jueves, 10 de julio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (089)

089/2025 -Entre las características que se le podrían atribuir al ego y/o al efecto de la identificación conciencial con un yo personalizado, también debería incluirse la creencia en la existencia de un alma individual que pudiera trascender y/o continuar existiendo más allá de la muerte y la desaparición del cuerpo. La identificación conciencial con una identidad individual, separada, con nombre, historia y características propias (ego), no tiene porqué -como sostienen tradiciones como el Advaita Vedanta, el budismo o ciertas corrientes del no-dualismo- estar siendo una ilusión que debe ser trascendida para poder experimentar la Verdad y/o la Realidad Última. El suceder de la experiencia de estar siendo un yo particular también está siendo una manifestación absolutamente natural del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. ¿De dónde puede surgir el apego a lo mio y a cualquier otra forma de existencia, sino del apego a la idea que se tenga acerca de sí mismo?
 
Estar siendo una ola no hace que “a la vez” no se esté siendo océano y agua. La idea de la existencia de un alma individual, que pudiera trascender a la muerte, no solo consiste en una manera más sutil o refinada de continuar sosteniendo la creencia en un yo separado y proyectado en el más allá; también suele utilizarse a modo de justificación y de instrumentalización del devenir de todo aquello que el ego no alcanza a comprender ni a aceptar. Aunque el fenómeno del ego y/o de la identificación conciencial con la existencia del yo personal esté siendo natural y necesaria para la supervivencia y el desarrollo de cada individualidad, ello no implica su inmortalidad. En la Vida no dejan de suceder cosas, precisamente porque la Vida y/o la Realidad Absoluta consiste en el estar siendo/sucediendo de absolutamente todo cuanto -incluidos cada uno de nosotros y de todas nuestras experiencias- está sucediendo en cada instante.

La auto-creencia de estar siendo un alma inmortal actúa como un recurso legítimo del ego ante la incertidumbre, el miedo o la falta de entendimiento sobre la realidad, el sufrimiento o el destino final. En vez de enfrentar directamente esas incógnitas o aceptar la finitud y la impermanencia, el ego utiliza esta creencia como una explicación que le permite mantener su sentido de identidad y control, así como para darle sentido a lo que le resulta incomprensible o doloroso. Paradójicamente, la resistencia al reconocimiento y la aceptación de que Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en -incluida la desaparición de los individuos y/o del alma individual- absolutamente todo cuanto está siendo/sucediendo en cada aquí y ahora, supone el refuerzo de las ideas que supuestamente se estuvieran deseando soltar, superar, trascender. Julio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 089/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta ofrece una profunda mirada no-dualista sobre el ego y la creencia en el alma individual. Desde esta perspectiva, el ego no es solo la identificación con un yo separado, sino también la raíz de la creencia en una entidad personal que trasciende la muerte: el alma. Esta idea, lejos de ser una simple búsqueda espiritual, se revela como una proyección más del ego, un intento de mantener su continuidad ante la amenaza de la finitud.

El Advaita Vedanta y otras corrientes no-dualistas coinciden en que la identidad individual, con su nombre, historia y deseos, es una ilusión, pero Juande Puerta matiza esta visión: no se trata de negar la experiencia del yo, sino de entenderla como una manifestación más del Estar Siendo Absoluto. Así, el yo no debe necesariamente ser eliminado, sino reconocido como parte del flujo natural de la Realidad. Estar siendo una ola no niega que también se está siendo agua y océano.

La creencia en un alma eterna, según Juande Puerta, no es sino un recurso del ego para resistirse a lo incomprensible. En lugar de aceptar la impermanencia y el misterio de la existencia, el ego proyecta una continuidad ilusoria, manteniendo así su control sobre lo que escapa a su comprensión. Esta estrategia, paradójicamente, refuerza el apego a aquello que se pretende trascender.

Aceptar que la Realidad Absoluta incluye también la desaparición del individuo es abrirse a la plenitud del presente, donde todo —incluido el yo— está siendo sin garantía de permanencia. Soltar la creencia en un alma inmortal no es negar la espiritualidad, sino liberarla del control del ego, permitiendo que la conciencia se reconozca como parte inseparable del fluir absoluto de la vida.

martes, 8 de julio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (088)

088/2025 -Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en estar siendo absolutamente todo -sin excepción- lo que está siendo, por tanto, también cada estar siendo humano y todo aquello que -sin excepción- cada estar siendo humano pueda estar pensando, sintiendo, realizando, soñando y experimentando. Exactamente el mismo Estar Siendo Absoluto está siendo siempre el estar siendo de absolutamente todo y el estar siendo de absolutamente nada. ¡Aceptarás que tu estar siendo/sucediendo particular también está siendo el estar siendo/sucediendo transitorio y simultáneo del resto de las posibilidades! Nuestra existencia no está siendo estática, sino igual de transitoria y cambiante que está siendo todo lo que ocurre en el mundo. Reconocer que nuestra identidad personal también está siendo una expresión del Estar Siendo Absoluto, facilitará la atenuación de los efectos de la creencia en la necesidad de trascender la identificación con el ego individual.
 
