martes, 29 de abril de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (056)

056/2025 -La visión no-dual del estar siendo/sucediendo personal y Absoluto (Realidad Única) solo podría ser aquella que estuviera incluyendo absolutamente todas y cada una de las posibles percepciones y experiencias dualistas. ¡Nada existe ni sucede que no esté siendo Realidad Absoluta, porque estar siendo Realidad Absoluta consiste en el estar siendo/sucediendo simultáneo y preciso de -sin excepción ni discriminación- absolutamente todas las posibilidades! Estar Siendo la No-dualidad Absoluta de la Realidad también consiste en el estar siendo/sucediendo de todas las dualidades, los opuestos, las diferencias, las apariencias, las frustraciones, etc., que pudieran estar siendo percibidas y experimentadas por cualquier individuo en cualquier momento.
 
Todo lo que aparece como dual (placer/dolor, luz/oscuridad, yo/el otro, bien/mal, nacimiento/muerte) está ocurriendo dentro de la No-dualidad Absoluta, es decir, está siendo la No-dualidad Absoluta. La percepción individual —con todas sus apariencias de separación— no está ocurriendo al margen de la No-dualidad Absoluta, porque estar siendo aquello también consiste en estar siendo la No-dualidad Absoluta de la Realidad. Exponer que “todo está siendo perfecto” no significa que no existan las imperfecciones, las carencias, las desilusiones, las dificultades, etc., que cualquiera pueda estar percibiendo y experimentando, sino que el estar siendo/sucediendo de cada una de esas posibilidades también está formando parte de la perfección total y/o del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.
 
Todo cuanto pueda estar sucediendo —incluso lo que consideramos negativo, incómodo o imperfecto— estará formando parte inseparable del incesante fluir del Estar Siendo Absoluto. La absoluta perfección de la Realidad y/o del Presente Absoluto radica en que no excluye ninguna posibilidad…, ni siquiera la frustración, el dolor, la carencia, el miedo, el conflicto y la desaparición. Puesto que Estar Siendo Realidad Absoluta incluye la manifestación de todas las percepciones de dualidad posibles, además de la opción de ver, de juzgar y de categorizar negativamente algo de lo que esté sucediendo…, los estar siendo/sucediendo humanos también disponemos de la posibilidad de “percibir la parte amable” inherente en cada una de esas expresiones. Abril-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 056/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta sobre la no-dualidad absoluta invita a contemplar la Realidad como un todo indivisible que abarca todas las experiencias, percepciones y dualidades. La no-dualidad no excluye las aparentes contradicciones de la vida —placer y dolor, luz y oscuridad, yo y el otro— sino que las integra como expresiones intrínsecas de su estar siendo. Esta visión desafía la percepción ordinaria que fragmenta la realidad en opuestos, proponiendo que todo, incluso lo que parece imperfecto o doloroso, es parte del fluir perfecto del Estar Siendo Absoluto.

La clave de esta perspectiva radica en comprender que la Realidad Absoluta no discrimina ni rechaza ninguna posibilidad. Las experiencias de separación, frustración o conflicto, que caracterizan la percepción individual, no ocurren al margen de la no-dualidad, sino dentro de ella. Afirmar que “todo es perfecto” no niega el sufrimiento o las dificultades, sino que reconoce que estas también forman parte de la totalidad. La perfección absoluta no reside en la ausencia de imperfecciones, sino en la inclusión de todas las manifestaciones, incluso las que juzgamos negativas.

Esta visión nos ofrece una libertad profunda: la posibilidad de percibir la “parte amable” en cada experiencia. Al entender que todo —incluso el dolor o el miedo— es una expresión de la Realidad Absoluta, podemos transformar nuestra relación con lo que sucede. La no-dualidad nos invita a dejar de resistir las dualidades y a abrazar la vida en su totalidad, reconociendo que cada momento, con sus luces y sombras, es una manifestación del Presente Absoluto. Así, la práctica de esta comprensión no elimina las dificultades, pero nos permite habitarlas con una apertura que trasciende la separación y el juicio.

sábado, 26 de abril de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (055)

055/2025 -Absolutamente nada existe ni sucede que -por insignificante e intrascendente que parezca- ello no esté consistiendo en una manifestación natural del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, de ahí que la idea de que algunas experiencias pueden estar siendo más elevadas o espirituales que otras sólo estará señalando hacia las opiniones y creencias de algunos individuos. En la esencia de la naturaleza de los estar siendo/sucediendo humanos coexisten tanto el anhelo de trascendencia como la experiencia de limitación y carencia, sin que eso signifique que alguna de esas posibilidades esté siendo una ilusión, un error y/o una imperfección que deba ser corregida. En el proceso existencial de cada estar siendo/sucediendo humano están presentes y/o latentes “todos” los supuestos niveles de conciencia que en algún momento y circunstancia pudieran manifestarse y percibirse en los demás.

