tampoco al resto de nuestras capacidades. La Vida no debería entenderse como una lucha por alcanzar un ideal; tal y como estamos siendo en cada momento, ya estamos siendo expresión viva de la Realidad Absoluta.

¡Eso que algunas mentes continúan viendo y considerando que se trata de defectos, errores, imperfecciones, contradicciones, olvidos, sueños, etc., estarán siendo manifestaciones igual de humanas, naturales, útiles y necesarias que sus opuestas! Reconocer que nuestra individualidad está sujeta a condiciones, contradicciones y cambios continuos, no nos limita; por el contrario, nos libera de la manipulación basada en creencias dogmáticas e ideales (religiosos, espirituales, políticos, culturales…) tan inútiles como inalcanzables, a la vez que también nos sitúa en una mayor comprensión del flujo real de la existencia. Esta aceptación nos permite habitar con mayor presencia y responsabilidad nuestro cuerpo, mente y emociones, en toda su diversidad y simultaneidad.
 
Amar, en este contexto, equivale a reconocer sin excepción todo lo que está sucediendo dentro y fuera de nosotros, sin intentar excluir ni idealizar. ¿Qué clase de manifestación coherente sería aquella que no incluyese también el reconocimiento y la aceptación de cualquier manifestación de incoherencia? La idea de que los estar siendo/sucediendo humanos debamos convertirnos en personajes siempre positivos, felices, alegres, coherentes, pacíficos, sanos, generosos, satisfechos, etc., estará siendo exactamente igual de egocéntrica que la idea de que ahora estamos siendo personajes defectuosos, maliciosos, pecaminosos e ignorantes. ¡Alimentar la creencia de que el Presente (Realidad Absoluta) está siendo un medio para alcanzar una realización superior, dificulta la posibilidad de darse cuenta de que, tal como está siendo, el Presente ya está siendo un fin en sí mismo! Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 072/2025 realizado con IA:
 
La reflexión de Juande Puerta nos invita a replantear nuestra relación con la existencia, proponiendo que la Realidad Absoluta engloba todo lo que acontece en cada instante: percepciones, juicios, decisiones y actos. Esta visión desafía la tendencia a rechazar aspectos de nuestra naturaleza considerados "imperfectos" o "negativos". Juande Puerta sostiene que negar cualquier manifestación de nuestra esencia —instintos, contradicciones, emociones— es inútil, pues todo forma parte intrínseca de esa Realidad. La vida no es una lucha por alcanzar un ideal inalcanzable, sino la expresión plena de lo que somos en cada momento.

Aceptar nuestra individualidad efímera, con todas sus condiciones y contradicciones, no implica resignación, sino liberación. Reconocer que defectos, errores o incoherencias son tan naturales y necesarios como sus opuestos nos libera de creencias dogmáticas e ideales interesados que nos alejan del presente. Esta aceptación nos permite habitar plenamente nuestro cuerpo, mente y emociones, abrazando su diversidad sin prejuicios. Amar, en este contexto, significa acoger sin excepción todo lo que surge, dentro y fuera de nosotros, sin idealizar ni excluir.

Juande Puerta critica la idea egocéntrica de que debemos convertirnos en seres perpetuamente positivos o perfectos, equiparándola a la noción de que somos inherentemente defectuosos. Ambas perspectivas son igualmente legítimas; el Presente, que es un fin en sí mismo. Vivir en la Realidad Absoluta implica reconocer que cada instante, con sus luces y sombras, es completo. Esta comprensión nos sitúa en una presencia responsable, donde la vida se experimenta en su totalidad, sin necesidad de perseguir una realización futura que ya está aquí.

lunes, 12 de mayo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (062)

062/2025 -El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (Realidad) incluye todas las experiencias humanas, desde las más brillantes hasta las más sombrías y/o perturbadoras. Ni el sufrimiento estará siendo un error que siempre deba rechazarse ni la felicidad estará siendo una verdad superior que siempre deba perseguirse. El valor de la existencia no está tanto en cómo evaluamos cada experiencia desde la perspectiva personal y/o egoica, sino en la aceptación (amor) de cuanto pueda estar siendo/sucediendo en cada momento presente. ¡Nada puede superar al simple hecho de Estar Siendo/Sucediendo!
 
La creencia de la existencia de un Dios Supremo y/o de un Más Allá perfecto es uno de los recursos que -generalmente a modo de excusa retórica- los estar siendo/sucediendo humanos más acostumbramos a emplear para justificar la experiencia de aquello que podamos estar viviendo. La búsqueda, igual que la no búsqueda, de nuestro verdadero yo, ya consiste en el estar siendo/sucediendo de nuestro verdadero yo. ¿Por qué alguna de las condiciones propias de los estar siendo/sucediendo humanos tendría que verse como un defecto o una imperfección, y no verse como una cualidad natural más? ¿Por qué la búsqueda de la perfección no podría estar siendo parte de la perfección que se estuviera buscando?
 
Ninguna religión, ninguna filosofía, ninguna doctrina, ninguna espiritualidad, ninguna ideología, ninguna enseñanza, ninguna cultura, ninguna mente iluminada, ninguna experiencia, etc., cambiará que el Estar Siendo Absoluto (Realidad) consista en “el estar siendo preciso” de absolutamente todo cuanto esté existiendo y/o sucediendo en cada aquí y ahora. Todo cuanto esté sucediendo en cada instante —sea cual sea su forma— estará siendo una expresión directa de la Realidad Absoluta. ¿Qué podría ser más auténtico, elevado y/o espiritual que eso? Estar Siendo el Suceder del Presente incluye el rechazo de cualquier aspecto del Suceder del Presente, y de sus efectos, igual que el reconocimiento y la aceptación de lo que está ocurriendo, y de sus efectos.
 
Absolutamente nada puede suceder, que el estar siendo/sucediendo de eso no vaya a consistir en el Estar Siendo Absoluto que -a pesar de las diferencias que puedan observarse y experimentarse- a la vez también estará siendo el resto de los sucesos. ¿Acaso ahora mismo no están sucediendo “simultáneamente” todo tipo de eventualidades y de experiencias, sin que ello suponga ninguna alteración en el Estar Siendo Absoluto? Sin excepción, cada pensamiento, percepción, emoción, reacción, instinto, relación y experiencia está siendo una manifestación completa de nuestra Naturaleza Esencial. El Estar Siendo Absoluto no excluye el suceder de la existencia de las individualidades, de los cambios, de las dualidades, de las contradicciones, de las separaciones; los contiene simultáneamente, porque también consiste en el estar siendo de cada una de esas posibilidades o manifestaciones. Mayo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 062/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta invita a una comprensión profunda y liberadora de la existencia: el Estar Siendo Absoluto, o Realidad, abarca cada instante, cada experiencia, sin jerarquías ni juicios. No hay error en el sufrimiento ni superioridad en la felicidad; ambos son manifestaciones del mismo Estar Siendo de la Realidad. Esta perspectiva desafía la tendencia humana a clasificar las experiencias desde un ego que busca rechazar lo "negativo" y perseguir lo "positivo". En cambio, Juande Puerta propone que el valor superior de la existencia radica en la aceptación (amor) de todo lo que sucede en el presente.