Nuestra existencia -junto con cada mínimo detalle y/o experiencia personal- no está siendo algo separado ni permanente, sino que está ocurriendo a la vez que el resto de las posibilidades. Amar incondicionalmente significa aceptar sin excepciones y/o sin inventarse condiciones, por tanto, sin juicios interesados ni luchas contra el ego. Nunca ha habido y nunca habrá separación entre el estar siendo del yo egocéntrico y el estar siendo del yo universal o espiritual. Igual que no es necesario caminar hacia atrás, pudiendo caminar hacia adelante, tampoco es necesario disolver la identificación con el ego, pudiendo aceptar que el ego también está siendo Realidad Absoluta. ¡Esto que estamos percibiendo como el estar siendo de nuestro yo individual (este cuerpo, esta mente, está historia, esta incertidumbre…) también está siendo una expresión del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto!

Ante cuestiones como las siguientes: ¿Dónde termina la aceptación y dónde comienza la indiferencia? ¿Cómo actuar con responsabilidad si toda manifestación —incluso la violencia o la injusticia— se considera expresión válida del Absoluto?, mi opinión es que el planteamiento de dichas interrogantes parte de supuestos absolutamente rígidos y/o de percepciones alejadas de comprensión de la Realidad. Nada está siendo únicamente eso que cada individuo está percibiendo e interpretando; todo está siendo, a la vez, el mismo estar siendo que el resto de las posibilidades y que el de todas las maneras que cada posibilidad pueda verse. Julio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 088/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta nos invita a contemplar la existencia desde una perspectiva no dual, donde el Estar Siendo Absoluto abarca todo lo que es, sin excepción, incluyendo cada experiencia humana, pensamiento, emoción y manifestación. Esta visión desafía la percepción de separación entre el yo individual y el universo, proponiendo que todo, desde el ego hasta las experiencias más mundanas, es una expresión del mismo Estar Siendo. En esta comprensión, no hay distinción entre lo personal y lo universal, lo transitorio y lo eterno, lo que disuelve la necesidad de trascender el ego, ya que este también es parte de la Realidad Absoluta.

Juande Puerta plantea que aceptar esta unidad implica un amor incondicional que no juzga ni lucha contra el ego, sino que lo reconoce como una manifestación válida del todo. Esta aceptación no equivale a indiferencia, sino a una comprensión profunda de que cada experiencia, incluso las aparentemente negativas como la violencia o la injusticia, forma parte del flujo dinámico del Estar Siendo. Sin embargo, surge la pregunta: ¿cómo actuar con responsabilidad en un marco donde todo es expresión del Absoluto? La respuesta radica en comprender que la acción responsable no implica negar las manifestaciones, sino interactuar con ellas desde una consciencia que reconoce su naturaleza transitoria y relativa, sin aferrarse a juicios rígidos.

La reflexión de Juande Puerta desafía las dicotomías tradicionales entre aceptación e indiferencia, acción y pasividad. Al reconocer que nuestra identidad personal es una expresión del Estar Siendo Absoluto, podemos vivir con mayor ligereza, sin la carga de la separación o la lucha contra el ego. Este enfoque nos invita a fluir con la realidad, actuando desde la compasión y la claridad, sin imponer condiciones a lo que es. En última instancia, amar incondicionalmente es abrazar la totalidad de la existencia, donde cada instante es sagrado y completo en sí mismo.

domingo, 6 de julio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (087)

087/2025 -El reconocimiento y la aceptación de que absolutamente todo cuanto está sucediendo consiste en Estar Siendo Realidad Absoluta no excluye ninguna posibilidad, por tanto, tampoco ninguna de las posibles demandas éticas del mundo cotidiano. Sin embargo, algún día tendrá que reconocerse la trampa que supone la afiliación a la idea de que existen fórmulas mágicas que podrían servir para convertir la experiencia humana en aquello que las mentes pudieran pretender. Desde mi punto de vista, no es tanto que para transformar algo “sea suficiente” con aceptarlo todo, sino que el primer e imprescindible paso para luego poder actuar en post de cambiar algo, consiste en la aceptación de eso y también de todo lo demás que esté sucediendo (Realidad Absoluta). ¿Desde cuándo la resistencia al reconocimiento y la aceptación de algo que está siendo percibido y vivido, ha servido para cambiar la experiencia de eso que se está negando?