Paradójicamente, la mayor parte de las tradiciones religiosas, espirituales, políticas, culturales, etc., se fundamentan en las mismas creencias, dogmas, prejuicios, etc., que las sustentan y que supuestamente tratan de combatir. Las ofertas de una alternativa o una solución distinta al acontecer natural, suelen terminar reproduciendo las mismas estructuras, creencias y mecanismos de poder que están criticando. Las tradiciones religiosas y políticas pueden promover valores de paz y amor, libertad y justicia, etc., pero históricamente también han estado vinculadas a conflictos, violencia y exclusión hacia otros grupos o disidentes. Negar las condiciones naturales de nuestro estar siendo/sucediendo hace que “vivamos creyendo” que nacemos con alguna falta, con algún propósito y con alguna deuda que saldar.
 
Aceptar o negar que -independientemente de cómo pueda estar manifestándose en cada momento- nuestra condición natural siempre está siendo plena y/o absoluta (todas las posibilidades a la vez), puede alterar las creencias correspondientes, pero nunca la Realidad. Estar siendo la Realidad, la Vida, lo Absoluto…, consiste en el estar siendo exacto de absolutamente todo cuanto está siendo/sucediendo en cada instante. La realidad dualista que los estar siendo/sucediendo humanos percibimos, experimentamos y deseamos cambiar, también está siendo nuestra Realidad. El supuesto olvido -y sus efectos- de nuestro verdadero estar siendo/sucediendo, también está siendo la manifestación de nuestro verdadero estar siendo/sucediendo. Siempre estamos siendo todo lo que pudiéramos desear estar siendo y también todo lo que pudiéramos desear no estar siendo. Abril-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 055/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta ofrece una mirada profundamente inclusiva de la existencia, en la que todo cuanto acontece —desde los pensamientos más sublimes hasta las emociones más mundanas— forma parte del “Estar Siendo/Sucediendo Absoluto”. Esta perspectiva desafía las jerarquías tradicionales del pensamiento espiritual, que tienden a dividir las experiencias en superiores e inferiores, lo sagrado de lo profano. Para Juande Puerta no existe tal separación: todo lo que está siendo, simplemente está siendo una manifestación plena de lo Absoluto.

Desde esta visión no-dual, la condición humana no requiere redención ni mejora, pues ya contiene en sí misma la totalidad. El deseo de trascendencia y la vivencia de la limitación no se excluyen entre sí, sino que coexisten como expresiones legítimas del mismo flujo de la conciencia. El sufrimiento, el anhelo, la confusión o la dicha no son errores a corregir, sino expresiones válidas del Estar Siendo.

Además, Juande Puerta cuestiona los discursos de salvación que promueven muchas tradiciones religiosas, espirituales y políticas. Aunque predican la superación del sufrimiento y la desigualdad, suelen reforzar la creencia en la carencia y en la necesidad de alcanzar un estado ideal que niega lo que ya estamos siendo. Esta búsqueda perpetua dificulta la aceptación radical que libera.

En su núcleo, la reflexión afirma que incluso el olvido de nuestra naturaleza absoluta está siendo parte de la misma Realidad Absoluta. No hay un lugar “fuera” de ella. Reconocer esta verdad no implica una transformación externa, sino una rendición interior que nos permite habitar cada momento desde la plenitud. Así, la vida, con todas sus formas, se revela como completa, sin necesidad de justificación ni meta. En el estar siendo, todo —incluso el error aparente— está siendo perfecto tal como está siendo.

jueves, 24 de abril de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (054)

054/2025- No hay otra Realidad Suprema más allá de lo que está ocurriendo en cada instante: aquello que estemos pensando, sintiendo, haciendo, experimentando, imaginando, etc., -sin excepción- ya está siendo la Realidad Suprema. Todo lo que está sucediendo, y tal como cada posibilidad está sucediendo, ya está siendo Realidad Suprema, por tanto, también las posibilidades de creer o no creer, de buscar o no buscar, de luchar o no luchar, de aceptar o no aceptar. Si puede decirse que en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto no hay división, separación, contradicción, conflicto…, es porque el estar siendo/sucediendo de la división, la separación, los problemas, etc., que pudiera estar aconteciendo y/o que se estuviera percibiendo y experimentando también estaría siendo el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, por tanto, ¿qué estarían siendo las jerarquías existenciales, los niveles concienciales, las excelencias personales y/o cualquier tipo de maestrías?
 
¡El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto consiste en el estar siendo/sucediendo de absolutamente todo cuanto -sin excepción ni categorías- está siendo/sucediendo en cada instante! Cada posibilidad está siendo la manifestación del proceso dinámico que al mismo tiempo también están manifestando todas las demás posibilidades. Entre las “cualidades humanas” también está aquella que consiste en la resistencia a aceptar la percepción de dualidad (y de cualquiera de sus posibles efectos), por mucho que ello pueda estar suponiendo la no aceptación de una parte esencial de nuestra propia naturaleza y/o del proceso natural de nuestra existencia. La experiencia de la dualidad, así como su aceptación y su negación, también está formando parte del proceso natural de la existencia humana. El posible anhelo espiritual de trascender la percepción de dualidad y/o de separación, siempre estará siendo tan legítimo y natural como cualquier otro.
 
