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lunes, 12 de mayo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (062)

062/2025 -El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (Realidad) incluye todas las experiencias humanas, desde las más brillantes hasta las más sombrías y/o perturbadoras. Ni el sufrimiento estará siendo un error que siempre deba rechazarse ni la felicidad estará siendo una verdad superior que siempre deba perseguirse. El valor de la existencia no está tanto en cómo evaluamos cada experiencia desde la perspectiva personal y/o egoica, sino en la aceptación (amor) de cuanto pueda estar siendo/sucediendo en cada momento presente. ¡Nada puede superar al simple hecho de Estar Siendo/Sucediendo!
 
La creencia de la existencia de un Dios Supremo y/o de un Más Allá perfecto es uno de los recursos que -generalmente a modo de excusa retórica- los estar siendo/sucediendo humanos más acostumbramos a emplear para justificar la experiencia de aquello que podamos estar viviendo. La búsqueda, igual que la no búsqueda, de nuestro verdadero yo, ya consiste en el estar siendo/sucediendo de nuestro verdadero yo. ¿Por qué alguna de las condiciones propias de los estar siendo/sucediendo humanos tendría que verse como un defecto o una imperfección, y no verse como una cualidad natural más? ¿Por qué la búsqueda de la perfección no podría estar siendo parte de la perfección que se estuviera buscando?
 
Ninguna religión, ninguna filosofía, ninguna doctrina, ninguna espiritualidad, ninguna ideología, ninguna enseñanza, ninguna cultura, ninguna mente iluminada, ninguna experiencia, etc., cambiará que el Estar Siendo Absoluto (Realidad) consista en “el estar siendo preciso” de absolutamente todo cuanto esté existiendo y/o sucediendo en cada aquí y ahora. Todo cuanto esté sucediendo en cada instante —sea cual sea su forma— estará siendo una expresión directa de la Realidad Absoluta. ¿Qué podría ser más auténtico, elevado y/o espiritual que eso? Estar Siendo el Suceder del Presente incluye el rechazo de cualquier aspecto del Suceder del Presente, y de sus efectos, igual que el reconocimiento y la aceptación de lo que está ocurriendo, y de sus efectos.
 
Absolutamente nada puede suceder, que el estar siendo/sucediendo de eso no vaya a consistir en el Estar Siendo Absoluto que -a pesar de las diferencias que puedan observarse y experimentarse- a la vez también estará siendo el resto de los sucesos. ¿Acaso ahora mismo no están sucediendo “simultáneamente” todo tipo de eventualidades y de experiencias, sin que ello suponga ninguna alteración en el Estar Siendo Absoluto? Sin excepción, cada pensamiento, percepción, emoción, reacción, instinto, relación y experiencia está siendo una manifestación completa de nuestra Naturaleza Esencial. El Estar Siendo Absoluto no excluye el suceder de la existencia de las individualidades, de los cambios, de las dualidades, de las contradicciones, de las separaciones; los contiene simultáneamente, porque también consiste en el estar siendo de cada una de esas posibilidades o manifestaciones. Mayo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 062/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta invita a una comprensión profunda y liberadora de la existencia: el Estar Siendo Absoluto, o Realidad, abarca cada instante, cada experiencia, sin jerarquías ni juicios. No hay error en el sufrimiento ni superioridad en la felicidad; ambos son manifestaciones del mismo Estar Siendo de la Realidad. Esta perspectiva desafía la tendencia humana a clasificar las experiencias desde un ego que busca rechazar lo "negativo" y perseguir lo "positivo". En cambio, Juande Puerta propone que el valor superior de la existencia radica en la aceptación (amor) de todo lo que sucede en el presente.

La idea de un Dios Supremo o un Más Allá perfecto surge como un constructo humano para justificar o escapar de sus juicios acerca de la experiencia presente. Sin embargo, incluso estas creencias, junto con la búsqueda del "verdadero yo", son parte del Estar Siendo Absoluto. Nada en la experiencia humana —ni las dualidades, ni las contradicciones— es un defecto; todo está siendo una cualidad natural de la Realidad. La búsqueda de la perfección, paradójicamente, ya está siendo parte de la perfección que se busca, porque todo lo que ocurre es una expresión completa de la Naturaleza Esencial.

