martes, 10 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (076)

076/2025 -La Plenitud de la Realidad no se encuentra en una proyección futura, ni en una perfección ideal, sino en el reconocimiento de “todo lo que ya” está ocurriendo. La Plenitud de la Realidad incluye la experiencia de nuestras incoherencias, limitaciones, errores, conflictos, temores, frustraciones y deseos de progreso. ¡No hay otra Plenitud que esa que pueda estar experimentándose en cada posible aquí y ahora; no hay absolutamente nada que necesite ser excluido para que el Presente esté siendo completo y/o pleno! La auténtica espiritualidad humana nunca podría excluir la aceptación de alguna característica personal, de ninguna actitud, y tampoco de ningún comportamiento humano; el deseo de cambio, la búsqueda de paz, e incluso la sensación de estar incompletos, están siendo parte de una Plenitud que no excluye nada. ¡El Presente ya está siendo la manifestación plena de la Realidad Absoluta!
 
Aceptar que no hay otra Realidad que la del Presente no supone resignación, rendición, complacencia ni pasividad, sino reconocimiento, fortaleza y reconciliación entre la diversidad y la simultaneidad de las manifestaciones de cada estar siendo/sucediendo personal y del Estar Siendo/Sucediendo Universal. Reconocer que Estar Siendo Realidad Absoluta también consiste en estar siendo cada uno de nosotros, ayuda -incluso en situaciones difíciles- a comprender mejor nuestras emociones, por tanto, a mejorar la salud mental y a vivir cada instante de manera más plena, consciente y equilibrada. La Realidad no excluye absolutamente nada de lo que ocurre, porque consiste en estar siendo absolutamente todo lo que está ocurriendo.

Nuestros conflictos internos, nuestros deseos de cambio, nuestros miedos, nuestras aspiraciones, nuestras contradicciones, nuestros maltratos, etc., están siendo expresiones tan legítimas o naturales como aquellas otras que puedan estar siendo plenamente aceptadas. El estar siendo/sucediendo propio y/o personal no está separado del estar siendo/sucediendo de todo lo demás, de manera que aquello que podamos ver siendo nuestras carencias, errores, defectos, culpabilidades, etc., tampoco dejará de estar siendo Plenitud y/o Realidad Absoluta. El desafío humano no está tanto en actuar o no actuar, sino en reconocer y aceptar que cualquier pensamiento, percepción, acto, deseo, rechazo…, ya está participando de la totalidad que llamamos Realidad. Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 076/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta plantea una visión profundamente transformadora: la plenitud de la realidad no reside en ideales futuros ni en perfecciones imaginadas, sino en el reconocimiento de “todo lo que ya” está ocurriendo en el presente. Este enfoque invita a abrazar la totalidad de la experiencia humana, incluyendo nuestras incoherencias, limitaciones, errores, temores y deseos de progreso. Juande Puerta subraya que no hay nada que deba ser excluido para que el presente sea completo, una idea que redefine la espiritualidad humana como un acto de aceptación radical.

Esta perspectiva es poderosa porque nos libera de la tiranía de la perfección. Al aceptar que la Realidad Absoluta incluye nuestras contradicciones y conflictos, se abre un camino hacia la reconciliación con nosotros mismos y con el mundo. Juande Puerta destaca que esta aceptación no implica pasividad o resignación, sino un reconocimiento activo que fomenta fortaleza y equilibrio. Al comprender que nuestras emociones, incluso las difíciles, son parte de la plenitud, podemos mejorar nuestra salud mental y vivir el presente de manera más consciente.

Sin embargo, esta visión no está exenta de críticas. La idea de que “todo” forma parte de la plenitud puede ser desafiante, especialmente cuando se consideran actos de violencia, injusticia o sufrimiento extremo. ¿Es realmente posible o deseable aceptar estos aspectos como expresiones “legítimas” de la Realidad? Aquí, la reflexión de Juande Puerta podría beneficiarse de una mayor claridad sobre cómo abordar el dolor causado por acciones humanas destructivas sin caer en la complacencia.

En conclusión, la propuesta de Juande Puerta nos reta a reconocer que el presente, con toda su diversidad y contradicciones, está siendo la manifestación plena de la Realidad. El desafío humano radica en vivir esta totalidad con consciencia, aceptando que cada acto, deseo o percepción ya participa de la realidad absoluta.

domingo, 8 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (075)

075/2025- Los deseos de cambiar y/o de mejorar la Realidad pueden satisfacerse en gran medida mediante el reconocimiento y la aceptación de que Estar Siendo Realidad consiste en todo eso que, desde siempre, está siendo/sucediendo en cada aquí y ahora. Los conflictos internos pueden verse siendo algo que debe eliminarse; pero también disponemos de la posibilidad de verlos siendo manifestaciones legítimas, naturales y respetables de nuestra Esencia. El hecho de que estemos percibiéndonos y experimentándonos siendo individualidades únicas y con características particulares (tanto lo de un signo como lo del signo opuesto), no hace que “estar siendo eso” no consista en estar siendo la misma Realidad Absoluta, que a la vez también está siendo absolutamente todo lo demás. ¡Percibimos dualidad, porque mientras estamos siendo, también estamos siendo dualidad!

