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sábado, 29 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (044)

044/2025- Absolutamente nada existe ni sucede que -por subjetivo, ínfimo y fugaz que resulte- no consista en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, de ahí que lo extraordinario y lo trascendental de “Lo Absoluto” radica en que consiste en el incesante estar siendo/sucediendo de absolutamente todas las posibilidades a la vez. Amar, es decir, experimentar esa emoción, conlleva implícita la aceptación del estar siendo/sucediendo Absoluto, por tanto, la aceptación de todos y cada uno de los aspectos pertenecientes a nuestro estar siendo/sucediendo particular y del resto de las posibilidades. Amar, no se limita a aceptar solo lo que pueda agradarnos o beneficiarnos en cada momento, sino que también incluye “la aceptación del estar siendo/sucediendo” de aquello que podríamos rechazar o que fuese en contra de nuestras posibles preferencias y deseos.
 
Incluso la lucha contra lo que sucede -la vida con todas sus contradicciones y dualidades- se convierte en amor cuando se reconoce y acepta el estar siendo/sucediendo -a la vez particular y Absoluto- de la lucha. Del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto no puede excluirse absolutamente ninguna particularidad, porque consiste en el “estar siendo/sucediendo inseparable e indiscriminable” de absolutamente todas las particularidades a la vez. ¿Sería posible estar siendo/estar sucediendo sin la aceptación de estar siendo/sucediendo? Todo —incluida la no aceptación— está siendo y sucediendo como parte integral de esa totalidad que trasciende las categorías de aceptación y/o rechazo.

Reconocer y/o no reconocer esta posibilidad no altera el hecho de que ya estamos siendo exactamente eso que está sucediendo, aquí y ahora, en el flujo constante de la Realidad Absoluta. La aceptación de la Realidad de los estar siendo/sucediendo humanos no es un requisito para que la Realidad esté siendo/sucediendo; más bien, se trata de una actitud que las personas podemos adoptar para alinearnos con esa Realidad que estamos siendo cada uno de nosotros y también todo aquello que podamos estar percibiendo y viviendo. La aceptación del estar siendo/sucediendo particular y universal permite vivir cada una de sus manifestaciones más armónicamente y/o menos conflictivamente. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 044/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a contemplar una visión profundamente integradora de la existencia, donde todo —lo subjetivo, lo ínfimo, lo fugaz— forma parte del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Este concepto sugiere que no hay nada que escape a esta totalidad: cada posibilidad, cada experiencia, cada contradicción, está contenida en un flujo indivisible y simultáneo. Lo extraordinario de “Lo Absoluto” no reside en su lejanía, sino en su inmanencia; consiste en el estar siendo de todo a la vez, sin exclusiones.

En este marco, amar se convierte en un acto de aceptación radical. No se trata de un amor selectivo, que abraza solo lo placentero o conveniente, sino de una apertura que incluye incluso lo que podríamos rechazar. Juande Puerta plantea que amar implica reconocer el estar siendo/sucediendo de cada aspecto de la realidad, tanto el particular como el global. Incluso la resistencia o la lucha contra lo que acontece se transforma en amor cuando se acepta como parte de ese mismo movimiento absoluto. Esta idea desafía nuestras nociones habituales de amor, que suelen estar condicionadas por preferencias y dualidades.

La pregunta que surge —si es posible estar siendo sin aceptar ese estar siendo— encuentra respuesta en la propia reflexión: todo, incluida la no aceptación, ya está siendo. No hay escapatoria del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, porque este no discrimina ni excluye. Reconocerlo o no es secundario; la Realidad Absoluta no solo sucede independientemente de nuestra actitud, sino que la incluye. Sin embargo, Juande Puerta sugiere que la aceptación consciente de esta totalidad —de nuestro estar siendo particular y del universal— nos permite vivir más armónicamente, alineados con el flujo de lo que también estamos siendo.