Estar Siendo Realidad Absoluta no consiste en estar siendo algo separado ni distinto a lo que está siendo/sucediendo en cada momento, por tanto, Realidad Absoluta está siendo tanto la experiencia de unidad como la de separación. ¡Ningún anhelo podrá florecer si no lleva implícita la aceptación de su opuesto y del resto de las posibilidades! Por el simple hecho de estar sucediendo, los intentos de escapar de cualquier experiencia de la cotidianidad humana estará siendo tan natural como cualquier otra posibilidad que pueda estar manifestándose. La resistencia, la negación, el malestar, etc., ante la percepción y la experiencia de la existencia de dualidad, separación, carencia, etc., nunca podrían estar siendo posibilidades menos naturales, válidas o legítimas que las demás. Abril-25
Juande Puerta.
 
Ensayo sobre la reflexión 054/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a cuestionar la noción común de que existe una Realidad Suprema separada o trascendente al instante presente. Para él, todo lo que está ocurriendo —ya sea un pensamiento, una emoción, una acción o una percepción de dualidad— está siendo ya la Realidad Suprema. No hay nada fuera de ella, porque el "Estar Siendo" lo abarca todo: tanto la búsqueda de sentido como la confusión, tanto la aceptación como la resistencia.

Este enfoque radicalmente inclusivo desmantela las jerarquías espirituales o existenciales. No hay niveles superiores de conciencia que invaliden los niveles aparentemente más “bajos”, porque todos son expresiones del mismo proceso absoluto. En ese sentido, la experiencia humana —con todas sus luces y sombras— no es un obstáculo para alcanzar una supuesta iluminación, sino precisamente su manifestación.

La percepción de dualidad, tan debatida en tradiciones espirituales, no es vista aquí como un error que debe corregirse, sino como una posibilidad legítima dentro del abanico de lo que está siendo. Incluso el deseo de trascender la dualidad, y el malestar que esta puede generar, son aspectos naturales del flujo existencial.

Aceptar que cada instante —sin importar su forma— es ya la Realidad Suprema, implica soltar toda resistencia al momento presente. Pero incluso esa resistencia, si ocurre, no es un fallo, sino otra expresión más del estar siendo. Así, Juande Puerta nos ofrece una visión no dual donde no hay nada que excluir, rechazar o elevar por encima del resto.

En última instancia, su propuesta no niega la posibilidad del cambio o del crecimiento espiritual, sino que los integra como aspectos del mismo proceso dinámico. Toda experiencia, por el simple hecho de suceder, está siendo sagrada. Y esa comprensión puede resultar, paradójicamente, liberadora.

martes, 22 de abril de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (053)

053/2025 -El proceso de la existencia de cada estar siendo/sucediendo humano consiste en el mismo proceso de continua transformación y/o regeneración que cualquiera de nosotros también pueda apreciar en alguna otra forma de existencia. La percepción de las condiciones propias de nuestra naturaleza y/o de nuestro estar siendo/sucediendo particular también está siendo la percepción de la naturaleza del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. La dualidad que cada uno de nosotros percibe y experimenta está siendo tan nuestra como está siendo nuestro cuerpo, nuestra mente, nuestros pensamientos, nuestras emociones, nuestros actos y el resto de nuestras manifestaciones.

La división, la separación, la contradicción, el conflicto, etc., que los estar siendo/sucediendo humanos percibimos formando parte de nosotros, y que también está presente en nuestras relaciones con los demás y con el mundo, no pertenece a una Realidad Absoluta diferente a la que está siendo la esencia de nuestra naturaleza. Nuestras luchas, incoherencias, contradicciones, polaridades, aspiraciones, etc., no están siendo errores ni defectos, sino aspectos inherentes y legítimos de la condición humana, que, por tanto, al mismo tiempo también están formando parte del proceso del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Lo relativo (dualidad) y lo Absoluto (no dualidad) no están en conflicto, sino que coexisten como expresiones de la misma Esencia. No puede estar sucediendo una experiencia que -independientemente de la manera personal de percibirla y de juzgarla- no esté siendo un reflejo de nuestro estar siendo/sucediendo más profundo.
 
Las características naturales y/o propias -incluidas las percepciones de dualidad, separación, rivalidad, carencia- de todos los estar siendo/sucediendo en general, y también de cada uno en particular, pueden verse como si estuvieran siendo defectos y/o imperfecciones, pero ello no evitará que también estén siendo “cualidades” que deberían reconocerse. Del mismo modo que desconfiar de algún aspecto y/o manifestación del estar siendo/sucediendo propio, también supone estar desconfiando del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, desconfiar de algún aspecto y/o manifestación del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto también supone estar desconfiando del estar siendo/sucediendo propio. Abril-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 053/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a contemplar la existencia humana como un proceso dinámico de transformación, intrínsecamente ligado a la Realidad Absoluta. Cada individuo, en su estar siendo/sucediendo, refleja tanto la dualidad de la experiencia cotidiana como la no dualidad de la Esencia última. Esta perspectiva disuelve la aparente contradicción entre lo relativo y lo Absoluto, proponiendo que ambos coexisten como manifestaciones de una misma naturaleza.

La dualidad —experimentada en nuestras emociones, pensamientos, conflictos y relaciones— no es un defecto, sino una cualidad inherente de la condición humana. Las luchas, contradicciones y polaridades que percibimos no son errores, sino expresiones legítimas de nuestro estar siendo. Reconocer esto implica aceptar que nuestras percepciones de separación o carencia son, en última instancia, reflejos de la Realidad Absoluta. Esta idea desafía la tendencia a juzgar nuestras experiencias como imperfecciones, proponiendo en cambio que son facetas esenciales del proceso existencial.