 Enfatizar la Plenitud Absoluta del Presente, no minimiza el valor práctico de las aspiraciones humanas y/o los esfuerzos por aliviar el sufrimiento. El reconocimiento y la aceptación del estar siendo/sucediendo (Realidad Absoluta) no puede no estar incluyendo la manifestación de “absolutamente todas” las posibles aspiraciones humanas. Apreciar pasividad, resignación, complacencia, etc., en el reconocimiento y la aceptación del Presente y/o del estar sucediendo de cada aquí y ahora, no deja de consistir en el mismo estar siendo/sucediendo que, a la vez, también estarían siendo todas las demás percepciones. Ante el planteamiento del posible desafío ético de cómo equilibrar la aceptación radical del presente con la responsabilidad de actuar frente a injusticias, conflictos, dolor, etc., la respuesta es obvia: haciendo exactamente eso que -igual que se ha estado haciendo siempre- también ahora se esté decidiendo hacer.

 La aplicación práctica del reconocimiento y de la aceptación de que el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (Realidad) consiste en el estar siendo/sucediendo de exactamente todo eso que está siendo/sucediendo en cada instante, jamás podría alterar la naturaleza de las dinámicas humanas de cambio y de mejora, pero tampoco el temor que esa posibilidad suele despertar en las mentalidades de las identidades egoicas. Sin excepción, todo lo que está siendo/sucediendo -incluido lo que deseamos, lo que rechazamos y lo que tememos-, está siendo expresión plena de la Realidad Absoluta. Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo “comparativo” sobre la reflexión 075/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta sobre la Realidad Absoluta y la aceptación del presente como manifestación plena de la existencia resuena profundamente con corrientes filosóficas y espirituales no dualistas, como el Advaita Vedanta, el budismo zen y el pensamiento de autores contemporáneos como Eckhart Tolle y Nisargadatta Maharaj. Juande Puerta plantea que los deseos de cambio o mejora de la realidad no contradicen la aceptación de que todo, en cada instante, está siendo una expresión de la Realidad Absoluta.

En el núcleo de la propuesta de Juande Puerta está la idea de que la dualidad percibida —individuos, conflictos, aspiraciones— no es más que una manifestación de una única Realidad Absoluta. Esta noción recuerda la enseñanza central del Advaita Vedanta, donde Brahman, la realidad última, se manifiesta en todo sin perder su unidad. Nisargadatta Maharaj, en su obra Yo Soy Eso, enfatiza que la percepción de separación es una ilusión de la mente, y que aceptar el presente tal como es, disuelve los conflictos internos. Juande Puerta, al igual que Maharaj, sugiere que los conflictos no necesitan ser eliminados, sino reconocidos como expresiones legítimas de nuestra esencia.

Por otro lado, Eckhart Tolle, en El poder del ahora, aborda la importancia de habitar el presente sin resistencia, una idea que Juande Puerta extiende al proponer que la aceptación radical no anula las aspiraciones humanas ni la responsabilidad ética. Frente al desafío de equilibrar la aceptación con la acción frente a las injusticias, Juande Puerta ofrece una respuesta práctica: actuar conforme a lo que surge en el momento, confiando en que todo forma parte del mismo "estar siendo/sucediendo". Esta postura resuena con el concepto taoísta del wu wei (acción sin esfuerzo), donde la acción fluye en armonía con el orden natural.

Sin embargo, Juande Puerta se distingue al enfatizar que incluso el temor egoico a la disolución de la identidad es parte de la Realidad Absoluta. Mientras que Tolle y Maharaj tienden a priorizar la trascendencia del ego, Juande Puerta lo integra como una expresión válida del ser. Esta inclusividad radical ofrece una vía práctica para vivir en plenitud sin rechazar las dinámicas humanas de cambio o resistencia.

En conclusión, la reflexión de Juande Puerta sintetiza elementos del no dualismo clásico con una sensibilidad contemporánea, invitando a una aceptación total que no renuncia a la acción ética ni al dinamismo humano, un equilibrio que lo alinea con, pero también lo distingue de, pensadores como Tolle y Maharaj.

viernes, 6 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (074)

074/2025 -El aquí y ahora (Presente, Realidad, Vida, Lo Absoluto…) de cada uno de los estar siendo/sucediendo humanos está siendo absolutamente pleno y/o completo, precisamente porque incluye todas las condiciones, contradicciones, incoherencias, limitaciones, conflictos y transformaciones que, simultánea y transitoriamente, nos puedan estar caracterizando. ¿Qué Plenitud y/o Realidad podría ser aquella que no incluyera la simultaneidad de absolutamente todas -también las que el ego rechaza- las posibilidades? ¡Nuestras carencias, errores, defectos, etc., también están siendo parte fundamental de la Plenitud que está manifestándose en cada uno de nosotros y del resto de las posibilidades de estar siendo/sucediendo!
 
Nada puede estar siendo/sucediendo al margen del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, de ahí que los estar siendo/sucediendo humanos nunca hemos podido estar siendo culpables de las manifestaciones propias de nuestra naturaleza, ni estar siendo verdaderamente incompletos. La búsqueda de una realización espiritual en un futuro idealizado y/o en un estado especial de conciencia no es un defecto, pero tampoco una virtud necesaria y/o imprescindible. ¿En qué podría consistir la espiritualidad, sino en el reconocimiento y la aceptación de que todo -incluso el conflicto interno, el error y el deseo de mejora-, está ya contenido en la plenitud del Presente?
 