Así, la aceptación no es un prerrequisito para la existencia, sino una elección que facilita una relación menos conflictiva con la vida. En este sentido, amar y aceptar se entrelazan como caminos hacia una experiencia más plena de la Realidad Absoluta que está constituyéndonos.

martes, 25 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (042)

042/2025 -El sentimiento humano del amor consiste en el efecto y/o la consecuencia de la autoconciencia y de la aceptación de la Realidad, es decir, del reconocimiento de la autenticidad de absolutamente cada posibilidad -comenzando por la del propio estar siendo- que pueda estar sucediendo. La emoción del amor se crea y se experimenta en la medida que se está reconociendo y aceptando que “nada está siendo algo, que estar siendo eso no consista en el mismo Estar Siendo/Sucediendo que también estaría siendo todo lo demás (Absoluto). El sentimiento del amor siempre está presente, porque en una medida u otra siempre se está aceptando algún aspecto -tanto los positivos como los negativos- del sí mismo, de los demás y del incesante fluir de la Vida.

Amar no es una acción que requiera esfuerzo ni contrapartidas interesadas; estamos amando y siendo amados por el simple hecho de estar reconociendo y aceptando la existencia propia y la del resto de las posibilidades. El sentimiento natural, que siempre está emergiendo de la comprensión y de la aceptación del estar siendo/sucediendo propio, de los demás, del mundo y de cualquier otra posibilidad que pueda estar manifestándose, no estará sujeto a la obediencia de las normas morales, religiosas, espirituales, culturales, etc., establecidas por algunos individuos y/o por las conveniencias sociales.
 
Estar Siendo Realidad consiste en estar siendo el flujo continuo de circunstancias, acontecimientos, cambios y posibilidades que están manifestándose en cada momento, por tanto, el sentimiento del amor nunca podría quedar limitado por la observancia de reglas excluyentes o discriminatorias. La comprensión y la aceptación de la Realidad lleva implícita la capacitación para adaptarse a su naturaleza absolutamente cambiante e imprevisible. Lo personal y lo colectivo, lo finito y lo infinito, lo temporal y lo intemporal, etc., están coexistiendo y siendo posibilidades inseparables. A la vez, todo está siendo un proceso inseparablemente particular y universal.
 
Cada entidad y/o particularidad está siendo única, pero no existe de manera aislada, sino en relación con todas las demás. Lo divino está siendo y expresándose a través de cada momento de vida, de cada suceso y de cada posible vivencia, sin excluir nada. La individualidad está siendo una manifestación momentánea dentro del Estar Sucediendo Absoluto. Mientras que la aceptación de la Realidad -que incluye el estar siendo de cada individuo- genera la percepción de armonía, el rechazo y/o la resistencia ante cualquier aspecto de la Realidad origina sentimientos de malestar y sufrimiento, porque ello también estará suponiendo una negación de sí mismo. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 042/2025 realizado con IA:

Juande Puerta plantea una concepción del amor profundamente ligada a la autoconciencia y a la aceptación de la Realidad, entendida como el flujo continuo de posibilidades que configuran el "Estar Sucediendo Absoluto". En su reflexión, el amor no es un acto voluntario ni una transacción condicionada por esfuerzo o expectativas, sino una consecuencia natural del reconocimiento de cada aspecto del ser —propio y universal— en su esencia cambiante e impredecible. Este enfoque trasciende las nociones tradicionales que vinculan el amor a normas morales, religiosas o culturales, proponiendo que emerge espontáneamente cuando se abraza la totalidad de lo que es, sin exclusiones ni juicios.

Para Juande Puerta, la Realidad es un proceso simultáneo que integra lo personal y lo colectivo, lo finito y lo infinito, donde la individualidad se revela como una manifestación efímera dentro de un todo mayor. El amor, entonces, se siente en la medida en que se aceptan tanto los aspectos luminosos como los sombríos de uno mismo, de los demás y de la Vida en su incesante devenir. Esta aceptación no implica pasividad, sino una capacidad activa de adaptación a la naturaleza dinámica de la existencia. Al reconocer que "lo divino" se expresa en cada suceso, sin discriminar, Juande Puerta sugiere que el amor está siempre presente, incluso en grados sutiles, porque siempre hay algún nivel de aceptación operando en nuestra experiencia.