El miedo humano a la posibilidad de caer en la indiferencia, la pasividad, la resignación, la irresponsabilidad ética, etc., nunca podría nacer de la aceptación de que nada puede suceder que no consista en Estar Siendo Realidad Absoluta. Todas aquellas capacidades (igual las de un signo, como las del signo contrario) propias de cada estar siendo/sucediendo individual, además de cualidades personales también estarán siendo expresiones directas de nuestra dimensión universal, de ahí que nunca estará en nuestra mano poder transformarlo todo. El reconocimiento y la aceptación de que todo Está Siendo Realidad Absoluta no cambiará -ni para bien ni para mal- las condiciones y las cualidades propias de nuestra naturaleza; sin embargo, la comprensión o conciencia de que estamos siendo la misma vida que estamos viviendo, facilitará una percepción y una experiencia más armónica y equilibrada.

La aceptación del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto no transforma las capacidades propias de nuestra naturaleza (pensar, sentir, juzgar, elegir, preferir, actuar, desear…) por tanto, tampoco debería temerse que pueda anular la facultad de asumir compromisos y responsabilidades. Las vivencias humanas están siendo reflejos de un Todo Absoluto que incluye a los opuestos y al resto de las posibilidades, de ahí la relatividad y la impermanencia de nuestras consideraciones éticas. ¡La ética y los juicios morales siempre estarán siendo relativos y cambiantes! El reconocimiento de que todo “está sucediendo” dentro de una totalidad impersonal, ayudará a sentir calma y confianza, pero no eliminará nuestras particularidades humanas, es decir, nuestra psicología, nuestro cuerpo y nuestras relaciones. Julio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 087/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta invita a una comprensión profunda de la existencia al proponer que todo cuanto acontece es una manifestación de la Realidad Absoluta. Este reconocimiento no implica pasividad ni indiferencia, sino que constituye el primer paso para cualquier transformación significativa. Aceptar la realidad no significa resignarse, sino situarse en una posición de claridad desde la cual es posible actuar con mayor armonía.

La resistencia a aceptar lo que es —lo que está siendo— suele surgir del miedo a perder el control o a caer en la indiferencia ética. Sin embargo, Juande Puerta argumenta que este temor es infundado, ya que la aceptación de la Realidad Absoluta no anula las capacidades humanas de pensar, sentir, decidir, actuar o relacionarse. Al contrario, al comprender que somos parte de una totalidad que incluye todos los opuestos, se abre la posibilidad de una percepción más equilibrada, libre de la lucha interna que genera la negación de lo que sucede.

La ética, según esta perspectiva, no queda anulada, pero se reconoce como relativa y cambiante, reflejo de la impermanencia inherente a la experiencia humana. La aceptación de que todo está siendo Realidad Absoluta no elimina las responsabilidades ni los compromisos, sino que los contextualiza dentro de una visión más amplia, donde nuestras acciones y juicios son expresiones de una naturaleza universal y particular a la vez.

Así, la calma y confianza que emergen de esta comprensión no suprimen nuestras particularidades psicológicas, corporales o relacionales, sino que las integran en un marco de mayor coherencia. Aceptar la Realidad Absoluta no transforma la esencia de lo humano, pero sí facilita una vida más consciente, donde la acción ética surge desde la claridad y no desde la resistencia.

jueves, 3 de julio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (086)

086/2025 -Nuestra capacidad de reaccionar, nuestra sensibilidad, nuestra ética, etc., ante el sufrimiento, el dolor, las injusticias, etc., no sólo está siendo propia de cada individuo, también está consistiendo en una manifestación directa del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Reconocer y aceptar que nuestro estar siendo/sucediendo personal está consistiendo en una manifestación particular, transitoria y efímera del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, supone “reconocimiento y aceptación”, pero eso no significa que el reconocimiento y la aceptación de la Realidad vaya a cambiar las condiciones y las cualidades que son propias de nuestra naturaleza. Por lo mismo, la resistencia, la negación y la lucha contra algunas manifestaciones del estar siendo/sucediendo personal y universal tampoco transforma la Realidad, sino que -como expresa la imagen del pez que se muerde la cola- absolutamente todas las acciones y las reacciones posibles -incluidos los miedos a nuestra desaparición- estarán confirmándola.
 
La aceptación facilita la posibilidad de actuar sin negar, de transformar sin rechazar, de implicarse sin identificarse. La ética basada en el reconocimiento del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto no elimina la responsabilidad, sino que la enmarca en una conciencia más amplia, donde el actuar no se contradice con el flujo del estar sucediendo. Nada cambiará que, simultáneamente y sin excepción, cada una de nuestras vivencias individuales, junto con el resto de los aconteceres universales, estén siendo manifestaciones del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Realidad Absoluta está siendo todo eso que se esté percibiendo, pensando, experimentando, conociendo, proyectando, etc., pero, -incluidos los opuestos- a la vez también el resto de las posibilidades. ¿Qué Verdad y/o qué Realidad podría ser aquella que no incluyera el estar siendo simultáneo de absolutamente todas las manifestaciones que estén sucediendo y/o que fueran posibles?