Juande Puerta subraya que desconfiar de cualquier aspecto de nuestro estar siendo equivale a desconfiar del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, y viceversa. Esta interconexión sugiere que la aceptación de nuestra naturaleza, con todas sus complejidades, es también un acto de reconocimiento de la Totalidad. Así, la dualidad no está en conflicto con lo Absoluto, sino que es una expresión de su Esencia. Cada experiencia, por dolorosa o contradictoria que parezca, es un reflejo de nuestro ser más profundo y, por ende, de la Realidad última.

En conclusión, la reflexión nos exhorta a abrazar la totalidad de nuestra existencia, reconociendo que lo relativo y lo Absoluto no son opuestos, sino aspectos complementarios de una misma verdad. Al hacerlo, transformamos nuestra percepción de la vida, encontrando sentido en cada manifestación de nuestro estar siendo.

domingo, 20 de abril de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (052)

 052/2025 -La persistente dualidad, que los estar siendo/sucediendo humanos percibimos, experimentamos y sentimos que está impulsándonos a actuar en cada instante del “proceso dinámico” de nuestra efímera existencia, no está siendo una imperfección ni un error a corregir, sino una manifestación, tan absolutamente natural en cada uno de nosotros, como en el resto de las manifestaciones que podamos estar percibiendo, compartiendo y viviendo. La percepción de dualidad, condición inherente en lo más profundo de nuestra esencia (resultado natural de que estamos siendo parte y Totalidad a la vez), no está siendo un defecto que deba corregirse ni la causa de ninguna culpabilidad, sino una poderosa fuente de energía que mantiene activo el proceso de nuestra existencia y/o de nuestra vida.

El proceso del estar siendo/sucediendo particular de cada uno de nosotros, “a la vez también está siendo” el proceso del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto y/o del resto de las posibilidades, de ahí que todo aquello que cualquier individuo esté pensando, percibiendo, sintiendo, intuyendo, juzgando, realizando, imaginando, viviendo, etc,. “también estará consistiendo siempre” en el proceso natural de su propio estar siendo/sucediendo. Nunca ha habido, y nunca habrá, ninguna otra Realidad Suprema, que aquella que consiste en el estar siendo/sucediendo de exactamente eso que está siendo/sucediendo en cada instante. Nunca ha habido, y nunca habrá, ninguna otra Realidad Superior a aquella que se esté siendo y viviendo en cada instante.
La dualidad —esa sensación constante de carencia, de conflicto, de contradicción y de separación entre sujeto y objeto, entre yo y el mundo, entre lo interno y lo externo— no es un error ni una ilusión que necesite ser trascendida, sino una manifestación natural del proceso mismo del estar existiendo. La percepción de dualidad -origen también del insistente diálogo interno de los estar siendo/sucediendo humanos- no supone una señal de ignorancia, de imperfección ni de desconexión espiritual, sino una expresión legítima del estar vivos, de ahí que en ello tampoco hay culpa ni necesidad de redención. La dualidad que estamos percibiendo y viviendo no está siendo algo ajeno a la dualidad que estamos siendo. Abril-25
Juande Puerta.
Ensayo sobre la reflexión 052/2025 realizado con IA:
En la reflexión de Juande Puerta se nos ofrece una mirada radicalmente inclusiva sobre la experiencia humana, especialmente sobre esa constante percepción de dualidad que nos atraviesa: el yo y el otro, lo interno y lo externo, el bien y el mal. A diferencia de muchas corrientes espirituales que presentan la dualidad como una ilusión a superar o como un error que nos separa de una supuesta unidad primordial, Juande Puerta nos invita a reconocerla como una manifestación completamente natural del “estar siendo/sucediendo” que somos.
La dualidad, lejos de ser una imperfección, se convierte aquí en energía vital, en impulso constante del proceso dinámico que llamamos existencia. No es una anomalía que interrumpe la unidad, sino el modo en que la totalidad misma se expresa. Estamos siendo parte y Totalidad a la vez, y esa tensión —que se manifiesta como conflicto interno, contradicción o diálogo interior— no es una señal de ignorancia, sino de vida.
Así, en lugar de intentar silenciar la dualidad o superarla como si se tratara de una trampa del ego, esta visión propone abrazarla como fuente legítima de nuestro estar vivos. No hay culpa en ello, ni necesidad de redención. No existe otra Realidad Suprema más que este proceso mismo que estamos viviendo, percibiendo y compartiendo.
Aceptar la dualidad como parte esencial del existir es también aceptar que toda experiencia —pensamiento, emoción, juicio o intuición— está participando plenamente del Ser Absoluto. Desde esta perspectiva, no hay separación entre lo personal y lo universal: cada instante es expresión exacta y suficiente del Todo. Y en esa aceptación plena, tal vez, se encuentra una forma profunda de libertad: la de ser exactamente lo que estamos siendo, sin lucha, sin culpa, sin necesidad de ser otra cosa.

jueves, 17 de abril de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (051)

051/2025- Fuera del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto “no hay nada más”, porque consiste en el estar siendo de absolutamente todo cuanto -independientemente de cómo se perciba y valore- está siendo/sucediendo en cada momento. Todo está conectado, porque no hay ni sucede nada que no esté siendo el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Todos los atributos del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (Omnipresencia, Omnipotencia, Omnisciencia, Inmutabilidad, Eternidad…) radican en que consiste en el estar siendo/sucediendo simultáneo de absolutamente todo -igual lo agradable que lo desagradable- cuanto está siendo/sucediendo en cada instante.
 