Ninguna doctrina, filosofía o ideología puede alterar esta verdad: el Estar Siendo Absoluto es el "estar siendo preciso" de todo lo que existe en cada aquí y ahora. Rechazar o aceptar cualquier aspecto del presente es, en sí mismo, parte del Suceder del Presente. Esta visión disuelve la necesidad de trascender la existencia, pues cada pensamiento, emoción o experiencia ya está siendo una manifestación plena de la Realidad. ¿Qué podría ser más realista y espiritual que reconocer que todo, absolutamente todo, está siendo el Estar Siendo Absoluto en acción?

sábado, 10 de mayo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (061)

061/2025 -La búsqueda humana de lo Supremo o Trascendental refleja que formando parte de lo más profundo del estar siendo/sucediendo humano también está la predisposición a la resistencia, el rechazo y/o la negación de una parte de nuestra propia esencia; sin embargo, eso no tiene porqué significar que se trate de una imperfección ni un defecto que necesite corregirse, sino de otra condición y/o cualidad absolutamente natural que puede conocerse, reconocerse y aceptarse. Los personajes (y sus organizaciones) que se consideran delegados, servidores, fieles y/o simples seguidores de un Dios y/o de una Realidad Suprema, nunca podrían estar representando un papel más espiritual, elevado o trascendental que cualquier otro que pudiera estar siendo manifestado por otro individuo.
 
Todo lo que experimentamos -incluidas las limitaciones, contradicciones, emociones, pensamientos, instintos, percepciones y expectativas- está siendo una manifestación auténtica y completa de nuestra Naturaleza Esencial. La creencia de que existe una parte de nosotros que sea falsa, defectuosa o que necesite ser eliminada para así poder alcanzar una realidad superior, estará siendo tan lícita como cualquier otra; pero no más elevada, espiritual o superior a las demás. ¡El reconocimiento de que todo -comenzando por la propia individualidad- consiste en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, facilita la comprensión de que nadie necesita ser salvado de la manifestación de su propia naturaleza! La transformación consciencial o espiritual no se logra aprendiendo a escapar de la experiencia, sino reconociendo y aceptando plenamente todo lo que estamos siendo, manifestando y viviendo.
 
La absoluta simultaneidad de la Realidad Absoluta, es decir, de absolutamente todo cuanto existe y/o está sucediendo, no tiene porqué implicar contradicción, imperfección ni irrealidad. Estar siendo un individuo y/o un estar siendo/sucediendo humano también consiste en el estar siendo/sucediendo de un proceso en permanente transformación, por tanto, sujeto a un principio y un final. Estar Siendo Realidad Absoluta no supone que no existan realidades separadas, ni momentos aislados, ni individuos independientes; Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en el estar siendo/sucediendo de cada una de esas posibilidades y de todas las demás que pudieran manifestarse en cualquier momento. Los cambios no alteran la Realidad; los cambios también están siendo la Realidad siendo la Realidad. Mayo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 061/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta invita a una comprensión profunda de la condición humana y su relación con lo Supremo o Trascendental. Según Juande Puerta, la búsqueda de lo Absoluto no solo refleja un anhelo inherente al ser humano, sino también una resistencia o negación de aspectos de nuestra propia esencia. Esta dualidad, lejos de ser un defecto, es una cualidad natural que no requiere corrección, sino reconocimiento y aceptación. La idea desafía la noción de que ciertas expresiones humanas —como las emociones, contradicciones o limitaciones— sean menos válidas o espirituales. Todo lo que somos, desde nuestros instintos hasta nuestras aspiraciones, es una manifestación auténtica de nuestra Naturaleza Esencial.

Juande Puerta subraya que nadie, ni siquiera aquellos que se consideran representantes de una Realidad Suprema, ostenta un papel más elevado que otro. Esta perspectiva igualitaria disuelve la jerarquía espiritual, proponiendo que todas las experiencias humanas son igualmente válidas. La creencia en una parte "defectuosa" de nosotros que debe eliminarse para alcanzar una realidad superior es, en sí misma, una manifestación legítima, pero no más trascendental que cualquier otra. La transformación espiritual no consiste en escapar de la experiencia humana, sino en abrazarla plenamente, reconociendo que todo —incluida nuestra individualidad— es parte del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.