La conciencia identificada con el yo individual necesita la guía de los conceptos que crea; sin embargo, puesto que la Realidad está abarcando “simultáneamente” todas las dimensiones posibles, debería comprenderse que la definición de cualquier concepto estaría incompleta cuando su significado no incluyera el resto de las posibilidades. La experiencia humana requiere distinguir entre recuerdos y proyecciones para tomar decisiones y actuar consecuentemente, pero tampoco debería obviarse que -comenzando por nuestra individualidad- nada está siendo “solo eso” que se está percibiendo y “solo de la manera” que se está percibiendo. Las vivencias del minuto a minuto demuestran que no existen directrices universales e inamovibles para navegar en línea recta por la experiencia humana. Julio-25
Juande Puerta

Ensayo sobre la reflexión 086/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta invita a una profunda contemplación sobre la relación entre nuestra individualidad y el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, una realidad que trasciende y engloba todas las manifestaciones posibles. Según Juande Puerta, nuestra sensibilidad, ética y reacciones ante el sufrimiento o las injusticias no son solo expresiones individuales, sino manifestaciones particulares y efímeras de una Realidad Absoluta que abarca todo lo que es, ha sido o podría ser. Esta perspectiva desafía la noción de un yo aislado, proponiendo que cada acción, pensamiento o emoción es un reflejo transitorio de un flujo universal.

Reconocer esta conexión no implica pasividad ni resignación. Aceptar que nuestro estar siendo es parte de un todo mayor no elimina la responsabilidad ética ni transforma las cualidades intrínsecas de nuestra naturaleza humana. Al contrario, la aceptación permite actuar sin negar la realidad, transformar sin rechazar lo que es, e implicarse sin aferrarse a una identidad rígida. Esta postura reconcilia la acción ética con el reconocimiento de un orden más amplio, donde la lucha, la resistencia o el miedo a la desaparición son también manifestaciones del mismo Estar Siendo Absoluto.

Juande Puerta subraya que la Realidad Absoluta incluye todas las posibilidades a la vez, incluso los opuestos, lo que desafía la tendencia humana a definirse mediante conceptos limitados. Nuestra conciencia, a menudo atrapada en la identificación con el yo, necesita categorías para navegar la experiencia, pero estas son incompletas si no abarcan la simultaneidad de todas las dimensiones. Así, la vida humana, con sus decisiones y contradicciones, no sigue directrices universales fijas, sino que se desenvuelve en un flujo dinámico donde nada es únicamente lo que parece. Esta comprensión invita a una ética consciente, flexible y profundamente conectada con la totalidad de la existencia.

martes, 1 de julio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (085)

085/2025 -El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (Realidad, Vida, etc.,) consiste en “todo” el estar siendo/sucediendo presente y/o de cada aquí y ahora; sin embargo, ello no supone que tenga que haber separación entre el estar siendo/sucediendo pasado y el futuro. Aunque todo está sucediendo ahora, eso no significa que el antes y el después estén fuera y/o siendo algo distinto al Estar Siendo/Sucediendo Presente. ¡Tanto el pasado como el futuro están implícitamente presentes en el ahora! La experiencia individual (estar siendo una persona con vivencias únicas) no está separada del acontecer universal. Antonio Machado: “Hoy es siempre todavía, toda la vida es ahora” El pasado y el futuro también están presentes ahora, por tanto, por mucho que se pueda creer que son ilusiones mentales, también están siendo presente. Lo Absoluto no está fragmentado por el tiempo; todo lo que ya se ha vivido, y todo lo que todavía pueda quedar por vivirse, está incluido en el estar siendo vivido de ahora.
 
Aceptar que todo sin excepción -incluidos cada uno de nosotros y de nuestras manifestaciones- consiste en Estar Siendo Realidad Absoluta no cambiaría que todo sin excepción -incluidos nuestros miedos y nuestras expectativas- continuase consistiendo en Estar Siendo Realidad Absoluta. Aceptar que Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en el estar siendo/sucediendo efímero y transitorio de absolutamente todas las posibilidades a la vez, permite comprender que estar siendo nosotros, estar siendo lo nuestro y estar siendo lo demás consiste en el mismo Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. El Estar Siendo Absoluto consiste en el estar siendo de todas las posibilidades a la vez, por tanto, abarca todo lo sucedido, todo lo que está sucediendo y todo lo que puede llegar a suceder, de ahí que también incluye nuestra capacidad de respuesta y de transformación.