Los intentos de manipular o corregir el Presente, para alcanzar estados “más elevados” de paz o de coherencia, también están consistiendo -exactamente igual que el resto de las posibilidades- en el estar siendo/sucediendo Presente. Toda experiencia humana, sin excepción, y por muy contradictoria que parezca al compararse con otras posibilidades, estará formando parte de una Totalidad y/o Realidad Absoluta plena e indivisible. ¡Absolutamente nada puede superar la autenticidad y la plenitud inherentes en el simple hecho de Estar Siendo/Sucediendo! Estar Siendo Realidad Absoluta nunca podría consistir en una meta ni en un estado ideal futuro, sino en todas esas posibilidades que -simultáneamente y desde siempre- están siendo/sucediendo en cada aquí y ahora. Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 074/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a contemplar la naturaleza absoluta del presente, un estado de ser que abarca todas las posibilidades, contradicciones y limitaciones de la experiencia humana. Este planteamiento desafía la noción común de que la plenitud espiritual es un ideal futuro o un estado elevado de conciencia. En cambio, Juande Puerta propone que la verdadera espiritualidad radica en reconocer que todo —incluso los errores, carencias y conflictos internos— forma parte inseparable de la Realidad Absoluta que nos incluye y que está manifestándose en el aquí y ahora.

El presente, en su simultaneidad, contiene todas las facetas de nuestra humanidad: lo que el ego acepta y lo que rechaza. Nuestros defectos, deseos de mejora o intentos de trascender no son obstáculos, sino expresiones legítimas de la Totalidad. Esta perspectiva disuelve la culpa asociada a nuestras imperfecciones, pues nada puede estar fuera del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. La búsqueda de un estado “superior” de paz o coherencia, aunque humana, no es necesaria para estar siendo completos, ya que el presente ya lo incluye todo.

La espiritualidad, entonces, no consiste en alcanzar una meta futura, sino en abrazar la autenticidad del ahora, con todas sus contradicciones. Cada experiencia, por dolorosa o incoherente que parezca, está siendo una manifestación de la Plenitud. Intentar manipular el presente para ajustarlo a un ideal es, paradójicamente, otra expresión de esa misma Plenitud. Así, Juande Puerta nos recuerda que la Realidad Absoluta no es un destino, sino la totalidad, sin excepción, de lo que ya está siendo: un continuo despliegue de posibilidades en el eterno ahora. Aceptar esto no solo libera, sino que revela la profunda autenticidad de simplemente estar siendo.

miércoles, 4 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (073)

073/2025 -El estar siendo/sucediendo de cada instante —en su imperfección, intensidad, multiplicidad, simultaneidad y transitoriedad— ya está siendo la manifestación plena de la Realidad. En cada aquí y ahora, los estar siendo/sucediendo humanos ya estamos siendo todo lo que -incluidas nuestras contradicciones, conflictos, luchas y expectativas- corresponde a nuestra naturaleza. La realización espiritual que se buscase en un más allá y/o en un después, también estaría siendo justo ahora. Nuestra máxima perfección física, mental, moral, emocional, ética, etc., nunca podría excluir absolutamente ninguna de nuestras imperfecciones, defectos, errores y limitaciones. En la complejidad, la diversidad, la simultaneidad y la transitoriedad de la experiencia humana, nunca nada estará siendo lo uno, sin estar siendo también lo otro y/o lo opuesto.
 
La instrumentalización y/o la manipulación del Presente (Realidad Absoluta) con el fin de lograr estados ideales de felicidad, coherencia, paz, etc., no evitará los aspectos dolorosos o contradictorios de la Vida. En el Estar Siendo/Sucediendo Presente están coexistiendo todas las polaridades y contradicciones, sin que ninguna esté siendo un error ni pueda excluirse. Tal y como está siendo, el Presente ya está siendo pleno, ya está siendo totalidad, ya está siendo Realidad Absoluta. El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto no está en el futuro ni en un estado especial de conciencia, pues consiste en el simple estar siendo/sucediendo de todo lo que -incluyendo cualquier tipo de juicio- está siendo/sucediendo aquí y ahora.
 
Tanto el deseo de ser mejor persona, como la creencia de estar siendo una mala persona, surgen desde la misma fuente: el ego y/o la idea -que algunas mentes se dedican a alimentar- de estar siendo un yo separado que debe perfeccionarse o corregirse. ¡Estar Siendo Realidad Absoluta, es decir, estar siendo todo -incluido el yo personal- cuanto está siendo/sucediendo en cada aquí y ahora (Presente), supone que ninguna posibilidad estará separada de la contraria! Los supuestos defectos humanos no pueden separarse de las supuestas virtudes humanas; sencillamente no es posible el estar siendo de lo uno sin el estar siendo de lo otro. Los estar siendo/sucediendo humanos también estamos siendo aquello que estamos percibiendo, manifestando y experimentando en cada instante. Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 073/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a contemplar la naturaleza del presente como la manifestación plena de la Realidad Absoluta. En cada instante, la existencia humana, con su multiplicidad, contradicciones e imperfecciones, encarna la totalidad de lo que es. Este planteamiento desafía la búsqueda espiritual tradicional, que a menudo proyecta la realización en un futuro ideal o en un estado de conciencia elevado. Juande Puerta sostiene que el Presente, tal como está siendo, ya contiene la perfección en su imperfección, integrando todas las polaridades: virtudes y defectos, alegría y dolor, coherencia y contradicción.