La Realidad Absoluta, según Juande Puerta, abarca simultáneamente todas las posibilidades: lo individual y lo colectivo, lo permanente y lo cambiante. Los cambios, lejos de contradecir la Realidad, son la Realidad manifestándose. Así, cada ser humano, con sus principios y finales, está siendo un proceso de transformación que no necesita salvación, sino aceptación. Esta visión libera al individuo de la necesidad de trascender su naturaleza y lo invita a vivir plenamente su existencia como una expresión completa de lo Absoluto.

martes, 6 de mayo de 2025

REFLEXIONANDO -2025 (059)

059/2025 -Sin excepción, todo cuanto los estar siendo/sucediendo humanos consideremos "no verdadero y/o no real" -como el ego, las percepciones dualistas, las identidades ilusorias, etc.,- en última instancia siempre estará siendo una manifestación o reflejo de la Realidad Absoluta. Nada, que forme parte del estar siendo/sucediendo humano -incluido aquello que hace que nos percibamos y que nos sintamos separados y limitados- estará perteneciendo a una realidad separada de la Realidad Absoluta. Estar siendo cada uno de nosotros también incluye el estar siendo de la creencia de que estamos siendo todo aquello que podamos creer que estamos siendo y de todo aquello que no podamos creer que estamos siendo. Los estar siendo/sucediendo humanos no estamos siendo una identidad fija, sino un fluir constante que abarca todas las posibilidades que cada individuo pudiera estar manifestando y/o reflejando en cada instante.

Estar siendo eso que consiste en Estar Siendo Dios, la Vida, la Realidad Última, lo Absoluto, etc., también consiste en el estar siendo/sucediendo de cada uno de nosotros y de absolutamente todo cuanto cada uno de nosotros pueda estar viviendo en cada instante. Estar siendo “eso que pudiera consistir en Estar Siendo Dios” no puede consistir en algo que no consista en el estar siendo de todo -sin excepción- lo que pueda estar sucediendo en cada instante. Lo divino y/o lo Absoluto, que los estar siendo/sucediendo humanos podemos intuir -precisamente porque también lo estamos siendo- no es algo separado del momento presente ni de lo que está ocurriendo. Estar siendo Dios, la Vida, la Realidad, etc., nunca podría consistir en ser una entidad fija o trascendente aparte, sino el "Estar Siendo Absoluto" y/o, el proceso mismo del suceder.

Las conciencias personificadas o mentes -tanto a nivel individual como colectivo- que se erigen como representantes, intermediarios, etc., de Dios y/o como cualquiera del resto de los conceptos utilizados al respecto, sólo estarán representando el papel teatral con el que esos individuos -y sus seguidores- están identificados. Dios, la Vida, la Realidad, no es un Estar Siendo/Sucediendo que habita en otra dimensión o que solo se encuentra en los momentos especiales o espirituales. Está presente ahora mismo -porque consiste en estar siendo exactamente eso- en todo lo que sucede, en cada persona y en cada cosa, incluso en lo más simple, en lo más cotidiano. Para saber qué está siendo Dios, la Realidad Última y/o lo Absoluto, solo hay que mirar lo que está pasando ahora mismo. Mayo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 059/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a un replanteamiento profundo de nuestra comprensión de la realidad, la divinidad y nuestra propia existencia. Su propuesta central radica en que todo lo que experimentamos, percibimos o consideramos —incluso aquello que juzgamos como ilusorio, falso o limitado— no está separado de la Realidad Absoluta. Esta idea desafía las concepciones dualistas que dividen lo real de lo irreal, lo divino de lo humano, lo trascendente de lo cotidiano, y nos lleva a reconocer que todo lo que sucede, incluido nuestro propio estar siendo, es una manifestación del flujo continuo de la Vida, Dios o lo Absoluto.