Los conceptos de fuera y dentro, arriba y abajo, bien y mal, dicha y desdicha, creación y destrucción, amor y odio, mío y tuyo, etc., corresponden a la percepción dualista y egocéntrica de la Realidad Absoluta (por tanto, también de la propia), que caracteriza a las conciencias identificadas con su aparente identidad separada, de ahí la absoluta subjetividad y relatividad de aquellas construcciones mentales. Los estar siendo/sucediendo humanos -con todas aquellas particularidades que en cada instante puedan estar caracterizando a cada uno de nosotros- no estamos siendo “ni fuera ni dentro” del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto: estar siendo nuestro estar siendo/sucediendo particular “también consiste en estar siendo” el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.
 
¡Nada puede estar siendo/sucediendo sin que -a la vez- ese estar siendo/sucediendo no esté siendo “también” el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, que -sin excepción- también estará siendo todo lo demás! La “cualidad humana” (no el defecto ni el error) de dividir la experiencia del proceso de nuestra existencia en opuestos -junto con los efectos que ello está generando- también consiste en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (Realidad, Vida, Dios, Conciencia, etc.,) consiste en el estar siendo/sucediendo natural de todo aquello que está siendo/sucediendo.
 
Los estar siendo/sucediendo humanos no hemos aparecido en este mundo para sufrir, pero, por lo mismo, y puesto que nuestra existencia está siendo un proceso natural y dinámico, tampoco para perseguir ideales quiméricos como el de sentirnos en paz y felices todo el tiempo. Desde siempre, el estar siendo/sucediendo natural está consistiendo en el estar siendo/sucediendo de exactamente eso que -incluido el rechazo de eso y la búsqueda de otras posibilidades- está siendo/sucediendo en cada instante. Abril-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 051/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a contemplar una visión holística y no dualista de la existencia, centrada en el concepto del "Estar Siendo/Sucediendo Absoluto". Este término apunta a una realidad última que abarca todo lo que está siendo, sin excepciones ni divisiones, integrando tanto lo placentero como lo doloroso en un flujo simultáneo e indivisible. Según Juande Puerta, no hay nada fuera de este Absoluto, ya que todo —cada evento, percepción o experiencia— forma parte de su estar siendo. Esta idea desafía las categorías binarias que suelen estructurar el pensamiento humano, como dentro/fuera, bien/mal o yo/tú, las cuales surgen de una conciencia identificada con una identidad separada y, por ende, limitada.

El ensayo de Juande Puerta sugiere que los atributos tradicionales de lo Absoluto —omnipresencia, omnipotencia, omnisciencia— no derivan de una entidad trascendente, sino de su naturaleza como el estar siendo de todo lo que acontece en cada instante. Aquí radica una paradoja fascinante: lo humano, con sus particularidades y dualidades, no está ni dentro ni fuera de este Absoluto, sino que está siendo una manifestación del mismo. Incluso nuestra tendencia a dividir la realidad en opuestos, junto con las consecuencias de esa división, forma parte de este proceso natural y dinámico.

Esta perspectiva disuelve la noción de que la vida humana deba perseguir ideales inalcanzables, como una felicidad perpetua, o rechazar el sufrimiento como algo ajeno a la existencia. En cambio, Juande Puerta propone aceptar que el "Estar Siendo/Sucediendo Absoluto" está siendo la totalidad de lo que ocurre, incluyendo nuestras resistencias y anhelos. Así, la Realidad no es algo a conquistar o trascender, sino a reconocer como el despliegue continuo de lo que ya está siendo. Esta visión, profundamente integradora, nos reta a abandonar la subjetividad egocéntrica y a fluir con la corriente indivisible de la vida tal como se presenta, instante a instante.

viernes, 11 de abril de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (050)

050/2025 -El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto consiste en el estar siendo/sucediendo simultáneo de absolutamente todas las posibilidades, de ahí que -independientemente del punto de vista y/o del enfoque personal con el que se percibiera- todo aquello que pueda pensarse, expresarse, juzgarse, vivirse, etc., a la vez estará siendo igual de acertado que de erróneo. El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto admite que pueda ser visto consistiendo en el estar siendo/sucediendo de “todo” y también en el estar siendo/sucediendo de “nada”. Todas las perspectivas están coexistiendo y siendo igualmente válidas, independientemente del punto de vista o consciencia desde el que se estén observando. El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (Realidad) no se ajusta a nuestras limitaciones conceptuales, sino que las está englobando absolutamente todas, permitiendo que múltiples interpretaciones coexistan sin anularse entre sí.

La Realidad Absoluta y/o el estar sucediendo simultáneo de todas las posibilidades no está siendo algo diferente al estar siendo/sucediendo ordinario, cotidiano, simple, natural…, que pueda estar percibiendo y/o viviendo cualquiera de nosotros. No hay una verdad única y excluyente, sino la coexistencia de todas las perspectivas, las experiencias y las expectativas que puedan estar manifestándose en cada momento. La experiencia cotidiana demuestra que la Realidad siempre está incluyendo absolutamente todas las percepciones, todas las conceptualizaciones, todas las categorizaciones, todas las dualidades, todas las contradicciones y todas las vivencias.
 