Por el contrario, el rechazo o la lucha contra el devenir de la Realidad —que incluye nuestro propio "estar siendo"— genera sufrimiento, al convertirse en una negación de nuestra esencia. Así, la armonía surge de la comprensión y la entrega al flujo de la Vida, mientras que el malestar refleja una resistencia a lo inevitable. En esta visión, el amor no es un ideal a alcanzar, sino una expresión intrínseca de la conexión con el "Estar Sucediendo Absoluto", un sentimiento que florece al aceptar la unidad inseparable de todo lo que acontece.

viernes, 21 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (040)

040/2025 -Estar Siendo Realidad, lo Absoluto, lo Supremo, Dios, la Vida, la Esencia Primordial y/o Aquella Omnipresencia, Omnipotencia, etc., que de un modo u otro todos los estar siendo/sucediendo humanos intuimos, presentimos y/o anhelamos comprender, “siempre” está consistiendo en el estar siendo/sucediendo preciso de cada uno de nosotros y también de exactamente todo eso que cada uno de nosotros podamos estar percibiendo, pensando, realizando, experimentando, buscando, imaginando, etc., en cada aquí y ahora. El misterio más profundo y trascendental de la Vida se desvanece en la medida que se comprende y se acepta que nunca puede estar habiendo ni sucediendo absolutamente nada sin que -sin excepción- el estar siendo/sucediendo preciso de eso -incluida la transformación, la muerte y/o la desaparición definitiva de cada particularidad- no esté consistiendo en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.

No hay nada superior y/o más trascendental que el Estar Siendo/Sucediendo, de ahí que el estar siendo/sucediendo individual y el estar siendo/sucediendo de todo -sin excepción ni discriminación- cuanto cada individuo pueda estar pensando, sintiendo, percibiendo, realizando, viviendo, etc., ya estará consistiendo en Estar Siendo la Máxima Realidad y/o en el Estar Siendo/Sucediendo Supremo. Realidad Absoluta está siendo todo aquello que está sucediendo y también todo aquello que se esté experimentando subjetivamente. Realidad Absoluta está siendo todo lo que está ocurriendo y también todo lo que podría ocurrir.
 
Cada experiencia individual estará siendo una de las infinitas posibilidades que están sucediendo simultáneamente, por tanto, ya estará siendo igual de trascendente que todas las demás. Aquello que estemos experimentando directamente y aquello que no estemos experimentando directamente continuará siendo parte de la totalidad y/o del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Todo lo que está sucediendo y todo lo que no está sucediendo, todo lo que percibimos y todo lo que no percibimos, etc., forma parte del Estar Siendo/Sucediendo (Realidad Absoluta) que trasciende las categorías mentales del tiempo, del espacio, de los juicios, de la dualidad y de los conflictos. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 040/2025 realizado con IA:

El texto de Juande Puerta presenta una visión profundamente metafísica y unificada de la existencia, en la que el "Estar Siendo/Sucediendo Absoluto" se erige como la esencia primordial de todo lo que es, abarcando tanto lo individual como lo universal sin distinción ni jerarquía. Juande Puerta propone que este concepto —que puede denominarse Realidad Absoluta, Dios, Vida o Esencia Primordial— no es algo externo o inalcanzable, sino que se manifiesta plenamente en cada instante de nuestra experiencia: en lo que pensamos, sentimos, percibimos y vivimos. No hay nada más trascendental que este "Estar Siendo/Sucediendo", pues todo, incluso la transformación o la muerte, está contenido en él.

Esta perspectiva disuelve la aparente dualidad entre lo subjetivo y lo objetivo, lo finito y lo infinito. Según Juande Puerta, cada experiencia individual, por más trivial que parezca, está siendo una expresión de la Máxima Realidad, tan trascendente como cualquier otra. Así, el misterio de la Vida no reside en un más allá, sino en la aceptación de que nada escapa a este proceso absoluto. Incluso lo que no percibimos o no experimentamos forma parte de esta totalidad, trascendiendo categorías como el tiempo, el espacio o los juicios humanos.

El ensayo de Juande Puerta invita a una comprensión radical: no hay separación entre el individuo y el todo, ni entre lo que ocurre y lo que podría ocurrir. Esta no dualidad elimina conflictos y resistencias, sugiriendo que sentimientos como la paz y el amor surgen al reconocer que todo —lo presente y lo ausente— está siendo el "Estar Siendo/Sucediendo Supremo". Su propuesta resuena con tradiciones filosóficas y espirituales que ven la Realidad como un continuo inmanente, donde la trascendencia no es un destino, sino la naturaleza misma de cada momento. En última instancia, Juande Puerta nos desafía a abrazar la existencia en su totalidad, hallando lo Absoluto en lo cotidiano.