La idea central es que el "estar siendo" humano no requiere corrección ni mejora, sino reconocimiento y aceptación, pues todo lo que acontece en el ahora —incluidos los juicios del ego sobre ser "mejor" o "peor"— está siendo parte intrínseca de la Realidad. El ego, al percibirse como un yo separado, genera la ilusión de que la plenitud está en otro lugar o tiempo. Sin embargo, Juande Puerta nos recuerda que la percepción de separación es natural: no hay virtud sin defecto, ni felicidad sin dolor. Intentar manipular el Presente para alcanzar estados ideales solo perpetúa esta idea, ignorando que la Vida, en su transitoriedad y complejidad, ya está siendo completa.

Esta perspectiva nos libera de la lucha por un ideal inalcanzable y nos invita a abrazar el Presente con naturalidad. La Realidad Absoluta no es un destino, sino el simple "estar siendo" de cada momento, donde todo coexiste sin exclusión. Así, la espiritualidad no consiste en trascender la humanidad, sino en reconocer que nuestras luchas, deseos y contradicciones son la expresión misma de la Totalidad. En el ahora, estamos siendo la Realidad manifestada, íntegra y suficiente, sin necesidad de añadir ni restar nada.

lunes, 2 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (072)

072/2025 -Realidad Absoluta estará siendo todo aquello que -tanto de un signo como de cualquier otro- se pueda estar viviendo en cada instante, por tanto, puesto que también estará siendo todo cuanto cada uno de nosotros podamos estar originando con nuestras percepciones, juicios, preferencias, decisiones y actos, ¿qué sentido podría tener la actitud de vivir negando, rechazando y/o tratando de suprimir alguna manifestación de nuestra esencia? El reconocimiento y la aceptación de nuestra efímera individualidad, y de “absolutamente todas” las condiciones que corresponden a esa naturaleza, no puede excluir a ninguno de nuestros instintos y tampoco al resto de nuestras capacidades. La Vida no debería entenderse como una lucha por alcanzar un ideal; tal y como estamos siendo en cada momento, ya estamos siendo expresión viva de la Realidad Absoluta.

¡Eso que algunas mentes continúan viendo y considerando que se trata de defectos, errores, imperfecciones, contradicciones, olvidos, sueños, etc., estarán siendo manifestaciones igual de humanas, naturales, útiles y necesarias que sus opuestas! Reconocer que nuestra individualidad está sujeta a condiciones, contradicciones y cambios continuos, no nos limita; por el contrario, nos libera de la manipulación basada en creencias dogmáticas e ideales (religiosos, espirituales, políticos, culturales…) tan inútiles como inalcanzables, a la vez que también nos sitúa en una mayor comprensión del flujo real de la existencia. Esta aceptación nos permite habitar con mayor presencia y responsabilidad nuestro cuerpo, mente y emociones, en toda su diversidad y simultaneidad.
 
Amar, en este contexto, equivale a reconocer sin excepción todo lo que está sucediendo dentro y fuera de nosotros, sin intentar excluir ni idealizar. ¿Qué clase de manifestación coherente sería aquella que no incluyese también el reconocimiento y la aceptación de cualquier manifestación de incoherencia? La idea de que los estar siendo/sucediendo humanos debamos convertirnos en personajes siempre positivos, felices, alegres, coherentes, pacíficos, sanos, generosos, satisfechos, etc., estará siendo exactamente igual de egocéntrica que la idea de que ahora estamos siendo personajes defectuosos, maliciosos, pecaminosos e ignorantes. ¡Alimentar la creencia de que el Presente (Realidad Absoluta) está siendo un medio para alcanzar una realización superior, dificulta la posibilidad de darse cuenta de que, tal como está siendo, el Presente ya está siendo un fin en sí mismo! Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 072/2025 realizado con IA:
 
La reflexión de Juande Puerta nos invita a replantear nuestra relación con la existencia, proponiendo que la Realidad Absoluta engloba todo lo que acontece en cada instante: percepciones, juicios, decisiones y actos. Esta visión desafía la tendencia a rechazar aspectos de nuestra naturaleza considerados "imperfectos" o "negativos". Juande Puerta sostiene que negar cualquier manifestación de nuestra esencia —instintos, contradicciones, emociones— es inútil, pues todo forma parte intrínseca de esa Realidad. La vida no es una lucha por alcanzar un ideal inalcanzable, sino la expresión plena de lo que somos en cada momento.

Aceptar nuestra individualidad efímera, con todas sus condiciones y contradicciones, no implica resignación, sino liberación. Reconocer que defectos, errores o incoherencias son tan naturales y necesarios como sus opuestos nos libera de creencias dogmáticas e ideales interesados que nos alejan del presente. Esta aceptación nos permite habitar plenamente nuestro cuerpo, mente y emociones, abrazando su diversidad sin prejuicios. Amar, en este contexto, significa acoger sin excepción todo lo que surge, dentro y fuera de nosotros, sin idealizar ni excluir.