La idea de un Dios Supremo o un Más Allá perfecto surge como un constructo humano para justificar o escapar de sus juicios acerca de la experiencia presente. Sin embargo, incluso estas creencias, junto con la búsqueda del "verdadero yo", son parte del Estar Siendo Absoluto. Nada en la experiencia humana —ni las dualidades, ni las contradicciones— es un defecto; todo está siendo una cualidad natural de la Realidad. La búsqueda de la perfección, paradójicamente, ya está siendo parte de la perfección que se busca, porque todo lo que ocurre es una expresión completa de la Naturaleza Esencial.

Ninguna doctrina, filosofía o ideología puede alterar esta verdad: el Estar Siendo Absoluto es el "estar siendo preciso" de todo lo que existe en cada aquí y ahora. Rechazar o aceptar cualquier aspecto del presente es, en sí mismo, parte del Suceder del Presente. Esta visión disuelve la necesidad de trascender la existencia, pues cada pensamiento, emoción o experiencia ya está siendo una manifestación plena de la Realidad. ¿Qué podría ser más realista y espiritual que reconocer que todo, absolutamente todo, está siendo el Estar Siendo Absoluto en acción?

sábado, 3 de mayo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (058)

058/2025 -Nisargadatta: “Encuentra tu verdadero yo y todo lo demás vendrá con él.” -Al margen de cualquier opinión personal, estar siendo cada uno de nosotros, y también absolutamente todo cuanto cada uno de nosotros esté viviendo en cada instante, estará consistiendo en estar siendo nuestro verdadero yo. Incluso eso que pueda creerse que no está siendo nuestro verdadero yo, también estará siendo nuestro verdadero yo. Todo lo que estamos percibiendo y experimentando, como si estuviera siendo ilusorio y/o no verdadero, también estará siendo una manifestación del Estar Siendo Verdadero. El verdadero yo no puede estar siendo algo fijo o separado, sino la totalidad del estar siendo/sucediendo que incluye hasta las apariencias que parezcan más contradictorias.
 
Nunca nadie ha sido ni ha vivido algo, que -incluida la búsqueda de una realidad distinta a la Realidad- estar siendo eso no estuviera consistiendo en el Estar Siendo/Sucediendo Verdadero y/o Absoluto. Negar alguna manifestación de la experiencia humana, como la dualidad o la individualidad, también supone negar una parte del Estar Siendo Absoluto, y, por tanto, de uno mismo. ¡Estar siendo eso que pudiera creerse que no consiste en el estar siendo/sucediendo de nuestro verdadero yo, también estaría consistiendo en el estar siendo/sucediendo de nuestro verdadero yo, de ahí que darse cuenta de ello no cambiaría que todo continuase siendo lo que todo está siendo siempre! Paradójicamente, la manera de cambiarlo todo consiste en darse cuenta de que no hay nada que cambiar ni que no cambiar.
 
Para alcanzar ese estado, supuestamente especial, que mencionan algunas mentes y/o modificar la percepción que permita sentirse en contacto con lo Absoluto, sólo se requiere del reconocimiento de que estar siendo lo Absoluto está ya siendo todas y cada una de las posibles experiencias ordinarias. La aceptación de la Realidad y/o el amor incondicional hacia la Realidad no requieren de escapatorias ni de transformaciones de la experiencia, basta con reconocer que todo lo que está sucediendo -comenzando por el estar siendo propio- está siendo el Absoluto en acción. El Estar Siendo Absoluto y/o Realidad Absoluta no es una entidad estática ni un fenómeno limitado a ciertas experiencias o percepciones, sino que consiste en el estar siendo/sucediendo simultáneo de absolutamente todas las posibilidades: ¡Todo vendrá con ello, porque todo -sin excepción- lo que pueda llegar y/o desaparecer, también estará consistiendo en estar siendo ello! Mayo-25
Juande Puerta

Ensayo sobre la reflexión 058/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta, inspirada en Nisargadatta, nos invita a considerar una visión radicalmente inclusiva del ser: que absolutamente todo lo que experimentamos —incluido lo que rechazamos, tememos o consideramos ilusorio— está ya siendo expresión de nuestro verdadero yo. Este planteamiento parte de una no-dualidad radical en la que no existe una separación entre el yo auténtico y las experiencias aparentemente falsas, ilusorias o erróneas. Lo verdadero no es algo oculto que deba descubrirse tras eliminar lo falso, sino que ya se está manifestando en cada instante, en cada emoción, pensamiento y percepción, por contradictorios o mundanos que parezcan.

Desde esta perspectiva, no hay una distancia entre lo que somos y lo que vivimos. La búsqueda de una supuesta “realidad superior” queda entonces desmantelada: incluso esa búsqueda forma parte del Estar Siendo Absoluto. Negar cualquier aspecto de la experiencia, sea la dualidad, el conflicto o el error, equivale a rechazar una manifestación legítima del ser. El verdadero yo no es un estado separado, puro o libre de contradicciones, sino la totalidad de lo que acontece.

Esta visión también redefine profundamente la idea de transformación espiritual. No hay que cambiar nada para alcanzar lo absoluto, porque lo absoluto está ya siendo lo que ocurre. No se trata de escapar de la experiencia, sino de abrazarla sin condiciones. En esa aceptación radical, todo está incluido y, por tanto, todo “viene con ello”.

Este enfoque no niega el dolor, la confusión o la ilusión, sino que los reintegra como expresiones válidas del mismo movimiento absoluto. Así, vivir conscientemente el estar siendo —sin intentar huir de nada— es, en sí mismo, estar en contacto con lo Real. Todo está ocurriendo dentro del marco del verdadero yo, que no es algo a encontrar, sino algo que ya se está siendo.

jueves, 24 de abril de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (054)

054/2025- No hay otra Realidad Suprema más allá de lo que está ocurriendo en cada instante: aquello que estemos pensando, sintiendo, haciendo, experimentando, imaginando, etc., -sin excepción- ya está siendo la Realidad Suprema. Todo lo que está sucediendo, y tal como cada posibilidad está sucediendo, ya está siendo Realidad Suprema, por tanto, también las posibilidades de creer o no creer, de buscar o no buscar, de luchar o no luchar, de aceptar o no aceptar. Si puede decirse que en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto no hay división, separación, contradicción, conflicto…, es porque el estar siendo/sucediendo de la división, la separación, los problemas, etc., que pudiera estar aconteciendo y/o que se estuviera percibiendo y experimentando también estaría siendo el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, por tanto, ¿qué estarían siendo las jerarquías existenciales, los niveles concienciales, las excelencias personales y/o cualquier tipo de maestrías?
 
¡El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto consiste en el estar siendo/sucediendo de absolutamente todo cuanto -sin excepción ni categorías- está siendo/sucediendo en cada instante! Cada posibilidad está siendo la manifestación del proceso dinámico que al mismo tiempo también están manifestando todas las demás posibilidades. Entre las “cualidades humanas” también está aquella que consiste en la resistencia a aceptar la percepción de dualidad (y de cualquiera de sus posibles efectos), por mucho que ello pueda estar suponiendo la no aceptación de una parte esencial de nuestra propia naturaleza y/o del proceso natural de nuestra existencia. La experiencia de la dualidad, así como su aceptación y su negación, también está formando parte del proceso natural de la existencia humana. El posible anhelo espiritual de trascender la percepción de dualidad y/o de separación, siempre estará siendo tan legítimo y natural como cualquier otro.
 