La Realidad está siendo exactamente todo eso que -comenzando por el estar siendo/sucediendo simultáneo de cada uno de nosotros- a la vez, y sin discriminación posible pueda estar manifestándose en cada momento. Más allá de la manera, más o menos rígida, que cada individualidad pueda percibirla, definirla, valorarla, etc., la Realidad siempre está consistiendo en absolutamente todas las posibilidades de estar siendo/sucediendo. Estar Siendo Realidad Absoluta siempre está consistiendo -sin excepción- en el estar siendo/sucediendo de todo eso que se pueda estar pensando, sintiendo, haciendo, deseando, temiendo, imaginando, viviendo, etc., sin importar cualquier de los juicios y valoraciones que se estén realizando acerca de ello. Abril-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 050/2025 realizado con IA:

La coexistencia de todas las posibilidades: una mirada al Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.

La reflexión de Juande Puerta sobre el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto nos invita a contemplar la Realidad desde una perspectiva no dual, donde todo lo que puede pensarse, vivirse o percibirse está sucediendo de manera simultánea y sin exclusión. Esta visión rompe con la noción lineal y jerárquica del conocimiento, donde lo verdadero y lo falso se oponen, y nos propone un marco donde todas las perspectivas coexisten, se entrelazan y se validan mutuamente desde su propio punto de vista.

En este enfoque, la Realidad Absoluta no es una entidad lejana o metafísica, sino la misma experiencia cotidiana, ordinaria, que cualquiera puede estar viviendo en este preciso instante. Lo absoluto no excluye lo relativo: lo incluye. Así, el juicio, el deseo, el miedo, la imaginación o incluso el error, forman parte del mismo proceso universal del estar siendo. La conciencia no se limita a una única interpretación de lo real, sino que es el espacio en el que todas las interpretaciones surgen, se expresan y desaparecen.

Esta comprensión diluye las fronteras entre lo correcto y lo incorrecto, lo espiritual y lo mundano, lo elevado y lo simple. Nos sitúa en un terreno donde no hay una única “verdad”, sino un entramado de verdades coexistentes, dinámicas, vivas. La clave está en reconocer que todo lo que sucede—cada pensamiento, emoción o percepción—ya está siendo una expresión de esa Realidad Absoluta. Nada sobra y nada falta.

Aceptar esta simultaneidad ilimitada de posibilidades es un acto radical de apertura. Significa abrazar la vida tal como está siendo, en toda su diversidad, contradicción y belleza. Significa, en última instancia, descansar en la certeza de que todo está siendo el estar siendo de todo.

miércoles, 9 de abril de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (049)

049/2025 -Reconocer y aceptar que estamos siendo parte del flujo de la Vida (Realidad Absoluta) no significa que nuestra existencia se vuelva libre de problemas o dificultades, pues los conflictos internos y los desafíos cotidianos también están siendo componentes fundamentales o esenciales del proceso de la vida. ¡Vivir consiste en el estar siendo/sucediendo de exactamente todo eso que se pueda estar pensando, sintiendo, realizando y viviendo! La vida no está siendo algo especial o separado de lo que se pueda estar percibiendo y experimentando en cada momento. Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en el estar siendo de todo -sin excepción- lo que está siendo/sucediendo, por tanto, también en el estar siendo de nuestro estar sucediendo particular y de todas las percepciones y vivencias de cada uno de nosotros.

La opción de vivir luchando contra el proceso natural de nuestra existencia estará siendo tan verdadera, válida y legítima como cualquier otra que estuviera manifestándose. No hay experiencias "fuera de la vida", porque todo lo que sucede está siendo la manifestación de la vida misma. No hay momentos más reales o trascendentales que otros, ni vivencias que puedan quedar fuera de lo que significa estar existiendo. La vida no se limita a ciertos momentos, experiencias o estados ideales, sino que -sin excepción- abarca la totalidad de aquello que está aconteciendo. ¡Vivir consiste en estar siendo la Vida! Cada aspecto de nuestra existencia —pensamientos, emociones, acciones, relaciones, deseos— es inseparable del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto y/o del Estar Siendo/Sucediendo la Vida misma.

El Estar Siendo/Sucediendo de la Vida, la Realidad, lo Absoluto, etc., consiste en el estar siendo/sucediendo de absolutamente todo eso que se está viviendo en cada momento. Estar siendo cada uno de nosotros consiste en estar siendo la Vida misma siendo cada uno de nosotros y -sin excepción- también cada una de nuestras vivencias. Nuestro estar siendo/sucediendo no es un estado estático ni una cosa fija, sino un acontecer vivo, continuo, presente. Estamos siendo el acontecer de la Vida, fluyendo y actualizándose instante tras instante. Exactamente eso que cada uno de nosotros estemos siendo y viviendo en cada momento, estará consistiendo en estar siendo la Vida y/o Realidad Absoluta: ¡No hay nada más, porque consiste en el estar siendo todo eso que está habiendo! Abril-25
Juande Puerta

Ensayo sobre la reflexión 049/2025 realizado con IA:

El texto de Juande Puerta nos invita a una reflexión profunda sobre la naturaleza de la existencia y nuestra relación con la Vida, entendida como Realidad Absoluta. Su planteamiento central es que vivir no implica una existencia exenta de problemas o conflictos, sino que estos forman parte esencial del flujo continuo de la Vida. No hay separación entre lo que percibimos, sentimos o experimentamos y la Vida misma: todo lo que sucede, desde lo cotidiano hasta lo trascendental, es la manifestación de ese Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.