Juande Puerta critica la idea egocéntrica de que debemos convertirnos en seres perpetuamente positivos o perfectos, equiparándola a la noción de que somos inherentemente defectuosos. Ambas perspectivas son igualmente legítimas; el Presente, que es un fin en sí mismo. Vivir en la Realidad Absoluta implica reconocer que cada instante, con sus luces y sombras, es completo. Esta comprensión nos sitúa en una presencia responsable, donde la vida se experimenta en su totalidad, sin necesidad de perseguir una realización futura que ya está aquí.

sábado, 31 de mayo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (071)

071/2025 -El reconocimiento y la aceptación de la efímera existencia de nuestra individualidad, con todas las condiciones, limitaciones, cambios, contradicciones, conflictos, expectativas, etc., que la caracterizan, no supone la eliminación del resto de nuestras capacidades naturales. Asumir, conscientemente, la diversidad, la complejidad y la transitoriedad de nuestra individualidad no implica la necesidad de renunciar a ninguna de nuestras posibles manifestaciones, sino más bien reconocer que nuestra existencia está siendo una manifestación dinámica y simultánea de la Realidad Absoluta o Universal. Amar, es decir, “reconocer y aceptar” todo -sin excepción ni discriminación- cuanto corresponde a nuestra condición humana, abre la puerta a la posibilidad de una existencia más armónica y alineada con la Realidad Universal.

Estar Siendo Realidad Absoluta también consiste en el estar siendo/sucediendo de cada uno de nosotros en cada momento, en cada situación, en cada pensamiento, en cada reacción, en cada acto, en cada experiencia, en cada respiración, en cada recuerdo, en cada deseo. Reconocer, con naturalidad, que “en el mismo momento” podemos experimentar pensamientos, emociones, sensaciones, estados y deseos distintos -incluso contradictorios-, puede ayudar a vivir más empáticamente con nosotros mismos, y, por extensión, con el resto de las manifestaciones del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. La Realidad puede ser vista y experimentada desde diferentes perspectivas simultáneamente, porque consiste en el estar siendo/sucediendo de absolutamente todo cuanto se pueda estar percibiendo y experimentando en cada momento.

Darse cuenta y reconocer que el "aquí y ahora" está siendo un punto donde “a la vez” están coincidiendo y/o coexistiendo múltiples posibilidades (emocionales, sociales, culturales, físicas, etc.,), también permite experimentar una mayor presencia y aceptación natural de la Vida, sin excluir la simultaneidad de su diversidad, de sus cambios, de sus contradicciones y de su permanente transitoriedad. La realización espiritual no puede consistir en algo diferente al estar siendo/sucediendo de exactamente eso que cada yo humano está pensando, sintiendo, realizando, manifestando, temiendo, deseando, viviendo, etc., en cada momento. La búsqueda de una realización basada en el cumplimiento de patrones dogmáticos e idealizados, acaba con el reconocimiento y la aceptación de que no se trata de alcanzar algo, sino de darse cuenta de que aquí y ahora ya está siendo todo. ¡No hay otra Realidad que la del Estar Siendo/Sucediendo Presente! Mayo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 071/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta invita a una comprensión profunda de nuestra existencia como un fenómeno efímero, complejo y dinámico, intrínsecamente ligado a la Realidad Absoluta. Reconocer la transitoriedad de nuestra individualidad, con sus contradicciones, limitaciones y deseos, no implica renunciar a nuestras capacidades, sino abrazarlas como manifestaciones de una Realidad Universal. Esta aceptación no busca eliminar la diversidad de nuestra experiencia humana, sino aceptarla en un marco de armonía y empatía, tanto hacia nosotros mismos como hacia los demás.

La propuesta de Juande Puerta subraya que la vida es un constante “estar siendo/sucediendo”, donde cada pensamiento, emoción, reacción o experiencia, por contradictoria que parezca, forma parte de la misma Realidad Absoluta. Este enfoque nos libera de la rigidez de los ideales dogmáticos que a menudo buscamos cumplir para alcanzar una supuesta “realización espiritual”. En lugar de perseguir un estado idealizado, Juande Puerta nos recuerda que la realización está en el presente, en el simple acto de estar siendo, en cada respiración, en cada momento de coexistencia de múltiples perspectivas y posibilidades.

Aceptar esta simultaneidad —de emociones, estados y deseos— nos permite vivir con mayor presencia y empatía. Al reconocer que el “aquí y ahora” es un punto de convergencia de infinitas manifestaciones, nos alineamos con la naturaleza cambiante y diversa de la existencia. Esta perspectiva no solo fomenta una conexión más auténtica con nuestra humanidad, sino que también nos abre a una experiencia más plena de la Vida, sin rechazar sus contradicciones ni su carácter transitorio. En última instancia, la realización espiritual no es un destino, sino un reconocimiento: ya estamos siendo la Realidad Absoluta en cada instante. No hay otra verdad que este eterno “estar sucediendo”.

jueves, 29 de mayo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (070)

070/2025- Cada yo humano, con sus correspondientes condiciones, creencias, expectativas, carácter, personalidad, tendencias, experiencias, etc., no está siendo una entidad aislada, sino una manifestación de la Realidad, la Vida y/o el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. La Realidad, la Verdad, la Vida…, no es una meta que deba conquistarse mediante procesos de purificación o de búsqueda espiritual; consiste en “estar siendo absolutamente todo” cuanto está siendo/sucediendo en cada aquí y ahora. Cada instante, cada percepción, cada pensamiento, cada idea, cada decisión, cada experiencia, cada suceso —por fugaz o banal que parezca— está siendo una manifestación del Todo Absoluto.