Estar Siendo Realidad Absoluta no consiste en estar siendo algo separado ni distinto a lo que está siendo/sucediendo en cada momento, por tanto, Realidad Absoluta está siendo tanto la experiencia de unidad como la de separación. ¡Ningún anhelo podrá florecer si no lleva implícita la aceptación de su opuesto y del resto de las posibilidades! Por el simple hecho de estar sucediendo, los intentos de escapar de cualquier experiencia de la cotidianidad humana estará siendo tan natural como cualquier otra posibilidad que pueda estar manifestándose. La resistencia, la negación, el malestar, etc., ante la percepción y la experiencia de la existencia de dualidad, separación, carencia, etc., nunca podrían estar siendo posibilidades menos naturales, válidas o legítimas que las demás. Abril-25
Juande Puerta.
 
Ensayo sobre la reflexión 054/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a cuestionar la noción común de que existe una Realidad Suprema separada o trascendente al instante presente. Para él, todo lo que está ocurriendo —ya sea un pensamiento, una emoción, una acción o una percepción de dualidad— está siendo ya la Realidad Suprema. No hay nada fuera de ella, porque el "Estar Siendo" lo abarca todo: tanto la búsqueda de sentido como la confusión, tanto la aceptación como la resistencia.

Este enfoque radicalmente inclusivo desmantela las jerarquías espirituales o existenciales. No hay niveles superiores de conciencia que invaliden los niveles aparentemente más “bajos”, porque todos son expresiones del mismo proceso absoluto. En ese sentido, la experiencia humana —con todas sus luces y sombras— no es un obstáculo para alcanzar una supuesta iluminación, sino precisamente su manifestación.

La percepción de dualidad, tan debatida en tradiciones espirituales, no es vista aquí como un error que debe corregirse, sino como una posibilidad legítima dentro del abanico de lo que está siendo. Incluso el deseo de trascender la dualidad, y el malestar que esta puede generar, son aspectos naturales del flujo existencial.

Aceptar que cada instante —sin importar su forma— es ya la Realidad Suprema, implica soltar toda resistencia al momento presente. Pero incluso esa resistencia, si ocurre, no es un fallo, sino otra expresión más del estar siendo. Así, Juande Puerta nos ofrece una visión no dual donde no hay nada que excluir, rechazar o elevar por encima del resto.

En última instancia, su propuesta no niega la posibilidad del cambio o del crecimiento espiritual, sino que los integra como aspectos del mismo proceso dinámico. Toda experiencia, por el simple hecho de suceder, está siendo sagrada. Y esa comprensión puede resultar, paradójicamente, liberadora.

miércoles, 2 de abril de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (046)

046/2025 -A la vez, nuestro estar siendo/sucediendo personal también está siendo el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto y/o de absolutamente todo aquello que cada uno de nosotros pueda estar pensando, sintiendo, realizando y viviendo. Nada -por doloroso, contradictorio e indeseable que pueda percibirse y experimentarse- puede estar siendo ajeno al Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. La posibilidad de trascender algunos aspectos de la percepción individualizada y/o fragmentada de la Realidad no cambiará que -incluido eso- todo continúe consistiendo en Estar Siendo Absoluta Realidad. El reconocimiento y la aceptación de que nuestro estar siendo particular también está consistiendo en Estar Siendo la Vida misma —con todas sus luces y sombras—, “no” elimina las dificultades, sino que las asume e integra como parte del Suceder Absoluto.
 
Al asumir que nuestros posibles conflictos internos están siendo manifestaciones absolutamente legítimas y naturales también podremos cambiar nuestra relación esas manifestaciones y en lugar de verlos como obstáculos o adversidades que deben eliminarse, percibirlos como expresiones de nuestro estar siendo esencial. Esto “no necesariamente” disolverá el dolor o la dificultad, pero sí puede aliviar la carga adicional que genera la resistencia o la frustración por sentir que “algo está mal”. Delante de una pérdida o un fracaso, en lugar de caer en una lucha interna contra lo que sucede, podríamos dejar que ese estar siendo/sucediendo particular se desenvuelva sin juzgarlo como una agresión y/o una ruptura, sino como una expresión natural de la Vida.
 
Puesto que todos los estar siendo/sucediendo humanos, con nuestras luchas y contradicciones, estamos siendo parte del mismo Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, igual que disponemos de la posibilidad de culpar o rechazar, también tenemos la opción de comprender, reconocer y aceptar. Una percepción más holística de la Realidad (ver en su totalidad y en su complejidad nuestro estar siendo/sucediendo particular junto al del resto de las posibilidades) puede suponer un mayor reconocimiento y un cambio de actitud ante cualquier manifestación de la Vida. En la medida que dejemos de pelear contra nuestro “estar siendo particular” —es decir, contra las limitaciones, contradicciones o frustraciones que nos definen como individuos—, también estaremos dejando de resistirnos a la Vida y/o la Realidad en su totalidad. La comprensión de que nuestro estar siendo particular no está separado del Estar Siendo Absoluto conduce a una reconciliación consigo mismo y con el resto de la Vida. Abril-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 046/2025 realizado con IA:

El texto de Juande Puerta nos invita a una reflexión profunda sobre la naturaleza de nuestra existencia y su relación con una realidad más amplia, que él denomina el "Estar Siendo/Sucediendo Absoluto". Este concepto sugiere que todo lo que experimentamos —pensamientos, sentimientos, acciones y vivencias— no solo forma parte de nuestro ser individual, sino que está intrínsecamente conectado a un suceder universal que abarca tanto lo deseable como lo doloroso. Nada, por contradictorio o indeseable que parezca, queda fuera de este flujo absoluto.

Juande Puerta plantea que aceptar esta interconexión no elimina automáticamente las dificultades de la vida, pero transforma nuestra manera de relacionarnos con ellas. Al reconocer que nuestros conflictos y sufrimientos son manifestaciones naturales del mismo "Estar Siendo", dejamos de percibirlos como errores o agresiones externas y los integramos como parte del proceso vital. Esta perspectiva no promete erradicar el dolor, pero sí alivia el peso adicional que surge de resistirnos a lo inevitable. Por ejemplo, ante una pérdida, en lugar de luchar contra ella, podríamos permitir que se desenvuelva como una expresión legítima de la existencia, reduciendo así la frustración o el juicio.

El autor también destaca la posibilidad de adoptar una visión más holística, donde nuestro "estar siendo particular" se entrelaza con el de los demás y con la totalidad de la Realidad. Esta comprensión nos abre a la opción de aceptar en lugar de rechazar, de reconciliarnos con nuestras limitaciones en vez de pelear contra ellas. Al hacerlo, no solo dejamos de resistirnos a nuestra propia vida, sino también a la Vida en su conjunto. En última instancia, Juande Puerta sugiere que esta aceptación nos conduce a una paz interior, no porque las sombras desaparezcan, sino porque aprendemos a verlas como parte inseparable de la luz que define la Realidad Absoluta.

lunes, 31 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (045)

045/2025 -¿Qué conflictos podríamos tener los estar siendo/sucediendo humanos con la Vida, cuando el estar siendo/sucediendo humano también está siendo la manifestación de la Vida misma? Los conflictos surgen de la identificación mental y/o consciencial con un “yo soy” limitado y/o un estar siendo particular, fruto del olvido de que ese mismo “yo soy” está sucediendo inseparablemente del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (Realidad, Vida). Sin embargo, puesto que estamos siendo manifestaciones de la Vida que estamos viviendo en cada momento, he ahí que el conflicto no está siendo con la Vida en sí, sino con la percepción y la interpretación egocéntrica de nuestro propio estar siendo. La discordancia emerge de la creencia de que nuestro estar siendo/sucediendo individual consiste un estar siendo separado del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.
 