La experiencia cotidiana demuestra que la mente y/o la conciencia de estar siendo una individualidad con identidad y percepciones propias (ego) está siendo un reflejo de la conciencia que está sustentando y facultando a la primera. La aceptación y el reconocimiento de que todo -incluidos cada uno de nosotros- cuanto está siendo y/o sucediendo -sin excepción- consiste en el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto (Realidad Última) puede ser malinterpretado, estructurado y considerado un riesgo de caer en la indiferencia, la resignación y la pasividad; sin embargo, ¿acaso nuestra reactividad, nuestra sensibilidad, nuestra ética, etc., ante el sufrimiento, el dolor, las injusticias, la opresión, etc., no está consistiendo también en una manifestación del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto? Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 085/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta sobre el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto invita a contemplar la Realidad como un continuo presente que abarca todo lo que está siendo, ha sido y será. Este planteamiento trasciende la percepción lineal del tiempo, proponiendo que pasado y futuro no son entidades separadas, sino que están implícitamente contenidos en el ahora. Como señala Antonio Machado, “Hoy es siempre todavía, toda la vida es ahora”. Esta idea desafía la fragmentación temporal que suele dominar nuestra experiencia cotidiana, sugiriendo que todo —nuestras vivencias, emociones y expectativas— forma parte de un único Estar Siendo Absoluto.

La experiencia individual, con su aparente separación y unicidad, no está desvinculada del acontecer universal. Somos manifestaciones efímeras de una Realidad que incluye todas las posibilidades simultáneamente. Aceptar esto no implica negar la validez de nuestras percepciones o del ego, sino reconocer que estas son reflejos de una conciencia más amplia que sustenta todo. Nuestra identidad, nuestros miedos y esperanzas, son expresiones transitorias del mismo Estar Siendo.

Sin embargo, esta comprensión podría malinterpretarse como una invitación a la pasividad o la indiferencia. Por el contrario, Juande Puerta subraya que nuestra sensibilidad, ética y capacidad de respuesta ante el sufrimiento o las injusticias también son manifestaciones naturales del Estar Siendo Absoluto. Lejos de fomentar la resignación, esta perspectiva nos empodera para actuar, transformar y responder desde la consciencia de nuestra interconexión con la totalidad.

En última instancia, el Estar Siendo Absoluto no solo unifica el tiempo, sino que nos invita a vivir plenamente el presente, reconociendo que cada acto, pensamiento y experiencia es una expresión de la Realidad Última. Esta visión nos llama a abrazar la vida en su totalidad, con responsabilidad y apertura, como parte inseparable del ahora eterno.

sábado, 28 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (084)

084/2025 -Nuestras reacciones y nuestros actos estarán siendo posteriores a la percepción y la aceptación de que está sucediendo aquello que estará motivándolos, por tanto, ¿qué motivaría el miedo a caer en la pasividad y la indiferencia ante el sufrimiento, la violencia, las injusticias, etc., que se estuvieran observando y experimentando? El re-conocimiento y la aceptación de que Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en el estar siendo/sucediendo simultáneo de absolutamente todas y cada una de las posibilidades, nunca podría suponer la difuminación de nuestro estar siendo/sucediendo individual; en lugar de eso, re-conocernos y/o re-conocer que -a la vez- estamos siendo individualidad y universalidad, seguramente facilitaría la posibilidad de reducir la intensidad del miedo a la transitoriedad de nuestro yo personalizado.

Darse cuenta, aceptar y re-conocer “conscientemente” que nuestra individualidad está siendo una efímera manifestación del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, no transformaría nuestra naturaleza ni haría que desaparecieran las condiciones que determinan nuestras vivencias particulares. La conciencia de estar siendo un yo individual (ego) origina el temor a la posibilidad de dejar de existir; sin embargo, la comprensión de que estar siendo ese personaje también consiste en Estar Siendo Realidad Absoluta, puede hacer que nuestros miedos y el resto de características se perciban y se vivan como expresiones absolutamente naturales. El Estar Siendo/Sucediendo Absoluto no consiste en estar siendo algo determinado y supremo, sino un campo infinito de posibilidades coexistiendo y manifestándose simultáneamente.

Nuestra individualidad está siendo el suceder de una manifestación transitoria, pero -a la vez- también está siendo parte del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto. Re-conocer la esencia de nuestra naturaleza no borrará nuestra individualidad, sino que puede ayudarnos a vivirla con menos miedo, menos apego y con más confianza y plenitud. Asumir que el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto incluye el estar siendo/sucediendo transitorio de cada uno de nosotros y de nuestras experiencias no implica la justificación de la injusticia ni la renuncia a la responsabilidad de actuar para conseguir mejores condiciones de vida. Aceptar el sufrimiento, el dolor y las decepciones como parte del suceder y/o el discurrir de la existencia no nos impide actuar para aliviar esas experiencias, más bien nos impulsa a actuar más libres de resistencias o juicios paralizantes. Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 084/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta invita a explorar la aparente paradoja entre nuestra existencia individual y nuestra conexión con el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, un campo infinito donde todas las posibilidades coexisten. Este reconocimiento no diluye nuestra individualidad, sino que la enriquece al liberarnos del miedo a la transitoriedad del "yo". Al comprender que nuestro ego, con sus temores y deseos, es una manifestación efímera pero intrínseca de la Realidad Absoluta, podemos vivir con menos apego y mayor plenitud.