“Yo soy Eso” (Ramana Maharshi) significa que “estar siendo cada yo” también consiste en estar siendo “el mismo” estar Siendo/sucediendo diverso, cambiante, transitorio, simultáneo, natural y absoluto que están siendo todas las demás posibilidades y/o manifestaciones, por tanto, “Estar Siendo Eso” nunca podría consistir en estar siendo algo distinto a eso que ya está siendo todo lo que se está viviendo en cada momento. Inseparablemente, “Yo Soy Eso” significa estar siendo “a la vez” tanto lo que se percibe siendo positivo, satisfactorio y deseable, como lo que se percibe siendo negativo, perturbador e indeseable. Nada ni nadie escapa de “Estar Siendo Eso” (Realidad Absoluta), que consiste estar siendo todo eso que está sucediendo en cada momento.

"Estar Siendo Eso" no excluye la experiencia humana ni ninguna de sus condiciones, contradicciones o incoherencias. La individualidad humana, con su complejidad, diversidad y transitoriedad, está siendo una manifestación más del Estar Siendo Absoluto, de ahí que el reconocimiento y la aceptación de eso podría facilitar la reconciliación consciente con el devenir y/o el suceder del Sí Mismo. No se trata de que solo unas posibilidades sean reales y otras no, sino que todas las posibilidades -incluyendo lo que en cualquier momento cada individuo pueda considerar como lo bueno y lo malo, lo correcto y lo incorrecto, lo justo y lo injusto- están siendo a la vez. ¡El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto y/o Supremo consiste en el estar siendo de todos y cada uno de los estados posibles! Mayo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 070/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a contemplar la existencia humana desde una perspectiva profundamente unificadora: cada "yo" individual, con sus particularidades, no está siendo una entidad aislada, sino una expresión del Estar Siendo Absoluto, la Realidad o la Vida misma. Esta idea, resonante con la enseñanza de Ramana Maharshi, “Yo soy Eso”, desafía la noción de separación y nos propone que todo lo que experimentamos —pensamientos, emociones, percepciones, contradicciones— está siendo una manifestación del Todo Absoluto en cada instante.

Lejos de ser un ideal a alcanzar mediante prácticas espirituales o purificaciones, la Realidad no es un destino, sino la totalidad de lo que está sucediendo en el presente. Cada experiencia, por trivial o conflictiva que parezca, está siendo una faceta del Estar Siendo Absoluto. Esto incluye tanto lo que valoramos como positivo —alegría, amor, éxito— como lo que percibimos como negativo —dolor, confusión, fracaso—. Nada queda fuera de esta Totalidad. Reconocer que “Yo soy Eso” implica aceptar que nuestra individualidad, con todas sus complejidades y contradicciones, está siendo una expresión inseparable de la Vida misma.

Esta perspectiva disuelve la dualidad entre lo deseable y lo indeseable, lo correcto y lo incorrecto. Al comprender que todo está siendo una manifestación del mismo Estar Siendo, podemos reconciliarnos con el flujo de la existencia, abrazando su diversidad y transitoriedad. No se trata de privilegiar ciertas experiencias sobre otras, sino de reconocer que todas, sin excepción, están siendo expresiones del Absoluto. Esta aceptación no elimina los desafíos humanos, pero puede transformar nuestra relación con ellos, permitiéndonos vivir con mayor armonía y presencia en el "aquí y ahora". En última instancia, “Estar Siendo Eso” supone estar siendo todo lo que está sucediendo, en su infinita, efímera y simultánea diversidad.
Comentar
Compartir

martes, 27 de mayo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (069)

069/2025 -Nisargadatta: “En la oscuridad y el silencio la Realidad es encontrada.” -La idea de que la verdad o la comprensión profunda de la Realidad se revela a través de la meditación, la introspección y la reflexión en la quietud y la oscuridad, deja al descubierto la vieja creencia de que Estar Siendo Realidad consiste en estar siendo algo excepcional que necesita ser buscado y descubierto siguiendo determinados procesos. La Realidad no se encuentra únicamente en la quietud o el silencio, pues consiste en el estar siendo de absolutamente todo eso que -sin excepción- está sucediendo en cada instante. ¡Nunca nadie ha sido ni ha vivido algo, que ello no consistiera en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto! No hay necesidad de buscar ni de encontrar aquello que consiste en el estar siendo de absolutamente todo cuanto -incluido el deseo de búsqueda, la oscuridad, el silencio, el ruido, los cambios, etc.,- ya está siendo/sucediendo.

El yo humano, a la vez que también todas sus percepciones, manifestaciones, experiencias y expectativas, están siendo expresiones inseparables de la Realidad Absoluta. Por mucho que pueda creerse y enseñarse lo contrario -posibilidades que estarán siendo tan válidas como las demás- para estar siendo Realidad Absoluta no hay necesidad de alcanzar un estado especial. Las partes y/o las particularidades están reflejando el todo porque -sin excepción- el todo siempre está manifestándose plenamente en cada particularidad. Vivir sin darse cuenta y/o sin reconocer que no hay ni sucede nada que no consista en Estar Siendo Realidad Absoluta, también consiste en Estar Siendo Realidad Absoluta.