En primer lugar, Juande Puerta subraya que no existe una separación ontológica entre lo que consideramos "no verdadero" —como el ego, las identidades ilusorias o las percepciones dualistas— y la Realidad Absoluta. Esta afirmación disuelve la noción de que nuestras experiencias limitadas o nuestras creencias erróneas pertenecen a una realidad inferior o separada. Por ejemplo, el ego, que a menudo se percibe como una barrera para la realización espiritual, no es un error cósmico ni una entidad ajena a lo divino. Más bien, es una manifestación temporal del mismo proceso de estar siendo que constituye la Realidad Última. Esta perspectiva nos libera de la culpa o la lucha contra nuestras limitaciones, invitándonos a verlas como parte del mismo fluir de la existencia.

Además, Juande Puerta enfatiza que el estar siendo humano no es una identidad fija, sino un proceso dinámico que abarca todas las posibilidades de manifestación en cada instante. Esta idea resuena con tradiciones filosóficas y espirituales que describen la Realidad como un devenir constante, un flujo incesante de ser. En este sentido, cada pensamiento, cada emoción, cada experiencia —por mundana o elevada que parezca— está siendo una expresión de la Realidad Absoluta. Incluso nuestra sensación de separación, nuestra creencia en ser entidades individuales y limitadas, forma parte de este proceso. No hay nada que esté fuera de lo Absoluto, porque lo Absoluto es precisamente el estar siendo de todo lo que sucede.

Un aspecto particularmente revelador de esta reflexión es la redefinición de lo divino. Juande Puerta rechaza la imagen de Dios como una entidad trascendente o separada, habitando en una dimensión distinta o manifestándose únicamente en momentos especiales. En cambio, propone que Dios, la Vida o la Realidad Última está siendo el proceso mismo del suceder, presente en cada instante, en cada persona, en cada cosa. Esta visión democratiza lo sagrado, situándolo no en un más allá inalcanzable, sino en la inmediatez del ahora. Para comprender lo que es Dios, no necesitamos buscar en experiencias místicas o en conceptos abstractos; basta con observar lo que está ocurriendo en este momento: el latir del corazón, el sonido del viento, la interacción entre personas, la rutina diaria.

Esta perspectiva también tiene implicaciones éticas y existenciales. Si todo lo que sucede está siendo una manifestación de la Realidad Absoluta, entonces cada experiencia, por dolorosa o trivial que sea, tiene un valor intrínseco. El sufrimiento, la alegría, el conflicto, la paz: todos son facetas del mismo estar siendo. Esto no significa que debamos aceptar pasivamente el dolor o la injusticia, sino que podemos abordarlos desde una comprensión más amplia, reconociendo su lugar en el flujo de la Vida. Asimismo, esta visión nos invita a soltar las identificaciones rígidas con roles, creencias o narrativas personales, ya que estas son solo expresiones temporales de un proceso mucho mayor.

Por último, Juande Puerta advierte contra las conciencias personificadas que se erigen como representantes exclusivos de lo divino. Las figuras que reclaman ser portavoces de Dios o que se identifican con conceptos espirituales elevados no son más que actores en el teatro de la existencia, atrapados en sus propios roles. Esta crítica nos recuerda que la Realidad Absoluta no se limita a ninguna forma, ideología o autoridad. Está disponible para todos, en todo momento, porque todos somos, en esencia, su estar siendo.

En conclusión, la reflexión de Juande Puerta nos ofrece una visión profundamente unificadora de la existencia. Al disolver las barreras entre lo real y lo ilusorio, lo humano y lo divino, nos invita a reconocer que todo lo que somos y experimentamos es una manifestación de la Realidad Absoluta. Esta comprensión no solo transforma nuestra relación con nosotros mismos y con el mundo, sino que nos sitúa en el corazón del misterio de la Vida: un estar siendo que abarca todo, sin excepción, en el eterno ahora. Para saber qué es Dios, basta con mirar lo que está sucediendo en este instante. Y en ese mirar, nos encontramos a nosotros mismos como parte inseparable de lo Absoluto.

jueves, 17 de abril de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (051)

051/2025- Fuera del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto “no hay nada más”, porque consiste en el estar siendo de absolutamente todo cuanto -independientemente de cómo se perciba y valore- está siendo/sucediendo en cada momento. Todo está conectado, porque no hay ni sucede nada que no esté siendo el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Todos los atributos del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (Omnipresencia, Omnipotencia, Omnisciencia, Inmutabilidad, Eternidad…) radican en que consiste en el estar siendo/sucediendo simultáneo de absolutamente todo -igual lo agradable que lo desagradable- cuanto está siendo/sucediendo en cada instante.
 