jueves, 13 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (036)

036/2025 -El concepto del “amor” consiste en un sinónimo de la “aceptación” del estar siendo/sucediendo personal y universal, por tanto, siempre que se habla de la necesidad y de los beneficios de amarse a uno mismo, a los demás y al resto del mundo, también está expresándose que no es posible vivir sintiéndose en armonía consigo mismo y con la totalidad de la existencia sin la correspondiente “aceptación” del estar siendo/sucediendo particular y universal. Negar que al mismo tiempo todo está siendo el estar siendo/sucediendo individual y el estar siendo/sucediendo universal supone vivir en la actitud de no-aceptación de la Realidad y/o de la Vida que se está siendo. Amarse a sí mismo implica sentirse en paz (aceptación) con el estar siendo/sucediendo propio y con el estar siendo/sucediendo de todo aquello que se pueda estar viviendo.

Podría decirse que el amor, es decir, el sentimiento y/o la emoción que conscientemente se experimenta en la medida que está aceptándose el flujo de la vida, también supone una forma de conocimiento del grado de armonía con uno mismo, con los demás, con el mundo y con la vida. El amor que se experimenta está reflejando y/o marcando la medida de la aceptación y/o de la resistencia ante todo aquello (Realidad Absoluta) que -incluidos cada uno de nosotros- está siendo/sucediendo en cada instante. El amor, en su esencia más pura, no está siendo solo un sentimiento o una relación entre personas (como el amor romántico o familiar), sino un estado que resulta de la aceptación del estar siendo/sucediendo tanto en lo individual como en lo colectivo y universal.

La aceptación del estar siendo/sucediendo abarca tanto lo que acontece dentro de nosotros como lo que sucede fuera, porque -sin excepción- absolutamente todo está consistiendo en Estar Siendo Realidad Absoluta. Amar lo que está sucediendo no significa que no hagamos nada al respecto, pero sí que nuestra acción estará emergiendo desde la aceptación, y no desde la resistencia o el rechazo. El amor no es algo que "damos o recibimos", sino eso que se revela cuando dejamos de vernos divididos e imperfectos a nosotros mismos, a los demás y al mundo. Por mucho que podamos taparlo con nuestras resistencias, dudas, miedos, etc., el amor y/o la aceptación siempre está presente: siempre está siendo y sucediendo. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 036/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta plantea una visión profunda del amor como sinónimo de aceptación, tanto del estar siendo individual como del acontecer universal. Este enfoque trasciende las concepciones tradicionales del amor como un sentimiento romántico o interpersonal, proponiéndolo como un estado de armonía que surge al aceptar conscientemente el flujo de la vida. Según esta perspectiva, amarse a sí mismo y amar al mundo no es un acto de posesión ni de intercambio, sino un reconocimiento consciente de la Realidad Absoluta que subyace en todo lo que existe y sucede. La aceptación se convierte así en la clave para vivir en paz, al eliminar la resistencia frente a lo que está siendo, ya sea en el ámbito personal o colectivo.

Juande Puerta subraya que el sentimiento del amor refleja el grado de aceptación o rechazo hacia la Realidad. Cuando resistimos lo que sucede, ya sea por miedo, duda o insatisfacción, nos alejamos de esa armonía intrínseca. En cambio, al aceptar el estar siendo/sucediendo, surge un estado de amor y/o armonía que no depende de condiciones externas, sino que se revela como una cualidad inherente a la existencia misma. Este planteamiento invita a reconsiderar nuestra relación con la vida: amar (aceptar) no implica pasividad ni conformismo, sino actuar desde una conciencia de comprensión profunda, donde las acciones emergen sin la carga del rechazo o la negación.

Finalmente, Juande Puerta subraya la omnipresencia del amor como un estado inherente que no necesita ser dado ni recibido, sino descubierto al disolver las barreras del miedo y la duda. Esta visión invita a una transformación radical: amar es dejar de percibirnos como entidades imperfectas, abrazando la vida en su totalidad. El amor, así, no es un destino, sino una consecuencia del reconocimiento continuo de lo que siempre ha estado siendo.

martes, 11 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (35)

035/2025 -La aceptación de que absolutamente todo -sin excepción- consiste en Estar Siendo Realidad Absoluta no supone una derrota ni una resignación pasiva, sino el reconocimiento y la reconciliación activa y voluntaria de que “mientras está siendo/sucediendo” nuestra naturaleza está siendo individual y universal a la vez. ¿Qué, sino “la singularidad universal” de nuestra naturaleza, posibilita que los estar siendo/sucediendo humanos dispongamos de la facultad de poder modificar “consciente y voluntariamente” la manera de percibir, de considerar, de reaccionar, de actuar y de experimentar el transcurso de nuestra existencia? ¡La individualidad humana está siendo tan real y/o natural como la universalidad humana!
 