El miedo a la pasividad ante el sufrimiento o la injusticia surge de la identificación exclusiva con el yo individual, que teme su disolución o irrelevancia. Sin embargo, aceptar que somos simultáneamente individualidad y universalidad disminuirá esa resistencia. Esta conciencia no nos condena a la indiferencia; al contrario, nos impulsa a actuar con mayor libertad, sin el peso de juicios paralizantes. El Estar Siendo Absoluto no justifica la inacción frente a la violencia o el dolor, sino que nos permite responder a estas experiencias como partes naturales del suceder, sin aferrarnos al sufrimiento ni negarlo.

Reconocer nuestra naturaleza dual no elimina las condiciones particulares de nuestra vida, sino que transforma nuestra relación con ellas. El dolor, la injusticia o el miedo no desaparecen, pero se perciben como expresiones transitorias de un todo mayor. Esta perspectiva nos dota de una confianza que no depende de la permanencia del yo, permitiéndonos actuar con responsabilidad para mejorar las condiciones de vida, no desde la culpa o el temor, sino desde una aceptación profunda que abraza tanto lo efímero como lo eterno.

En última instancia, vivir desde esta comprensión nos invita a una danza consciente entre lo individual y lo absoluto, donde cada acto, por pequeño que sea, refleja la plenitud de ser.

jueves, 26 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (083)

083/2025 -¿Puede negarse lo que está sucediendo sin estar negando el estar sucediendo propio? Sí, aunque, evidentemente, sólo se trataría de una negación verbal. Y lo mismo podría decirse con respecto a los comentarios de que el reconocimiento y la aceptación de que nada puede estar siendo/sucediendo fuera del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, pudiese derivar en una actitud de indiferencia ética o en una justificación implícita de todo cuanto está ocurriendo. ¿En qué tipo de mentalidades, reconocer y aceptar que efectivamente está sucediendo lo que está sucediendo, tendría que servir de excusa para no actuar y/o para validar lo inaceptable? ¿Desde cuándo y porqué motivo, la aceptación del estar siendo/sucediendo (Realidad Absoluta) debería suponer la anulación del valor de la transformación personal y social, así como el peligro de eliminar de nuestra naturaleza esencial las cualidades de responsabilización y de autocrítica?
 
La aceptación de la Realidad y/o del simultáneo estar siendo/sucediendo personal y universal nunca podría excluir nuestro impulso natural de mejorar ni el de la resistencia ante lo que se percibe como injusto, insano, doloroso o destructivo. Paradójicamente, la negación verbal y la resistencia psicológica ante lo que está sucediendo todavía refuerza más la creencia de la fragmentación y la separación entre nuestra naturaleza humana y nuestra naturaleza universal. ¡Estar siendo el suceder del individuo que estamos siendo, incluye que, a la vez, también estamos siendo el suceder de absolutamente todo -sin excepción- lo que estemos viviendo! Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en el estar siendo/sucediendo instantáneo, transitorio, simultáneo e indivisible de cada posibilidad y de todas las posibilidades al mismo tiempo.
 
Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en el estar siendo/sucediendo instantáneo, transitorio, simultáneo e indivisible de todo -sin excepción- lo que está sucediendo y de la manera exacta que todo -sin excepción- está sucediendo. Estar siendo el suceder de una persona concreta con percepciones, reacciones, experiencias y aspiraciones únicas a la vez también consiste en estar siendo el Suceder Universal o Absoluto. Sin embargo, ¿acaso la aceptación del hecho de que el suceder del sufrimiento sea una respuesta igual de natural que su opuesta, y/o que cualquier otra, significa que debamos permanecer impasibles ante el conocimiento de su posible causa? Junio-2025
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 083/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta plantea una paradoja aparente entre aceptar la Realidad Absoluta —el estar siendo/sucediendo de todo lo que acontece— y la responsabilidad ética de actuar frente a lo injusto o doloroso. Negar verbalmente lo que sucede no implica negar el estar siendo, pues tal negación es solo una construcción mental que no altera la realidad. Sin embargo, surge la pregunta: ¿puede la aceptación de que todo sucede dentro del Estar Siendo Absoluto derivar en indiferencia ética o en la justificación de lo inaceptable? Juande Puerta argumenta que no, y esta postura invita a una profunda reflexión.

Reconocer que todo —lo placentero y lo doloroso— forma parte del Suceder Absoluto no equivale a validar lo injusto ni a renunciar a la transformación personal o social. Al contrario, esta aceptación puede fortalecer nuestra capacidad de responsabilizarnos y autoproclamarnos agentes de cambio. La resistencia psicológica o la negación de lo que sucede refuerza la ilusión de separación entre nuestra naturaleza humana y la universal, fragmentando nuestra percepción de la realidad. En cambio, aceptar que somos a la vez el suceder individual y el universal nos conecta con la totalidad, sin anular nuestro impulso natural de mejorar o resistir ante el sufrimiento.