Los conceptos de fuera y dentro, arriba y abajo, bien y mal, dicha y desdicha, creación y destrucción, amor y odio, mío y tuyo, etc., corresponden a la percepción dualista y egocéntrica de la Realidad Absoluta (por tanto, también de la propia), que caracteriza a las conciencias identificadas con su aparente identidad separada, de ahí la absoluta subjetividad y relatividad de aquellas construcciones mentales. Los estar siendo/sucediendo humanos -con todas aquellas particularidades que en cada instante puedan estar caracterizando a cada uno de nosotros- no estamos siendo “ni fuera ni dentro” del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto: estar siendo nuestro estar siendo/sucediendo particular “también consiste en estar siendo” el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.
 
¡Nada puede estar siendo/sucediendo sin que -a la vez- ese estar siendo/sucediendo no esté siendo “también” el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, que -sin excepción- también estará siendo todo lo demás! La “cualidad humana” (no el defecto ni el error) de dividir la experiencia del proceso de nuestra existencia en opuestos -junto con los efectos que ello está generando- también consiste en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (Realidad, Vida, Dios, Conciencia, etc.,) consiste en el estar siendo/sucediendo natural de todo aquello que está siendo/sucediendo.
 
Los estar siendo/sucediendo humanos no hemos aparecido en este mundo para sufrir, pero, por lo mismo, y puesto que nuestra existencia está siendo un proceso natural y dinámico, tampoco para perseguir ideales quiméricos como el de sentirnos en paz y felices todo el tiempo. Desde siempre, el estar siendo/sucediendo natural está consistiendo en el estar siendo/sucediendo de exactamente eso que -incluido el rechazo de eso y la búsqueda de otras posibilidades- está siendo/sucediendo en cada instante. Abril-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 051/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a contemplar una visión holística y no dualista de la existencia, centrada en el concepto del "Estar Siendo/Sucediendo Absoluto". Este término apunta a una realidad última que abarca todo lo que está siendo, sin excepciones ni divisiones, integrando tanto lo placentero como lo doloroso en un flujo simultáneo e indivisible. Según Juande Puerta, no hay nada fuera de este Absoluto, ya que todo —cada evento, percepción o experiencia— forma parte de su estar siendo. Esta idea desafía las categorías binarias que suelen estructurar el pensamiento humano, como dentro/fuera, bien/mal o yo/tú, las cuales surgen de una conciencia identificada con una identidad separada y, por ende, limitada.

El ensayo de Juande Puerta sugiere que los atributos tradicionales de lo Absoluto —omnipresencia, omnipotencia, omnisciencia— no derivan de una entidad trascendente, sino de su naturaleza como el estar siendo de todo lo que acontece en cada instante. Aquí radica una paradoja fascinante: lo humano, con sus particularidades y dualidades, no está ni dentro ni fuera de este Absoluto, sino que está siendo una manifestación del mismo. Incluso nuestra tendencia a dividir la realidad en opuestos, junto con las consecuencias de esa división, forma parte de este proceso natural y dinámico.