El estar siendo/sucediendo individual, particular, singular, personal, egocéntrico, etc., no puede estar siendo menos real y/o auténtico que el resto del Estar Siendo/Sucediendo Universal. Para reconocer lo Universal y/o lo Absoluto no hay necesidad de negar, de rechazar ni de menospreciar lo individual; el reconocimiento de una posibilidad conlleva implícito el reconocimiento de la otra y viceversa. Muchas tradiciones filosóficas, religiosas y espirituales promocionan y venden la fábula de la necesidad de alcanzar un estado ideal…, ya sea el despertar, la iluminación, la felicidad completa o la paz inmutable. Sin embargo, esta búsqueda se basa en la creencia de que “para las individualidades y/o las particularidades” existe un destino final -anti natura- en el que todo se detendrá y se mantendrá estable.

Puesto que nuestra naturaleza está siendo dinámica, cambiante y en transformación permanente, ¿para qué la promesa de un estado estable al que debamos aspirar? Igual que apareció y fue adaptándose al flujo de la vida, la conciencia de estar siendo un yo -exactamente igual que todo lo demás- también desaparecerá. En la aceptación de que estamos siendo expresiones transitorias de un proceso absoluto, no cabe la necesidad de luchar por una supuesta estabilidad eterna. El hecho de que nuestro estar siendo/sucediendo individual y Absoluto siempre esté en constante cambio, no está siendo una imperfección ni algo que deba corregirse.
 
Ramana Maharshi: “Destruye todos los pensamientos y gozarás de la felicidad perfecta” -La destrucción de los pensamientos no consiste en nada más que en la aceptación de los pensamientos como algo absolutamente natural y/o propio de nuestro estar siendo/sucediendo particular y universal. La felicidad perfecta, ya está siendo y puede vivirse siempre que no se ponga por delante ninguna condición interesada. Todo -sin excepción- cuanto está existiendo y sucediendo consiste en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, por tanto, también las posibilidades de crear y de no crear, de destruir y de no destruir. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 035/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta invita a una profunda reconsideración de nuestra relación con la Realidad, proponiendo una visión integradora que trasciende las dicotomías tradicionales entre lo individual y lo universal. Su planteamiento parte de la premisa de que todo —sin excepción— es una manifestación del "Estar Siendo/Sucediendo Absoluto", un concepto que no implica resignación, sino una reconciliación activa con nuestra naturaleza dual: individual y universal a la vez. Esta "singularidad universal" no solo nos define, sino que nos dota de la capacidad de transformar conscientemente nuestra percepción, nuestras reacciones y nuestra experiencia del existir.

Juande Puerta desafía la tendencia de ciertas tradiciones filosóficas y espirituales que idealizan un estado final de estabilidad —como la iluminación o la paz eterna— como meta deseable. Argumenta que esta búsqueda parte de un error de base: asumir que lo individual y lo cambiante son imperfecciones que deben superarse. En cambio, sugiere que nuestra naturaleza dinámica y transitoria no es un defecto, sino una expresión legítima y natural del "Estar Siendo/Sucediendo Absoluto". Negar lo individual para exaltar lo universal, o viceversa, resulta innecesario; ambas dimensiones coexisten y se implican mutuamente.