La clave radica en comprender que aceptar la Realidad Absoluta no implica pasividad. El sufrimiento, como cualquier otra experiencia, es parte del suceder instantáneo e indivisible, pero esto no nos exime de actuar para aliviarlo. La aceptación no es conformismo, sino un reconocimiento lúcido que nos permite responder con claridad y propósito, integrando nuestra naturaleza ética con la universal. Así, el estar siendo no solo abarca todo lo que sucede, sino también nuestra capacidad de transformarlo.

lunes, 23 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (082)

082/2025 -La Realidad Absoluta no excluye nada, ni siquiera la resistencia a aceptarla. Las posibilidades de no darse cuenta y de no aceptar que Realidad Absoluta está siendo absolutamente todo cuanto está sucediendo, también están siendo Realidad Absoluta.

Puesto que está sucediendo, la reacción del miedo a reconocer que la aceptación del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto no tiene porqué suponer justificación, pasividad ni indiferencia, estará siendo tan natural y aceptable como cualquier otra respuesta posible. Las consideraciones éticas, morales, religiosas, políticas, culturales, etc., referentes a “lo que debería o no debería suceder” nunca cambiarán la Realidad, porque la Realidad consiste en estar siendo exactamente todo eso que está sucediendo.
 
Lo que debería suceder, igual que lo que no debería suceder, no puede no estar siendo lo que está sucediendo (Realidad Absoluta); la opinión de lo que debería suceder, igual que la opinión de lo que no debería suceder, corresponden a consideraciones individualizadas a partir de la percepción y del juicio egocéntrico de la Realidad y/o de lo que está sucediendo. Aceptar lo que sucede no significa que no se tenga que hacer nada que ayude a evitar que vuelva a suceder algo que se perciba doloroso, violento, discriminatorio, injusto. ¿Cómo podría transformarse algo que se percibe negativo y perturbador, sin el reconocimiento y la aceptación previa de que eso está sucediendo?
 
No hay separación entre nuestro estar sucediendo personal, el estar sucediendo de nuestras manifestaciones y el resto del estar sucediendo universal. Lo personal y lo impersonal están siendo uno, pero no porque solo uno están siendo, sino porque lo personal y lo impersonal están siendo a la vez. El suceder del hecho de que la inmensa mayoría de los estar siendo/sucediendo humanos vivamos inmersos en la creencia y/o en la conciencia de la fragmentación del yo, del mundo y de los conflictos cotidianos, está siendo algo tan natural como el consiguiente suceder del deseo de perfeccionamiento y de unificación. Puesto que el estar siendo de todas y de cada una de las particularidades está sucediendo a la vez, la Unidad Universal e Indiferenciada (Realidad Absoluta) incluye -sin excepción- la singularidad de absolutamente todas las percepciones, de todas las reacciones, de todas las experiencias y de todas las transformaciones posibles.

No se trata de disolver la visión de que cada uno de nosotros estamos siendo una persona concreta con una vida única, sino de darse cuenta, reconocer y aceptar que estar siendo eso no está sucediendo al margen del resto del Estar Sucediendo Universal, Natural y/o Absoluto. El reconocimiento y la aceptación de todo cuanto está sucediendo no pude dejar fuera el reconocimiento y la aceptación -absolutamente naturales- de cada una de nuestras posibles reacciones y tampoco de ninguna de nuestras posibles aspiraciones. Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 082/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta sobre la Realidad Absoluta invita a una comprensión profunda de la existencia, donde todo lo que sucede, sin excepción, forma parte de una totalidad indivisible. La Realidad Absoluta no discrimina: incluye tanto la aceptación como la resistencia a reconocerla. Esta idea desafía la percepción fragmentada del yo y el mundo, proponiendo que incluso el miedo, la negación o los juicios éticos y morales son manifestaciones naturales de esa realidad.

Aceptar la Realidad Absoluta no implica pasividad ni indiferencia ante el sufrimiento o la injusticia. Al contrario, el reconocimiento de lo que sucede es el primer paso para transformarlo. Sin aceptar que algo doloroso está ocurriendo, ¿cómo podríamos actuar para mitigarlo? Esta aceptación no justifica lo negativo, sino que lo integra como parte del acontecer universal, permitiendo una respuesta consciente y activa.

Juande Puerta subraya que lo personal y lo impersonal coexisten en la Realidad Absoluta. Nuestra singularidad como individuos, con nuestras percepciones, reacciones y aspiraciones, no está separada del Estar Sucediendo Universal o Absoluto. La creencia en la fragmentación, tan arraigada en la experiencia humana, es tan natural como el anhelo de unificación y perfeccionamiento. Esta paradoja es clave: la Unidad Universal abarca todas las particularidades sin anularlas.