Esta perspectiva disuelve la noción de que la vida humana deba perseguir ideales inalcanzables, como una felicidad perpetua, o rechazar el sufrimiento como algo ajeno a la existencia. En cambio, Juande Puerta propone aceptar que el "Estar Siendo/Sucediendo Absoluto" está siendo la totalidad de lo que ocurre, incluyendo nuestras resistencias y anhelos. Así, la Realidad no es algo a conquistar o trascender, sino a reconocer como el despliegue continuo de lo que ya está siendo. Esta visión, profundamente integradora, nos reta a abandonar la subjetividad egocéntrica y a fluir con la corriente indivisible de la vida tal como se presenta, instante a instante.

viernes, 21 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (040)

040/2025 -Estar Siendo Realidad, lo Absoluto, lo Supremo, Dios, la Vida, la Esencia Primordial y/o Aquella Omnipresencia, Omnipotencia, etc., que de un modo u otro todos los estar siendo/sucediendo humanos intuimos, presentimos y/o anhelamos comprender, “siempre” está consistiendo en el estar siendo/sucediendo preciso de cada uno de nosotros y también de exactamente todo eso que cada uno de nosotros podamos estar percibiendo, pensando, realizando, experimentando, buscando, imaginando, etc., en cada aquí y ahora. El misterio más profundo y trascendental de la Vida se desvanece en la medida que se comprende y se acepta que nunca puede estar habiendo ni sucediendo absolutamente nada sin que -sin excepción- el estar siendo/sucediendo preciso de eso -incluida la transformación, la muerte y/o la desaparición definitiva de cada particularidad- no esté consistiendo en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.

No hay nada superior y/o más trascendental que el Estar Siendo/Sucediendo, de ahí que el estar siendo/sucediendo individual y el estar siendo/sucediendo de todo -sin excepción ni discriminación- cuanto cada individuo pueda estar pensando, sintiendo, percibiendo, realizando, viviendo, etc., ya estará consistiendo en Estar Siendo la Máxima Realidad y/o en el Estar Siendo/Sucediendo Supremo. Realidad Absoluta está siendo todo aquello que está sucediendo y también todo aquello que se esté experimentando subjetivamente. Realidad Absoluta está siendo todo lo que está ocurriendo y también todo lo que podría ocurrir.
 
Cada experiencia individual estará siendo una de las infinitas posibilidades que están sucediendo simultáneamente, por tanto, ya estará siendo igual de trascendente que todas las demás. Aquello que estemos experimentando directamente y aquello que no estemos experimentando directamente continuará siendo parte de la totalidad y/o del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Todo lo que está sucediendo y todo lo que no está sucediendo, todo lo que percibimos y todo lo que no percibimos, etc., forma parte del Estar Siendo/Sucediendo (Realidad Absoluta) que trasciende las categorías mentales del tiempo, del espacio, de los juicios, de la dualidad y de los conflictos. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 040/2025 realizado con IA:

El texto de Juande Puerta presenta una visión profundamente metafísica y unificada de la existencia, en la que el "Estar Siendo/Sucediendo Absoluto" se erige como la esencia primordial de todo lo que es, abarcando tanto lo individual como lo universal sin distinción ni jerarquía. Juande Puerta propone que este concepto —que puede denominarse Realidad Absoluta, Dios, Vida o Esencia Primordial— no es algo externo o inalcanzable, sino que se manifiesta plenamente en cada instante de nuestra experiencia: en lo que pensamos, sentimos, percibimos y vivimos. No hay nada más trascendental que este "Estar Siendo/Sucediendo", pues todo, incluso la transformación o la muerte, está contenido en él.

Esta perspectiva disuelve la aparente dualidad entre lo subjetivo y lo objetivo, lo finito y lo infinito. Según Juande Puerta, cada experiencia individual, por más trivial que parezca, está siendo una expresión de la Máxima Realidad, tan trascendente como cualquier otra. Así, el misterio de la Vida no reside en un más allá, sino en la aceptación de que nada escapa a este proceso absoluto. Incluso lo que no percibimos o no experimentamos forma parte de esta totalidad, trascendiendo categorías como el tiempo, el espacio o los juicios humanos.