Nuestros conflictos con la vida solo pueden estar siendo manifestaciones absolutamente naturales. A pesar de que nuestro estar siendo particular está condicionado por una conciencia que percibe dualidades: placer y dolor, éxito y fracaso, aceptación y rechazo, las manifestaciones humanas surgen de manera absolutamente natural. Nuestra percepción fragmentada de la Realidad está siendo parte de lo que nos define como humanos, y, al mismo tiempo, está siendo una manifestación del Estar Siendo Absoluto que también estamos siendo. Al consistir en el estar siendo/sucediendo de todas las posibilidades, la Vida también incluye la posibilidad de que nos sintamos en conflicto con nuestro estar siendo particular y con nuestro Estar Siendo Absoluto.
 
Ya que absolutamente todas las posibilidades —sin excepción— están formando parte y/o conformando el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, entonces la resistencia, el rechazo o la lucha que experimentamos como humanos no pueden estar siendo anomalías ni errores, sino expresiones intrínsecas del mismo flujo de la Vida. Los conflictos no están siendo algo que deba “erradicarse” como si fueran ajenos a la Vida, sino que están siendo manifestaciones tan naturales como el amor, la felicidad, la alegría o la paz. Al reconocer los conflictos como parte del Suceder Absoluto, podemos dejar de pelear contra ellos e integrarlos en una aceptación más amplia. Lo “natural” no solo abarca lo armónico y placentero; también lo caótico, lo doloroso y lo contradictorio, todo ello siendo manifestaciones del mismo Absoluto. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 045/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta invita a una profunda reconsideración de nuestra relación con la Vida y los conflictos que experimentamos como seres humanos. Su planteamiento parte de una premisa ontológica radical: nosotros, como humanos, no estamos separados de la Vida, sino que somos la Vida misma en su estar siendo y sucediendo. Sin embargo, los conflictos emergen cuando nos identificamos con un “yo soy” limitado, un constructo mental que nos hace olvidar nuestra conexión inseparable con el Estar Siendo Absoluto. Este olvido no es un error, sino una manifestación natural de la conciencia humana, que percibe la realidad a través de dualidades como placer y dolor, éxito y fracaso.

El núcleo de esta reflexión radica en que el conflicto no es con la Vida en sí, sino con nuestra interpretación egocéntrica de su manifestación. Al creernos entidades separadas, experimentamos una discordancia que, paradójicamente, también forma parte del flujo absoluto de la Vida. Juande Puerta sugiere que la Vida, al abarcar todas las posibilidades, incluye tanto la armonía como el caos, tanto la paz como la lucha. Así, los conflictos no son anomalías que debamos eliminar, sino expresiones intrínsecas de nuestra condición humana y, por ende, del Estar Siendo Absoluto.

Esta perspectiva transforma nuestra relación con el sufrimiento y la resistencia. En lugar de rechazarlos como algo ajeno, podemos reconocerlos como parte del mismo suceder que incluye la alegría y el amor. Integrar los conflictos en una aceptación más amplia no implica resignación, sino una reconciliación con la totalidad de la existencia. Lo “natural”, entonces, no se limita a lo placentero, sino que abarca lo contradictorio y lo doloroso como manifestaciones legítimas del Absoluto. Al comprender esto, dejamos de pelear contra nosotros mismos (nuestro estar siendo particular) y, en última instancia, contra la Vida que estamos siendo.

sábado, 29 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (044)

044/2025- Absolutamente nada existe ni sucede que -por subjetivo, ínfimo y fugaz que resulte- no consista en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, de ahí que lo extraordinario y lo trascendental de “Lo Absoluto” radica en que consiste en el incesante estar siendo/sucediendo de absolutamente todas las posibilidades a la vez. Amar, es decir, experimentar esa emoción, conlleva implícita la aceptación del estar siendo/sucediendo Absoluto, por tanto, la aceptación de todos y cada uno de los aspectos pertenecientes a nuestro estar siendo/sucediendo particular y del resto de las posibilidades. Amar, no se limita a aceptar solo lo que pueda agradarnos o beneficiarnos en cada momento, sino que también incluye “la aceptación del estar siendo/sucediendo” de aquello que podríamos rechazar o que fuese en contra de nuestras posibles preferencias y deseos.
 
Incluso la lucha contra lo que sucede -la vida con todas sus contradicciones y dualidades- se convierte en amor cuando se reconoce y acepta el estar siendo/sucediendo -a la vez particular y Absoluto- de la lucha. Del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto no puede excluirse absolutamente ninguna particularidad, porque consiste en el “estar siendo/sucediendo inseparable e indiscriminable” de absolutamente todas las particularidades a la vez. ¿Sería posible estar siendo/estar sucediendo sin la aceptación de estar siendo/sucediendo? Todo —incluida la no aceptación— está siendo y sucediendo como parte integral de esa totalidad que trasciende las categorías de aceptación y/o rechazo.

Reconocer y/o no reconocer esta posibilidad no altera el hecho de que ya estamos siendo exactamente eso que está sucediendo, aquí y ahora, en el flujo constante de la Realidad Absoluta. La aceptación de la Realidad de los estar siendo/sucediendo humanos no es un requisito para que la Realidad esté siendo/sucediendo; más bien, se trata de una actitud que las personas podemos adoptar para alinearnos con esa Realidad que estamos siendo cada uno de nosotros y también todo aquello que podamos estar percibiendo y viviendo. La aceptación del estar siendo/sucediendo particular y universal permite vivir cada una de sus manifestaciones más armónicamente y/o menos conflictivamente. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 044/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a contemplar una visión profundamente integradora de la existencia, donde todo —lo subjetivo, lo ínfimo, lo fugaz— forma parte del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Este concepto sugiere que no hay nada que escape a esta totalidad: cada posibilidad, cada experiencia, cada contradicción, está contenida en un flujo indivisible y simultáneo. Lo extraordinario de “Lo Absoluto” no reside en su lejanía, sino en su inmanencia; consiste en el estar siendo de todo a la vez, sin exclusiones.

En este marco, amar se convierte en un acto de aceptación radical. No se trata de un amor selectivo, que abraza solo lo placentero o conveniente, sino de una apertura que incluye incluso lo que podríamos rechazar. Juande Puerta plantea que amar implica reconocer el estar siendo/sucediendo de cada aspecto de la realidad, tanto el particular como el global. Incluso la resistencia o la lucha contra lo que acontece se transforma en amor cuando se acepta como parte de ese mismo movimiento absoluto. Esta idea desafía nuestras nociones habituales de amor, que suelen estar condicionadas por preferencias y dualidades.

La pregunta que surge —si es posible estar siendo sin aceptar ese estar siendo— encuentra respuesta en la propia reflexión: todo, incluida la no aceptación, ya está siendo. No hay escapatoria del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, porque este no discrimina ni excluye. Reconocerlo o no es secundario; la Realidad Absoluta no solo sucede independientemente de nuestra actitud, sino que la incluye. Sin embargo, Juande Puerta sugiere que la aceptación consciente de esta totalidad —de nuestro estar siendo particular y del universal— nos permite vivir más armónicamente, alineados con el flujo de lo que también estamos siendo.