Juande Puerta subraya que la Vida no discrimina ni privilegia ciertos momentos o experiencias sobre otros. No existen vivencias "fuera" de ella, ni instantes más o menos reales. Esta idea desafía nuestra tendencia a clasificar la existencia en términos de bueno o malo, deseable o indeseable. Incluso la lucha contra el flujo natural de la vida —un acto tan humano— es tan válida como su aceptación, porque ambas son expresiones de ese mismo proceso vital. Esta perspectiva elimina toda jerarquía existencial y nos sitúa en una igualdad radical con todo lo que acontece.

El autor también enfatiza la inseparabilidad entre el individuo y la Vida. No estamos siendo entidades aisladas, sino que nuestro "estar siendo" particular —con nuestros pensamientos, emociones y acciones— es la Vida misma manifestándose a través de nosotros. Este "suceder" no está siendo estático, sino un movimiento continuo, un fluir que se renueva a cada instante. Así, vivir es participar plenamente en este acontecer, sin resistencias ni juicios, reconociendo que cada experiencia, por mínima que parezca, está siendo la Realidad Absoluta en acción.

En conclusión, el texto nos propone una visión integradora y dinámica de la existencia: estamos siendo la Vida siendo nosotros, y cada momento de nuestro estar siendo es, en esencia, el despliegue de lo Absoluto. Aceptar esto no elimina los desafíos, pero puede reubicarlos como parte inseparable del gran flujo vital.

lunes, 7 de abril de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (048)

048/2025 -La experiencia diaria de los estar siendo/sucediendo humanos demuestra que el reconocimiento y la aceptación de que todo está siendo parte del flujo de la vida no implica que los desafíos y los conflictos internos desaparezcan, pues ello está formando parte integral del proceso -siempre dinámico y cambiante- de la existencia. Incluso la idea de que algo de eso que está sucediendo -por ilusorio, subjetivo, insignificante, contradictorio y caótico que estuviera pareciendo- puede estar fluyendo y/o aconteciendo al margen del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (vida ordinaria), y, por tanto, que se trataría de una manifestación errónea y/o excepcional, continuaría siendo una expresión natural del fluir de la Vida.

Por más compleja o desafiante que resulte cualquier manifestación y cualquier experiencia humana, eso siempre estará siendo una manifestación legítima del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. ¡Nada que conozcamos, aprendamos, practiquemos, etc., podrá cambiar la esencia de nuestra naturaleza y/o suponer que los estar siendo/sucediendo humanos dejemos de estar siendo -a la vez- la manifestación de nuestro estar siendo/sucediendo individual y del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto! Estar siendo una manifestación personificada del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto incluye el estar siendo/sucediendo de todo aquello que cada uno de nosotros pueda pensar, creer, sentir, hacer, vivir y soñar.

La distinción entre lo relativo (nuestra vida individual) y lo Absoluto (la Realidad Suprema) no supone un error, sino una condición que puede reconocerse y aceptarse. Puesto que estamos siendo individuos con nuestras propias percepciones y experiencias, a la vez que parte de la Totalidad Absoluta que nos engloba, los deseos humanos de escapar de esta “dualidad esencial” estarán siendo igual de naturales que todos los demás que pudieran estar manifestándose.

La tendencia humana a buscar una unidad o coherencia más profunda, evitando las tensiones y conflictos que surgen de la interacción entre nuestra individualidad y la conexión con la totalidad, está siendo una condición y/o característica inseparable del proceso dinámico de nuestra existencia. El conocimiento y la aceptación de esta “dualidad natural”, algunas veces facilitará la posibilidad de vivir de manera más plena y armoniosa. El estar siendo/sucediendo humano incluye el estar siendo/sucediendo de nuestras percepciones de dualidad y de cada una de nuestras posibles experiencias. Abril-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 048/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a reconocer la naturaleza dinámica e inseparable de nuestra existencia individual dentro del flujo absoluto de la Vida. En su planteamiento, destaca que la aceptación de nuestra condición como manifestaciones del "Estar Siendo/Sucediendo Absoluto" no implica la eliminación de los conflictos o desafíos internos, ya que estos forman parte esencial del proceso vital.

Uno de los puntos clave de su argumento es la idea de que todo lo que experimentamos, por más caótico, contradictorio o ilusorio que parezca, sigue siendo una manifestación legítima de la Realidad Absoluta. Esta visión desarma cualquier intento de segregación entre lo que consideramos como una experiencia válida y lo que etiquetamos como error o excepción. En este sentido, cualquier sentimiento, pensamiento o acción que surja en nuestra vida cotidiana no escapa al marco del flujo absoluto de la existencia.