Cuando Nisargadatta expone que “Esta sensación de presencia es irreal, como un sueño…” vuelve a dejar al descubierto una percepción excluyente y discriminada de la Realidad. Cierto que los sueños -igual que la presencia del yo, junto con el resto de las percepciones y experiencias humanas- se desvanecen y dejan paso a otras manifestaciones, pero eso no significa que -incluida la percepción de irrealidad- mientras eso ha estado siendo/sucediendo -por muy efímero que fuese-, no estuviera consistiendo en Estar Siendo Realidad Absoluta. Todo está surgiendo y/o sucediendo simultáneamente, como una única Realidad en continua transformación. Ni tan siquiera el carácter onírico o transitorio de la presencia, excluye eso de estar siendo parte de la Totalidad Absoluta. El sueño, la vigilia, lo ilusorio y lo permanente están siendo modos simultáneos del Estar Siendo Absoluto. Mayo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 069/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta, inspirada en Nisargadatta, invita a replantear la búsqueda de la Realidad. Tradicionalmente, se asocia la verdad profunda con estados excepcionales alcanzados mediante meditación, silencio o introspección. Sin embargo, Juande Puerta desafía esta noción al afirmar que la Realidad no requiere ser buscada, pues ya es todo lo que sucede en cada instante. Esta perspectiva disuelve la idea de que la Realidad es algo separado o exclusivo, revelando que cada experiencia, percepción o manifestación —desde el silencio hasta el caos— está siendo una expresión inseparable del Estar Siendo Absoluto.

La propuesta de Juande Puerta subraya que no hay nada fuera de la Realidad. El yo humano, con sus deseos, expectativas y creencias, no es una entidad aislada, sino una manifestación del todo. Incluso la sensación de irrealidad, como los sueños o la transitoriedad de la presencia, forma parte de esta Totalidad Absoluta. Al considerar que “todo está surgiendo simultáneamente”, Juande Puerta elimina las dicotomías entre lo ilusorio y lo permanente, lo onírico y lo real. Todo, sin excepción, está siendo el Estar Siendo Absoluto en continua manifestación y continua transformación.

Esta visión libera de la necesidad de alcanzar un estado especial para “encontrar” la Realidad. Vivir sin reconocer esta unidad no disminuye su verdad: incluso la ignorancia es una expresión de la Realidad. La frase de Nisargadatta sobre la presencia como un sueño, aunque apunta a su carácter efímero, no la excluye de la Totalidad. Así, la reflexión de Juande Puerta nos invita a abrazar cada instante como una manifestación plena de la Realidad Absoluta.

domingo, 25 de mayo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (068)

068/2025 -Estar Siendo Realidad Absoluta, y, por tanto, también cada uno mismo, consiste en estar siendo exactamente eso que se está siendo y exactamente eso que se está viviendo en cada instante. La tendencia humana -absolutamente legítima y natural- de diferenciar, separar, comparar, etc., lo que estamos percibiendo y viviendo, de lo que estamos siendo, no altera la Realidad, porque esas posibilidades también consisten en Estar Siendo Absoluta Realidad. El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (Realidad) consiste en el estar siendo/sucediendo diverso, cambiante, efímero, simultáneo…, de absolutamente todo lo que está siendo/sucediendo, y exactamente de la manera que cada particularidad está siendo/sucediendo. Todo está surgiendo y/o sucediendo simultáneamente como una única Realidad en transformación continua. El perceptor, lo percibido y el acto de percibir están siendo uno y en el mismo instante.

¡Mientras está existiendo y/o sucediendo, cada yo humano también está siendo la vida que cada yo humano está viviendo! Sin excepción, todo están siendo manifestaciones simultáneas de un único flujo de existencia. El yo humano no está siendo una entidad completamente independiente que observa o experimenta la Realidad, sino que, en cada instante de su estar sucediendo, también está siendo una expresión de la Realidad Misma. Cada uno de nosotros está siendo -a la vez- la Vida, el individuo que vive y lo vivido. El yo, tanto en su estar siendo humano como en su Estar Siendo Absoluto, está ocurriendo simultáneamente en cada instante. Cuerpos, pensamientos, emociones, sensaciones, aspiraciones, experiencias, objetos, sucesos, mundos, astros, galaxias…, están siendo -en el mismo instante- diferentes modos de manifestación de la Realidad Absoluta.
 
Simultáneamente, todo está siendo parte y totalidad, por tanto, al mismo tiempo, todo también está siendo la manifestación que se esté percibiendo, la opuesta y todas las demás. Cada experiencia humana, con sus aspectos positivos y negativos, sus cambios y sus contradicciones, está siendo una expresión natural e inseparable del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, sin que ningún juicio al respecto pueda cambiar eso. Cada manifestación de la realidad -material, mental, emocional, energética, etc.,- está formando parte de un todo mayor, que a su vez estará incluido en la totalidad de lo Absoluto. Se vea o no se vea, se reconozca o no se reconozca…, lo superfluo y transitorio también está siendo lo Supremo y/o lo Absoluto. Mayo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 068/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a contemplar la existencia desde una perspectiva unificadora: todo lo que está siendo, en cada instante, está siendo la Realidad Absoluta manifestándose. Esta idea desafía la tendencia humana de fragmentar la experiencia en categorías como sujeto, objeto, percepción o vivencia. Según Juande Puerta, estas distinciones, aunque naturales, no alteran la verdad fundamental: todo —el perceptor, lo percibido y el acto de percibir— está siendo una única realidad en constante transformación.