Así, la aceptación no es un prerrequisito para la existencia, sino una elección que facilita una relación menos conflictiva con la vida. En este sentido, amar y aceptar se entrelazan como caminos hacia una experiencia más plena de la Realidad Absoluta que está constituyéndonos.

jueves, 27 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (043)

043/2025 -No hay nada superior ni más trascendental que el Estar Siendo/Sucediendo Presente y/o Absoluto, que también consiste en el estar siendo/sucediendo de cada uno de nosotros y de todas nuestras posibles manifestaciones. Lo Absoluto, lo Supremo, la Realidad, etc., no está siendo una meta que deba alcanzarse, sino la Esencia Misma de absolutamente todas las formas de existencia y de absolutamente todos los acontecimientos posibles. La inteligencia emocional, la sabiduría emocional, el bienestar emocional, la paz interior, etc., que cada individuo tiene la capacidad de generar y experimentar, fluye del reconocimiento y la aceptación de que todo sin excepción Está Siendo Realidad Absoluta, por tanto, del reconocimiento y la aceptación de cualquier estar siendo/sucediendo, por más simple, sencillo, natural, ordinario, cotidiano e insignificante que aparezca.

La paz y/o el bienestar interior residen en cada pequeño detalle de la vida ordinaria, pues el simple hecho de estar sucediendo ya consiste en estar siendo una manifestación de la Realidad Absoluta. No se puede escapar de la vida ordinaria, porque estar siendo la vida ordinaria consiste en Estar Siendo la Vida Misma. El discurrir ordinario de la vida (Realidad), con sus altibajos y todas las variables posibles, ya está siendo la Vida Misma en acción. El hecho de que las individualidades y/o las particularidades no tengamos una existencia permanente ni independiente del resto, pues estamos siendo un reflejo temporal y/o una forma momentánea que surge del Flujo Absoluto, no significa que estar siendo cada una de esas posibilidades consista en un estar siendo/sucediendo ilusorio ni un estar siendo/sucediendo incompleto.
 
Todo aquello que cada individuo está siendo, pensando, percibiendo, realizando, experimentando, etc., en cada momento, también está formando parte del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, que no discrimina ni privilegia ninguna manifestación sobre otra. La aceptación consciente de que Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en estar siendo absolutamente todo cuanto pueda estar existiendo, sucediendo, manifestándose y/o viviéndose, no supone pasividad, resignación ni indiferencia, sino el ejercicio de la capacidad de adaptación a la naturaleza dinámica de la existencia. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 043/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a contemplar una visión profundamente unificadora y liberadora de la existencia: el "Estar Siendo/Sucediendo Presente y/o Absoluto" como la esencia misma de todo lo que está siendo. Este planteamiento trasciende la idea de que lo Supremo o la Realidad sea algo externo o una meta a alcanzar, proponiendo en cambio que ya está plenamente presente en cada instante, en cada manifestación de la vida, por más ordinaria que parezca. No hay separación entre lo cotidiano y lo trascendental; el simple acto de existir, de suceder, está siendo en sí mismo la expresión de lo Absoluto.

Juande Puerta subraya que la paz interior, la inteligencia emocional y el bienestar no surgen de escapar de la vida ordinaria ni de buscar algo más allá, sino de reconocer y aceptar que todo —cada pensamiento, cada percepción, cada evento— está siendo una manifestación de esa Realidad Absoluta. Esta aceptación no implica pasividad, sino una adaptación activa y consciente al flujo dinámico de la existencia. La vida, con sus altibajos, no necesita ser trascendida; todo, en su discurrir natural, está siendo la Vida Misma en acción.

Un aspecto clave de esta reflexión es la disolución de la dualidad entre lo "importante" y lo "insignificante". Nada tiene privilegio sobre nada; todo forma parte del mismo Flujo Absoluto. Nuestra individualidad, temporal y dependiente, no es ilusoria ni incompleta, sino una expresión legítima de ese Todo. Así, el bienestar reside en abrazar esta interconexión, en comprender que estar siendo —en cualquier forma— es participar plenamente en lo Absoluto. Esta perspectiva nos desafía a encontrar lo sagrado en lo simple, a vivir con una consciencia que no rechaza ni idealiza, sino que se alinea con la naturaleza cambiante y total de la Realidad. Es un llamado a la presencia, a la aceptación y, en última instancia, a la libertad interior.

martes, 25 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (042)

042/2025 -El sentimiento humano del amor consiste en el efecto y/o la consecuencia de la autoconciencia y de la aceptación de la Realidad, es decir, del reconocimiento de la autenticidad de absolutamente cada posibilidad -comenzando por la del propio estar siendo- que pueda estar sucediendo. La emoción del amor se crea y se experimenta en la medida que se está reconociendo y aceptando que “nada está siendo algo, que estar siendo eso no consista en el mismo Estar Siendo/Sucediendo que también estaría siendo todo lo demás (Absoluto). El sentimiento del amor siempre está presente, porque en una medida u otra siempre se está aceptando algún aspecto -tanto los positivos como los negativos- del sí mismo, de los demás y del incesante fluir de la Vida.

Amar no es una acción que requiera esfuerzo ni contrapartidas interesadas; estamos amando y siendo amados por el simple hecho de estar reconociendo y aceptando la existencia propia y la del resto de las posibilidades. El sentimiento natural, que siempre está emergiendo de la comprensión y de la aceptación del estar siendo/sucediendo propio, de los demás, del mundo y de cualquier otra posibilidad que pueda estar manifestándose, no estará sujeto a la obediencia de las normas morales, religiosas, espirituales, culturales, etc., establecidas por algunos individuos y/o por las conveniencias sociales.
 
Estar Siendo Realidad consiste en estar siendo el flujo continuo de circunstancias, acontecimientos, cambios y posibilidades que están manifestándose en cada momento, por tanto, el sentimiento del amor nunca podría quedar limitado por la observancia de reglas excluyentes o discriminatorias. La comprensión y la aceptación de la Realidad lleva implícita la capacitación para adaptarse a su naturaleza absolutamente cambiante e imprevisible. Lo personal y lo colectivo, lo finito y lo infinito, lo temporal y lo intemporal, etc., están coexistiendo y siendo posibilidades inseparables. A la vez, todo está siendo un proceso inseparablemente particular y universal.
 
Cada entidad y/o particularidad está siendo única, pero no existe de manera aislada, sino en relación con todas las demás. Lo divino está siendo y expresándose a través de cada momento de vida, de cada suceso y de cada posible vivencia, sin excluir nada. La individualidad está siendo una manifestación momentánea dentro del Estar Sucediendo Absoluto. Mientras que la aceptación de la Realidad -que incluye el estar siendo de cada individuo- genera la percepción de armonía, el rechazo y/o la resistencia ante cualquier aspecto de la Realidad origina sentimientos de malestar y sufrimiento, porque ello también estará suponiendo una negación de sí mismo. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 042/2025 realizado con IA:

Juande Puerta plantea una concepción del amor profundamente ligada a la autoconciencia y a la aceptación de la Realidad, entendida como el flujo continuo de posibilidades que configuran el "Estar Sucediendo Absoluto". En su reflexión, el amor no es un acto voluntario ni una transacción condicionada por esfuerzo o expectativas, sino una consecuencia natural del reconocimiento de cada aspecto del ser —propio y universal— en su esencia cambiante e impredecible. Este enfoque trasciende las nociones tradicionales que vinculan el amor a normas morales, religiosas o culturales, proponiendo que emerge espontáneamente cuando se abraza la totalidad de lo que es, sin exclusiones ni juicios.