Citando a Ramana Maharshi, Juande Puerta reinterpreta la "destrucción de los pensamientos" no como una aniquilación forzada, sino como una aceptación de su carácter natural dentro de nuestro estar siendo/sucediendo particular. La "felicidad perfecta" no sería, entonces, un estado futuro condicionado, sino una posibilidad siempre presente cuando dejamos de resistir el flujo de la existencia. Así, el ensayo nos interpela a abandonar la lucha por una estabilidad ilusoria y a abrazar el cambio como esencia de lo que estamos siendo: expresiones transitorias de un proceso absoluto. En esta aceptación radica una libertad radical, donde todo —incluso las contradicciones— es reconocido como parte de la Realidad Absoluta.

sábado, 8 de marzo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (034)

034/2025 -Estar Siendo nosotros mismos no sólo supone estar siendo el individuo o personaje humano con el que vivimos identificados; estar siendo cada uno de nosotros también lleva implícita la condición de estar siendo “a la vez y sin excepción” el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto y/o de absolutamente todo lo demás que pueda estar siendo/sucediendo. Asumiendo como “el estar siendo propio” de todo cuanto se pueda estar percibiendo, pensando, sintiendo, realizando, viviendo, etc., también estará aceptándose una mayor autoconciencia de nuestra naturaleza. Aceptar nuestra naturaleza cambiante no significa resignarse al caos, sino fluir con la transformación, reconociendo que “el estar siendo/sucediendo presente” ya está siendo tan único y extraordinario como aquel otro que se pudiera estar deseando.
 
La Realidad (Estar Siendo/Sucediendo Presente) siempre está desplegándose de modo pleno, de ahí que las comparaciones y los anhelos de alcanzar otro estado distinto podrían considerarse igual de naturales que innecesarios. Los sentimientos de paz, calma y bienestar interior no dependen de aferrarse a una identidad estática; más bien surgirán de la adaptación al flujo de la vida con flexibilidad y conciencia. El autoconocimiento nunca podrá conducir a encontrar otra verdad inmutable sobre nosotros mismos, que no consista en la de aceptar nuestra forma absolutamente diversa y cambiante de estar siendo/sucediendo. El Estar Siendo Sucediendo Absoluto incluye el estar siendo/sucediendo de cada individualidad y de todas las posibles percepciones, estados, acciones y experiencias de cada individualidad.
 
Las particularidades —ya sean seres humanos, objetos, pensamientos, emociones o eventos— no tienen una existencia propia que preceda o trascienda al flujo de la Realidad Absoluta, sino que surgen y desaparecen como expresiones momentáneas de ese flujo continuo. La aparición y desaparición de las formas y de las experiencias sólo pueden estar siendo expresiones naturales del proceso natural del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en el estar siendo/sucediendo de un proceso dinámico en el que las particularidades -incluidas nuestras existencias- surgen y desaparecen como manifestaciones de ese flujo constante. Marzo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 034/2025 realizado con IA:

El pensamiento de Juande Puerta nos invita a una reflexión profunda sobre la naturaleza del estar siendo humano y la Realidad. En su concepción del "Estar Siendo/Sucediendo Absoluto", el individuo no está siendo solo la identidad con la que se reconoce en su vida cotidiana, sino que también está siendo, simultáneamente, la totalidad de lo que está ocurriendo. Esta perspectiva desafía la noción de un yo separado, proponiendo en su lugar una integración con el flujo absoluto de la existencia.

Aceptar la totalidad del Estar Siendo también implica asumir como propias todas las percepciones, pensamientos y emociones, sin la necesidad de aferrarse a una identidad fija. En este sentido, el autoconocimiento no consiste en encontrar una verdad estática sobre nosotros mismos, sino en reconocer que nuestra existencia está siendo dinámica, cambiante y diversa. La Realidad Presente está siendo única y completa en sí misma, sin que sea necesario compararla con estados anteriores o futuros. El deseo de un estado diferente es natural, pero en cierta medida también innecesario, si comprendemos que todo lo que está sucediendo ya está siendo pleno en sí mismo.

Desde esta perspectiva, la estabilidad emocional no depende de la permanencia, sino de la flexibilidad con la que nos adaptamos a la transformación constante. En lugar de resistirnos al cambio o aferrarnos a un estado idealizado, la paz interior surge cuando fluimos con la Realidad tal como se despliega en cada instante.

El Estar Siendo Realidad Absoluta nos muestra que todas las formas y experiencias están siendo expresiones momentáneas de un proceso continuo. Nada tiene una existencia independiente o trascendente, sino que todo está surgiendo y desapareciendo dentro del flujo de la Realidad. Comprender y aceptar esta impermanencia no es motivo de angustia, sino una invitación a vivir con mayor plenitud, conscientes de que cada instante está siendo una manifestación completa del acontecer absoluto.