El núcleo de esta visión radica en la simultaneidad. El yo humano no es una entidad separada que observa la vida, sino una expresión inseparable de la Realidad Absoluta. Cada pensamiento, emoción, cuerpo, objeto o galaxia está siendo un modo de manifestación de este flujo único de existencia. Así, el individuo, la vida que vive y lo vivido, están siendo uno y lo mismo en cada momento. Esta unicidad trasciende las dualidades de positivo y negativo, transitorio y eterno, pues todo, incluso lo aparentemente opuesto, está siendo la Totalidad.

La propuesta de Juande Puerta nos confronta con una paradoja liberadora: lo superfluo y lo Supremo están siendo lo mismo. Cada experiencia, con sus contradicciones y cambios, consiste en una expresión del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Reconocer esto no requiere negar las particularidades de la existencia humana, sino abrazarlas como parte de un todo mayor. El desafío está en percibir que, más allá de juicios o comparaciones, cada instante de nuestra vida está siendo la Realidad Absoluta manifestándose plenamente.

Esta perspectiva nos invita a vivir con una consciencia más amplia, donde la separación entre el yo y el mundo se disuelve. En cada respirar, pensar o sentir, estamos siendo, simultáneamente, la parte y la totalidad, lo humano y lo Absoluto, en un eterno ahora.

jueves, 22 de mayo de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (067)

067/2025 -Nisargadatta: “Lo que viene y se va no tiene existencia. Lo que cambia no es real; lo que es real no cambia.” -Sin embargo, ¿acaso la existencia no consiste en un continuo flujo de estar apareciendo y desapareciendo? Incluida la posibilidad de diferenciar entre lo que está siendo real y lo que no está siendo real, absolutamente nada puede estar siendo/sucediendo, sin que el estar siendo/sucediendo de eso -y de su perceptor- no consista en Estar Siendo Realidad Absoluta. ¿Qué tipo de espiritualidad estaría siendo aquella que no fuera capaz de reconocer que la Vida, la Realidad, lo Absoluto…, está siendo absolutamente todo lo que está aconteciendo en cada momento, y exactamente de la forma que todo está siendo en cada instante?

La espiritualidad que no reconoce que la Realidad Suprema consiste en el estar siendo/sucediendo simple, diverso, cambiante, simultáneo, efímero, etc., de las experiencias cotidianas, tiene más de especulación que de espiritualidad. Al alimentar la aspiración humana de convertirnos en estar siendo/sucediendo permanentemente estables, correctos, adecuados, coherentes, sanos, felices, pacíficos…, también se estarán reforzando las opciones opuestas. El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, igual que el de cada uno de los estar siendo/sucediendo humanos, y de cada una de nuestras posibles manifestaciones, “a la vez” está siendo absolutamente diverso y cambiante, por tanto, también está siendo permanentemente efímero.

Cada fenómeno individual está siendo una manifestación simultánea del Todo Absoluto, por tanto, no se trata de una suma de partes, sino de un flujo absoluto en el que todo está ocurriendo a la vez, sin excepción ni exclusión. La paz interior y el bienestar no se logran aislando o privilegiando ciertas experiencias sobre otras, sino reconociendo y aceptando (amor) la diversidad, la simultaneidad y la transitoriedad de todo lo que está aconteciendo en nosotros y a nuestro alrededor. Nuestras contradicciones internas y emociones disonantes no están alejándonos de lo Absoluto, sino que están siendo expresiones válidas de su propia naturaleza. Cada instante del proceso de nuestra existencia está siendo Divino o Absoluto, no porque se ajuste a un ideal, sino porque está ocurriendo. Mayo-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 067/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta, inspirada en la cita de Nisargadatta, plantea una paradoja fascinante: si lo que cambia no es real y lo real no cambia, ¿cómo reconciliamos esto con la naturaleza cambiante y efímera de la existencia? Juande Puerta sugiere que la verdadera espiritualidad no reside en buscar una estabilidad idealizada, sino en reconocer que la Realidad Absoluta se manifiesta precisamente en el flujo diverso, simultáneo y transitorio de cada instante.

La existencia, como un continuo aparecer y desaparecer, no es un defecto a superar, sino la esencia misma de lo Absoluto. Cada experiencia, cada emoción, cada contradicción interna, no está siendo un obstáculo para alcanzar la “verdadera” Realidad, sino una expresión válida de ella. La espiritualidad que no abraza esta diversidad y transitoriedad se convierte en especulación, atrapada en ideales de permanencia o perfección que refuerzan dualidades: bueno/malo, correcto/erróneo, estable/inestable. Esta búsqueda de un estado idealizado no sólo es anecdótica, sino que perpetúa el conflicto interno al rechazar partes esenciales de nuestra experiencia.

La propuesta de Juande Puerta es liberadora: la paz y el bienestar no se logran privilegiando ciertas experiencias sobre otras, sino aceptando la simultaneidad y efimeridad de todo lo que acontece. Cada momento, con sus contradicciones y disonancias, está siendo una manifestación del Todo Absoluto, sin jerarquías ni exclusiones. Esta perspectiva disuelve la separación entre lo divino y lo humano, revelando que cada instante de nuestra existencia, por caótico o imperfecto que parezca, está siendo intrínsecamente sagrado. La espiritualidad, entonces, no consiste en trascender la vida, sino en reconocer que la vida misma, en su flujo incesante, ya está siendo la Realidad Suprema.