Para Juande Puerta, la Realidad es un proceso simultáneo que integra lo personal y lo colectivo, lo finito y lo infinito, donde la individualidad se revela como una manifestación efímera dentro de un todo mayor. El amor, entonces, se siente en la medida en que se aceptan tanto los aspectos luminosos como los sombríos de uno mismo, de los demás y de la Vida en su incesante devenir. Esta aceptación no implica pasividad, sino una capacidad activa de adaptación a la naturaleza dinámica de la existencia. Al reconocer que "lo divino" se expresa en cada suceso, sin discriminar, Juande Puerta sugiere que el amor está siempre presente, incluso en grados sutiles, porque siempre hay algún nivel de aceptación operando en nuestra experiencia.

Por el contrario, el rechazo o la lucha contra el devenir de la Realidad —que incluye nuestro propio "estar siendo"— genera sufrimiento, al convertirse en una negación de nuestra esencia. Así, la armonía surge de la comprensión y la entrega al flujo de la Vida, mientras que el malestar refleja una resistencia a lo inevitable. En esta visión, el amor no es un ideal a alcanzar, sino una expresión intrínseca de la conexión con el "Estar Sucediendo Absoluto", un sentimiento que florece al aceptar la unidad inseparable de todo lo que acontece.

domingo, 23 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (041)

041/2025 -Sin excepción, todo lo que un individuo pueda estar pensando, percibiendo, viviendo, imaginando, etc., "ya estará consistiendo" en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto y/o Supremo, por tanto, también lo estará siendo la posibilidad de la creencia en la necesidad de buscar algo mejor o superior, así como la posibilidad de la renuncia a esa idea, creencia o percepción. ¡Estar Siendo la Divinidad Suprema de las creencias, de las tradiciones, de los dogmas religiosos y de las intuiciones humanas consiste en estar siendo todo cuanto pueda estar existiendo o no, sucediendo o no y siendo vivido o no! Desde lo más mundano, cotidiano e insignificante, hasta lo más profundo y extraordinario, todo está formando parte del "Estar Siendo/Sucediendo Supremo".

El Estar Siendo/Sucediendo Supremo nunca podría estar limitado a una sola tradición, filosofía o sistema de pensamiento, pues trasciende y engloba todas las posibilidades e interpretaciones humanas. La Realidad Suprema y/o Absoluta incluye estar siendo lo manifestado y lo inmanifestado, lo real y lo posible, lo conocido y lo desconocido, lo presente y lo ausente. La percepción de individualidad (yo soy) está incluida en el "Suceder Absoluto", de ahí que no puede estar siendo algo permanente ni independiente. Los estar siendo/sucediendo humanos no solo consistimos en estar siendo una identidad personal; también estamos siendo parte integral de una Realidad Absoluta que incluye absolutamente todo lo que existe y sucede…, en la que las formas, los acontecimientos y las experiencias surgen y desaparecen sin tener una existencia separada del resto.
 
La estabilidad emocional y la paz interior que podamos experimentar los estar siendo/sucediendo humanos tendrá su origen en la autoconciencia, la aceptación y la adaptación al flujo constante de la Realidad Absoluta, que también estamos siendo. El bienestar emocional -resultado de la inteligencia y/o la sabiduría emocional- no es un regalo externo ni un estado permanente, sino una experiencia personal que requiere estar en sintonía (aceptación) con el estar siendo/sucediendo individual y del resto del movimiento natural de la existencia. La Vida y/o la Realidad consiste en estar siendo ese flujo y/o estar sucediendo constante que nos incluye; la paz emocional o interior depende de nuestra capacidad de ajustarnos a sus movimientos en lugar de luchar contra ellos. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 041/2025 realizado con IA:

Juande Puerta nos invita a contemplar una visión radicalmente integradora de la existencia: el "Estar Siendo/Sucediendo Supremo" como una Realidad Absoluta que abarca todo, desde lo más trivial hasta lo más sublime, sin excepciones ni límites. Esta propuesta trasciende las categorías humanas tradicionales —creencias, doctrinas, dogmas— y se presenta como un flujo dinámico que incluye tanto lo manifestado como lo inmanifestado, lo real y lo posible. En este marco, la individualidad, con sus pensamientos, percepciones y vivencias, no es una entidad separada, sino una expresión inseparable de esa totalidad absoluta.

Juande Puerta plantea que incluso la búsqueda de algo "mejor" o la renuncia a esa búsqueda están contenidas en este "Estar Siendo Supremo". Esta idea desafía la noción de un yo autónomo y sugiere que la percepción de independencia es ilusoria: somos, al mismo tiempo, una identidad personal y una parte esencial de un suceder cósmico. Aquí radica una paradoja liberadora: todo lo que experimentamos, desde lo cotidiano hasta lo extraordinario, ya forma parte de esta Realidad Suprema, eliminando la necesidad de buscar algo externo para completarnos.

El autor conecta esta visión metafísica con el bienestar emocional, argumentando que la paz interior surge de la autoconciencia y la aceptación del flujo constante de la existencia. La estabilidad no es un estado fijo ni un regalo externo, sino una sintonía con el "estar siendo" individual y universal. La Vida, como un "suceder constante", exige adaptación en lugar de resistencia. Así, la sabiduría emocional se convierte en un acto de alineación con la corriente natural de la Realidad. La reflexión de Juande Puerta nos recuerda que lo divino no está fuera, sino que está siendo todo lo que es y no es. En última instancia, nos llama a vivir con una apertura radical, abrazando el cambio como la esencia de la paz.

miércoles, 19 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (039)

039/2025 -Puesto que nuestra Realidad y/o Naturaleza Esencial siempre está siendo dinámica, cambiante y en permanente transformación, quizás en lugar de anhelar una estabilidad imposible e inalcanzable resultaría más sensato “vivir aceptando y/o amando” la variabilidad de las condiciones y de las posibilidades que ofrece nuestra naturaleza. En lugar de vivir luchando por alcanzar ese “estado estable” que supusiera la alteración y/o la adulteración de nuestra Naturaleza Esencial, quizás resultaría más efectivo el reconocimiento y la aceptación de que no hay otra Realidad que no esté siendo exactamente todo eso que esté siendo, todo eso que esté sucediendo y todo eso que se esté viviendo en cada instante.
 
En un mundo donde la naturaleza, y por extensión la vida de los estar siendo/sucediendo humanos, siempre está manifestándose dinámica y cambiante, la búsqueda de un estado fijo o inmutable podría verse lógica y prometedora, pero también completamente innecesaria. La incertidumbre, los cambios, la transformación y la desaparición (muerte) están siendo fenómenos inherentes del flujo de la Vida y/o de la Realidad (Presente), de ahí que la auténtica sabiduría consistirá en el ejercicio de la capacidad de aceptación de nuestro propio estar siendo/sucediendo y también de la adaptación a absolutamente todas las posibles manifestaciones.
 