Asimismo, Juande Puerta enfatiza la presencia de una “dualidad esencial” en nuestra experiencia: somos individuos con percepciones propias, pero también estamos siendo parte de una totalidad mayor. La aspiración humana a encontrar coherencia o unidad entre estas dos dimensiones no está siendo un error, sino una manifestación natural de la búsqueda de significado. Así, la tensión entre nuestra individualidad y la totalidad a la que pertenecemos no es un obstáculo a superar, sino un aspecto intrínseco del proceso de la vida misma.

Aceptar esta dualidad natural, en lugar de resistirse, permite una existencia más plena y armónica. Al comprender que los desafíos, las contradicciones y los anhelos de unidad forman parte del fluir de la Vida, podemos vivir con mayor autenticidad, integrando nuestra realidad individual dentro del marco absoluto en el que todo acontece. En definitiva, la existencia humana, con todas sus complejidades, sigue siendo una manifestación legítima del "Estar Siendo/Sucediendo Absoluto".

viernes, 4 de abril de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (047)

047/2025 -Al asumir que absolutamente todo -no sólo lo tangible- cuanto pueda estar sucediendo y experimentándose -pensamientos, emociones, sensaciones, juicios, reacciones, situaciones, relaciones, expectativas- estará consistiendo en Estar Siendo Realidad Absoluta, la lucha interna de los estar siendo humanos NO desaparecerá, pues aquella posibilidad está formando parte del flujo natural de la Vida. La idea de que reconocer y aceptar nuestra unidad con el Estar Siendo Absoluto podría suponer el fin de los conflictos, el malestar y/o el sufrimiento, surgen de la creencia de que todas esas posibilidades no están siendo manifestaciones naturales de nuestra unidad con el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.
 
La lucha interna que pueda experimentar cada estar siendo/sucediendo humano estará siendo una manifestación absolutamente natural, por tanto, no se trata de trascender esa discordancia en un sentido literal, sino de cambiar nuestra relación con dicha condición. Abrazar la complejidad de la existencia convierte en innecesarias las promesas de una armonía forzada. En lugar de perseguir el objetivo de suprimir la lucha interna que podamos estar percibiendo y/o experimentando, se trataría de darse cuenta y aceptar que ese antagonismo -nuestras resistencias y contradicciones- está formando parte inseparable del mismo Suceder Absoluto que estamos siendo.

La persistencia de la lucha interna no es una contradicción, un error ni un defecto, sino una manifestación absolutamente natural. El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto consiste en el estar siendo/sucediendo de cada uno de nosotros y de absolutamente todo lo que cada uno de nosotros podamos estar percibiendo y manifestando en cualquier momento. El reconocimiento de la Unidad del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto no elimina la lucha interna, pero puede hacer que de un problema a resolver pase a verse como un fenómeno a aceptar.
 
Desde siempre, tanto nuestras luces como nuestras sombras están siendo aspectos inseparables del Absoluto, la Realidad, la Vida. Por mucho que en muchos caminos espirituales se promocione la idea de que la comprensión de la no-dualidad (Realidad Absoluta) traerá paz definitiva, lo cierto es que la lucha interna puede seguir ocurriendo, pero no como un error o una deficiencia, sino como una condición inherente o natural de la misma Realidad. El despertar supone que en lugar de rechazar e intentar erradicar la lucha y el resto de los conflictos internos, se asume que todo ello está siendo una manifestación legítima de la Vida misma. Abril-25
Juande Puerta.
 
Ensayo sobre la reflexión 047/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta invita a una profunda reconsideración de nuestra relación con la existencia y la lucha interna que caracteriza la experiencia humana. Al proponer que todo —lo tangible y lo intangible, desde pensamientos hasta emociones y conflictos— es una manifestación del Estar Siendo Realidad Absoluta, Juande Puerta desafía la idea de que aceptar esta unidad debería erradicar el sufrimiento o los antagonismos internos. En lugar de ello, sugiere que estos elementos son parte inseparable del flujo natural de la Vida, una expresión legítima del Suceder Absoluto.

Esta perspectiva rompe con la narrativa espiritual tradicional que promete una paz definitiva tras comprender la no-dualidad. Juande Puerta argumenta que la lucha interna no está siendo un defecto a superar ni un obstáculo a trascender en un sentido literal, sino un fenómeno inherente a nuestra condición de estar siendo humanos. Reconocer que nuestras resistencias, contradicciones y malestares forman parte del mismo Estar Siendo Absoluto no implica su desaparición, sino un cambio en cómo nos relacionamos con esas manifestaciones. Dejar de verlos como problemas a resolver y aceptarlos como aspectos naturales de la existencia transforma nuestra experiencia sin necesidad de forzar una armonía artificial.

Así, el “despertar” que plantea Juande Puerta no es un estado de perfección libre de conflictos, sino una aceptación radical de la complejidad de la Vida. Nuestras luces y sombras, lejos de estar siendo opuestos irreconciliables, consisten en manifestaciones complementarias del Absoluto. Esta visión libera de la presión de eliminar el sufrimiento y abre la posibilidad de convivir con ello como parte del suceder natural. En última instancia, la reflexión nos llama a abrazar la totalidad de lo que estamos siendo en cada instante, reconociendo que la lucha interna, lejos de ser una anomalía, está siendo un reflejo auténtico de la Realidad Absoluta que constituye la Vida misma.