El ensayo de Juande Puerta invita a una comprensión radical: no hay separación entre el individuo y el todo, ni entre lo que ocurre y lo que podría ocurrir. Esta no dualidad elimina conflictos y resistencias, sugiriendo que sentimientos como la paz y el amor surgen al reconocer que todo —lo presente y lo ausente— está siendo el "Estar Siendo/Sucediendo Supremo". Su propuesta resuena con tradiciones filosóficas y espirituales que ven la Realidad como un continuo inmanente, donde la trascendencia no es un destino, sino la naturaleza misma de cada momento. En última instancia, Juande Puerta nos desafía a abrazar la existencia en su totalidad, hallando lo Absoluto en lo cotidiano.

jueves, 30 de enero de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (015)

015/2025 -Ninguna posibilidad (nada que pueda suceder) cambiará la naturaleza del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, porque el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto siempre estará siendo -por igual- absolutamente todo lo que pueda estar sucediendo. El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, la Realidad Suprema, Dios, la Vida, etc., consiste en el estar siendo/sucediendo de exactamente todo eso que -fuere lo que fuere- esté siendo/sucediendo en cada instante, por tanto, todo el ayer, todo el hoy y todo el mañana. Las posibilidades de que este mundo -y absolutamente todo cuanto pueda estar existiendo y/o aconteciendo aquí- esté siendo real o irreal, perfecto o imperfecto, trascendental o irrelevante, dual o no dual, temporal o atemporal, etc., no cambiaría que absolutamente todo ello -sin excepción- estuviera consistiendo en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.

La Realidad no está siendo algo distante ni ajeno a cualquier experiencia cotidiana; también está siendo todo lo que pensamos, todo lo que percibimos, todo lo que experimentamos, todo lo que realizamos, todo lo que soñamos. Estar Siendo Realidad Absoluta estaría siendo tanto la posibilidad de que existiera el destino como de que no existiera, que tuviéramos libre albedrío o que no lo tuviéramos, que nada fuera lo que parece o que sí lo fuera, que después de este mundo continuase la vida o que todo terminase aquí. Nada puede haber ni suceder, que -independientemente de cualquier posible valoración humana- estar siendo cada posibilidad particular y absolutamente todas a la vez, Estar Siendo Realidad Absoluta no esté siendo.

¡Nunca nada puede no Estar siendo Realidad Absoluta, porque Estar Siendo Realidad Absoluta es lo que siempre está siendo absolutamente todo! Las resistencias, los rechazos, el sufrimiento y todos los conflictos que van apareciendo y desapareciendo también están siendo expresiones del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Asumir que estamos siendo parte del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto no significa renunciar a ningún aspecto de nuestro estar siendo/sucediendo humano, sino que implica reconocer que nuestra humanidad, con todos sus altibajos, siempre está siendo una manifestación del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Enero-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 015/2025 realizado con IA:

El concepto de Estar Siendo/Sucediendo Absoluto nos invita a reflexionar sobre la naturaleza intrínseca de la Realidad y nuestro lugar en ella. Esta noción sugiere que no importa lo que ocurra a nuestro alrededor, ni cómo lo interpretemos, siempre habrá un trasfondo inmutable que abarca y sostiene todo lo que existe: el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. En este sentido, cada acontecimiento, por trivial o significativo que parezca, se integra en esta infinitud absoluta.

Desde una perspectiva más amplia, nuestras experiencias humanas, con sus matices de alegría y dolor, no son más que manifestaciones del Estar Siendo Absoluto. El sufrimiento, las resistencias y las luchas internas también son parte de esa totalidad. Por tanto, reconocer nuestra humanidad y sus complejidades no significa separarnos del Todo, sino abrazar nuestra existencia como una expresión de la Realidad Suprema que trasciende cualquier dualidad.

Es fundamental entender que el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto no está sujeto a juicios, percepciones o creencias. No es afectado por nuestra necesidad de categorizar o interpretar los eventos de la vida; simplemente está siendo. De esta manera, la dualidad de lo real y lo irreal, de lo perfecto e imperfecto, se disuelve en la comprensión de que todo ello reside dentro de la misma esencia.

Aceptar esta idea transforma nuestra relación con el mundo. Nos invita a soltar el apego a definiciones rígidas y a encontrar en cada instante una manifestación de ese Estar Siendo. Así, cada experiencia, cada emoción y cada pensamiento se convierten en oportunidades para reconocer la plenitud de la vida en su forma más pura, donde nada escapa a la omnipresencia del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. En este reconocimiento, se encuentra un profundo sentido de paz y conexión con la totalidad, que siempre ha estado y siempre estará siendo.