La vieja idea o creencia de un estado final, estable o inmutable, al que debamos aspirar en nuestra vida o en nuestro desarrollo espiritual, estará siendo igual de racional y respetable como cualquier otra que pueda estar fluyendo de las condiciones que la estará originando. La Realidad Misma y/o el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto consiste en un proceso continuo de transformación, de ahí que la posibilidad de aferrarse a la expectativa de alcanzar un estado absoluto de estabilidad corresponda a una percepción absolutamente egocéntrica y/o individualista. Estar Siendo Realidad consiste en el estar siendo/sucediendo de absolutamente todas las posibilidades a la vez, por tanto, estar siendo exactamente eso que cada individuo está siendo, exactamente eso que cada individuo está viviendo en cada momento y -sin excepción- también el resto de las posibilidades. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 039/2025 realizado con IA:

El texto de Juande Puerta invita a una reflexión profunda sobre la naturaleza cambiante de la realidad y la actitud que deberíamos adoptar ante ella. Propone que, en lugar de perseguir una estabilidad ilusoria e inalcanzable, sería más sabio aceptar la variabilidad inherente a nuestra existencia. Esta idea desafía la concepción tradicional de buscar un estado fijo o perfecto, ya sea en la vida cotidiana o en el ámbito espiritual, y sugiere que tal búsqueda podría ser una distorsión de nuestra "Naturaleza Esencial", que es dinámica y transformadora por definición.

Juande Puerta argumenta que la Realidad no es algo separable de lo que está ocurriendo en cada instante: está siendo el flujo continuo de eventos, cambios y posibilidades. En este sentido, la vida humana, como parte de esa Realidad, está intrínsecamente ligada a la incertidumbre y a la transformación, incluyendo la muerte como un fenómeno natural del "estar siendo/sucediendo". Resistirse a este dinamismo, aferrándose a la idea de un estado inmutable, sería no sólo inútil, sino también una postura egocéntrica que ignora la totalidad del proceso vital. La verdadera sabiduría, según el autor, radica en aceptar este flujo y adaptarse a él, reconociendo que no hay una realidad alternativa más allá de lo que está sucediendo en el presente.

Esta perspectiva resuena con filosofías que valoran el desapego y la fluidez, como el taoísmo o el budismo, pero Juande Puerta la enmarca en un lenguaje propio, enfatizando el "estar siendo" como un acto simultáneo de existencia y transformación. Así, vivir plenamente implicaría abrazar todas las posibilidades —las que experimentamos individualmente y las que no— sin intentar fijarlas. En un mundo en constante cambio, la paz no vendría de la estabilidad, sino de la armonía con lo variable.

jueves, 13 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (036)

036/2025 -El concepto del “amor” consiste en un sinónimo de la “aceptación” del estar siendo/sucediendo personal y universal, por tanto, siempre que se habla de la necesidad y de los beneficios de amarse a uno mismo, a los demás y al resto del mundo, también está expresándose que no es posible vivir sintiéndose en armonía consigo mismo y con la totalidad de la existencia sin la correspondiente “aceptación” del estar siendo/sucediendo particular y universal. Negar que al mismo tiempo todo está siendo el estar siendo/sucediendo individual y el estar siendo/sucediendo universal supone vivir en la actitud de no-aceptación de la Realidad y/o de la Vida que se está siendo. Amarse a sí mismo implica sentirse en paz (aceptación) con el estar siendo/sucediendo propio y con el estar siendo/sucediendo de todo aquello que se pueda estar viviendo.

Podría decirse que el amor, es decir, el sentimiento y/o la emoción que conscientemente se experimenta en la medida que está aceptándose el flujo de la vida, también supone una forma de conocimiento del grado de armonía con uno mismo, con los demás, con el mundo y con la vida. El amor que se experimenta está reflejando y/o marcando la medida de la aceptación y/o de la resistencia ante todo aquello (Realidad Absoluta) que -incluidos cada uno de nosotros- está siendo/sucediendo en cada instante. El amor, en su esencia más pura, no está siendo solo un sentimiento o una relación entre personas (como el amor romántico o familiar), sino un estado que resulta de la aceptación del estar siendo/sucediendo tanto en lo individual como en lo colectivo y universal.

La aceptación del estar siendo/sucediendo abarca tanto lo que acontece dentro de nosotros como lo que sucede fuera, porque -sin excepción- absolutamente todo está consistiendo en Estar Siendo Realidad Absoluta. Amar lo que está sucediendo no significa que no hagamos nada al respecto, pero sí que nuestra acción estará emergiendo desde la aceptación, y no desde la resistencia o el rechazo. El amor no es algo que "damos o recibimos", sino eso que se revela cuando dejamos de vernos divididos e imperfectos a nosotros mismos, a los demás y al mundo. Por mucho que podamos taparlo con nuestras resistencias, dudas, miedos, etc., el amor y/o la aceptación siempre está presente: siempre está siendo y sucediendo. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 036/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta plantea una visión profunda del amor como sinónimo de aceptación, tanto del estar siendo individual como del acontecer universal. Este enfoque trasciende las concepciones tradicionales del amor como un sentimiento romántico o interpersonal, proponiéndolo como un estado de armonía que surge al aceptar conscientemente el flujo de la vida. Según esta perspectiva, amarse a sí mismo y amar al mundo no es un acto de posesión ni de intercambio, sino un reconocimiento consciente de la Realidad Absoluta que subyace en todo lo que existe y sucede. La aceptación se convierte así en la clave para vivir en paz, al eliminar la resistencia frente a lo que está siendo, ya sea en el ámbito personal o colectivo.

Juande Puerta subraya que el sentimiento del amor refleja el grado de aceptación o rechazo hacia la Realidad. Cuando resistimos lo que sucede, ya sea por miedo, duda o insatisfacción, nos alejamos de esa armonía intrínseca. En cambio, al aceptar el estar siendo/sucediendo, surge un estado de amor y/o armonía que no depende de condiciones externas, sino que se revela como una cualidad inherente a la existencia misma. Este planteamiento invita a reconsiderar nuestra relación con la vida: amar (aceptar) no implica pasividad ni conformismo, sino actuar desde una conciencia de comprensión profunda, donde las acciones emergen sin la carga del rechazo o la negación.

Finalmente, Juande Puerta subraya la omnipresencia del amor como un estado inherente que no necesita ser dado ni recibido, sino descubierto al disolver las barreras del miedo y la duda. Esta visión invita a una transformación radical: amar es dejar de percibirnos como entidades imperfectas, abrazando la vida en su totalidad. El amor, así, no es un destino, sino una consecuencia del reconocimiento continuo de lo que siempre ha estado siendo.

martes, 4 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (032)

032/2025 -Nada puede estar siendo/sucediendo sin que -sin excepción- el estar siendo/sucediendo de eso -incluidos los sueños- no consista en Estar Siendo Realidad Absoluta, de ahí que nada puede estar siendo/sucediendo sin que el estar siendo/sucediendo de eso no esté siendo natural y realidad. Nuestro estar siendo/sucediendo individual, a la vez también está siendo el estar siendo/sucediendo que está manifestándose en absolutamente todas las demás posibilidades, particularidades y eventualidades (lo Absoluto), por tanto, la aceptación de aquello que cada individuo pueda estar viviendo y deseando vivir exige la aceptación de nuestra propia naturaleza..., y viceversa.
 
Nuestro propio "estar siendo/sucediendo" no está siendo un fenómeno aislado, sino una manifestación inseparable del flujo universal (lo Absoluto). ¡Nada que esté sucediendo dejará de estar siendo absolutamente natural que suceda! Incluso la resistencia ante cualquier estar sucediendo (pensamientos, emociones, sensaciones, circunstancias, acontecimientos, etc.,) estaría siendo tan natural como su aceptación. Por el simple hecho de estar sucediendo, todos los estados y aconteceres posibles estarán siendo naturales, pues la esencia de cada uno de ellos en particular, y de todos ellos a la vez, no puede estar siendo otra que la del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.
 
No solo los acontecimientos son naturales; también nuestras reacciones ante ellos, incluso cuando estén siendo de negación o de rechazo. Absolutamente todo lo que ocurre está siendo natural que ocurra, y todas las respuestas humanas a esos eventos —ya sea de aceptación o de rechazo— también estarán siéndolo. El estar siendo/sucediendo de cada individuo también está consistiendo en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto y viceversa. El estar siendo/sucediendo de cada persona no está siendo independiente o ajeno al Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. ¡Estar siendo un yo particular (con condiciones, características, experiencias y expectativas propias), a la vez también consiste en estar siendo el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto!
 
La dualidad, la diversidad, la conflictividad, los cambios, etc., que permanentemente está percibiendo y experimentando cada estar siendo/sucediendo humano solo puede proceder de la simultaneidad de su naturaleza particular y Absoluta. La permanente sensación de dualidad, que experimentamos los estar siendo/sucediendo humanos, no puede estar siendo un error ni una ilusión que tengamos que eliminar, sino la consecuencia natural de Estar Siendo Realidad Absoluta al mismo tiempo que una individualidad concreta y cambiante. La percepción de dualidad no tiene que erradicarse, porque está siendo absolutamente natural; en lugar de eso bastaría con que se comprendiera y aceptara lo más naturalmente posible. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 032/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a una profunda comprensión de la naturaleza de la existencia, en la que todo lo que ocurre, sin excepción, está siendo una manifestación del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Esto significa que no hay eventos, pensamientos, emociones o experiencias que puedan considerarse fuera de lo real o lo natural. Incluso los sueños y las resistencias personales forman parte de este flujo universal.

Desde esta perspectiva, el individuo no es una entidad aislada, sino una manifestación del Todo. La aceptación de cualquier estado o experiencia que podamos vivir implica, en última instancia, aceptar nuestra propia naturaleza esencial. No se trata de una resignación pasiva, sino de reconocer que la dualidad, la diversidad y el cambio no son errores ni ilusiones que deban eliminarse, sino expresiones legítimas del proceso absoluto de la existencia.

Un punto clave de esta reflexión es que incluso la resistencia ante ciertos eventos es tan natural como la aceptación. No hay una forma “correcta” o “incorrecta” de reaccionar, ya que todo lo que surge forma parte del mismo flujo universal. El sufrimiento humano a menudo proviene de la lucha contra esta naturaleza cambiante, al intentar fijar lo que, por esencia, está en constante transformación.

La idea de que el yo individual está siendo simultáneamente el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto nos lleva a trascender la aparente separación entre lo personal y lo universal. La percepción de dualidad no es un obstáculo que deba erradicarse, sino una condición natural de la experiencia humana. En lugar de combatirla, la clave está en comprenderla y aceptarla como parte del fluir absoluto de la Realidad. Así, la paz y la armonía no se encuentran en la resistencia, sino latente en la aceptación plena de la vida tal como está manifestándose en cada instante, en toda su diversidad y dinamismo.

miércoles, 26 de febrero de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (029)

029/2025- La paz interior, la calma y/o el bienestar dependen en gran medida de que aceptemos plenamente nuestra condición humana con su constante variabilidad, diversidad y transformación. La resistencia a aceptar las manifestaciones propias de nuestro estar siendo/sucediendo individual y Absoluto siempre genera conflicto interno. Si rechazamos nuestra propia naturaleza, es decir, la continua variabilidad de nuestros pensamientos, emociones, creencias, estados y expectativas, estaremos generando la insatisfacción, el malestar, el conflicto y el sufrimiento que experimentaremos. Nuestra mente, emociones, cuerpo, experiencias y expectativas siempre están en permanente transformación. Aceptar nuestra naturaleza implica dejar de buscar una estabilidad perenne o una identidad fija y estable.
 
La paz, la estabilidad, el despertar, la iluminación, la realización del estar siendo/sucediendo humano no radica en una permanencia estable, sino en la continua adaptación al cambio. La aceptación profunda implica comprender que “no hay nada erróneo” en el estar siendo/sucediendo/manifestando de cada uno, pues simplemente cada individuo siempre está siendo la manifestación del flujo universal y/o del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Muchas veces se asocia el fenómeno de la iluminación con un estado inmutable, pero la verdadera estabilidad no radica en la ausencia de cambio, sino la capacidad de fluir con todos los cambios. La vida no está siendo estática, de ahí que aferrarse a la idea de una permanencia sin incertidumbre carece de sentido. Aceptar el cambio como parte esencial del "Estar Siendo" es un acto de sabiduría, pues permite vivir en armonía con la naturaleza de la existencia.

La máxima meta a la que cualquier estar siendo/sucediendo humano puede aspirar siempre estará siendo la su propio estar siendo/sucediendo. La plenitud no está en llegar a ser algo distinto, sino en vivir plenamente lo que está sucediendo en cada instante. El despertar de la conciencia no supone la llegada a otro estado, que al que resulta de darse cuenta de que nunca está habiendo un estado definitivo. No hay otro estado que el del continuo estar siendo/estar sucediendo. La realización, la iluminación, el despertar, etc., no consiste en alcanzar un estado especial o permanente, sino en darse cuenta y asumir que nunca ha habido ni habrá otra realidad que la del estar siendo/sucediendo. Febrero-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 029/2025 realizado con IA:

La paz interior y el bienestar dependen de nuestra capacidad para aceptar la naturaleza mutable de nuestra experiencia humana. Esta condición inherente de variabilidad y transformación nos invita a observar cómo nuestros pensamientos, emociones y creencias son fenómenos en constante movimiento. Resistirnos a esta realidad no solo genera conflicto interno, sino que perpetúa el sufrimiento. Al rechazar nuestra propia naturaleza cambiante, nos sumergimos en un ciclo de insatisfacción y malestar.

La búsqueda de una identidad fija e inmutable puede parecer deseable, pero en última instancia es un camino hacia la frustración. La verdadera estabilidad no radica en la ausencia de cambio, sino en nuestra habilidad para fluir con el río de la experiencia. Aceptar esta dinámica es un acto de sabiduría que nos permite vivir en armonía con la esencia de la existencia. Cada pensamiento, cada emoción y cada expectativa son manifestaciones del flujo universal; entender esto nos libera.

El despertar de la conciencia no supone alcanzar un estado especial o de llegar a ser algo diferente. Más bien, implica darse cuenta de que nunca existió un estado definitivo al que aspirar. En este sentido, la plenitud se encuentra en vivir completamente lo que está sucediendo ahora, en cada instante. La iluminación, entonces, es simplemente la comprensión de que somos parte de un proceso continuo, donde cada cambio es una oportunidad para expandir nuestra conciencia.

Aceptar el cambio como elemento esencial del "estar siendo" es la clave para experimentar una paz duradera. No hay nada erróneo en nuestra experiencia de vida; cada manifestación es el reflejo del "Estar Siendo/Sucediendo Absoluto". Al abrazar esta verdad, nos permitimos ser quienes realmente somos: seres en constante evolución. La máxima aspiración del ser humano no es convertirse en algo distinto, sino en reconocer y valorar su propio proceso de estar siendo y sucediendo.