Reconocer que nada puede estar sucediendo sin estar siendo Realidad Absoluta, no disuelve nuestra identidad personal, sino que la sitúa en un contexto más amplio, donde cada experiencia, reacción o deseo está siendo una expresión del Estar Sucediendo Universal. Esta perspectiva nos libera de la lucha contra lo que es, permitiéndonos actuar desde la claridad y la compasión. En última instancia, el reconocimiento de que todo está siendo Realidad Absoluta nos invita a vivir plenamente, abrazando tanto nuestra unicidad como nuestra conexión con el todo

sábado, 21 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (081)

081/2025 -Realidad Absoluta estaba siendo todo lo que sucedió, está siendo todo lo que está sucediendo y estará siendo todo lo que pueda llegar a suceder. Las apariencias también están siendo parte de lo que está siendo, de ahí la inutilidad de negarlas, descartarlas y/o despreciarlas. Eso que muchas tradiciones buscan alcanzar a través de largos caminos, únicamente consiste en el reconocimiento y la aceptación de que “ya estamos siendo” eso que consiste en el estar sucediendo universal. Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en estar siendo exactamente eso que “ya” estamos siendo y viviendo cada uno de nosotros en cada aquí y ahora. Discernir entre lo que estarían siendo acciones constructivas y acciones destructivas, así como opinar sobre el miedo a caer en la justificación de comportamientos perjudiciales, no evitará que Realidad Absoluta continúe siendo “todo” eso que -agrade o no- esté sucediendo.
 
A la vez e inseparablemente, la existencia de cada estar siendo/sucediendo humano también está siendo el incesante, inmediato e incontrolable fluir del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, de ahí que -como a cada instante queda de manifiesto- los intentos humanos de dotarnos de estructuras éticas, morales, políticas, tradicionales, etc., que sirvan para construir un mundo unido y uniforme, están basándose en una percepción absolutamente parcial e incompleta de la Realidad. ¿Entonces qué? -me preguntan, mientras pienso que cualquier respuesta supondría un regreso al punto de partida de la creencia original. ¿Qué prácticas más concretas y/o específicas podrían ayudar a darse cuenta y aceptar que la Única Realidad consiste en el estar siendo/sucediendo de todo cuanto se está viviendo en cada instante, que cada una de nuestras posibles vivencias cotidianas?
 
Puesto que Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en el estar siendo/sucediendo de absolutamente “todo” cuanto está sucediendo (apareciendo y desapareciendo) en cada momento, ¿qué visión verdaderamente transformadora sería aquella que se estuviera buscando fuera del estar siendo/sucediendo presente y/o en un estar siendo/sucediendo egocéntrico, personalizado, idealizado, dogmatizado, mistificado, instrumentalizado? Los deseos de transformación, que no emerjan desde el reconocimiento de que no hay otra Realidad que la del estar sucediendo presente, nacerán caducados y viciados. Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 081/2025 realizado con IA:

En esta reflexión, Juande Puerta nos invita a contemplar la Realidad Absoluta no como una meta futura, ni como una entidad separada a la que debamos aspirar, sino como el mismo estar siendo de todo cuanto sucede, sin excepción. Su planteamiento se sitúa más allá de las dicotomías comunes —bien/mal, verdadero/falso, espiritual/profano— y propone que todo lo que acontece, incluido lo aparentemente ilusorio o superficial, forma parte inseparable de esa Realidad que ya está siendo.

Este enfoque remueve la base de muchas tradiciones que construyen largos caminos hacia la iluminación o la redención. Juande Puerta sugiere que la iluminación no es un logro, sino un reconocimiento: ya estamos siendo eso que buscamos. La clave está en aceptar que el estar siendo de cada vivencia, por más mundana o conflictiva que parezca, es la manifestación inmediata de lo Absoluto. Desde esta comprensión, toda negación de lo que ocurre sería una resistencia inútil ante lo que ya está ocurriendo por sí solo.

Sin embargo, el texto no cae en el nihilismo o la indiferencia. Señala que discernir entre acciones constructivas o destructivas es una facultad humana válida, aunque siempre parcial frente al fluir inabarcable del Estar Siendo Absoluto. La advertencia principal está en no absolutizar nuestros juicios ni estructuras morales como si pudieran abarcar toda la Realidad.

Así, la práctica concreta que emerge de esta visión no es otra que una rendición lúcida: observar sin pretensiones, participar sin aferrarse, discernir sin absolutizar. Cualquier intento de transformación verdadera ha de brotar del reconocimiento de que ya estamos siendo lo que buscamos, y que no hay otro lugar desde el cual empezar que el ahora mismo. No hay más Realidad que esta, la que se está siendo justo ahora.

jueves, 19 de junio de 2025

REFLEXIONANDO - 2025 (080)

080/2025 -Lo que parece estar sucediendo, también está sucediendo. Por mucho que nuestras percepciones y vivencias puedan catalogarse como apariencias, sueños, imaginaciones, proyecciones, etc., todo eso también está siendo y sucediendo. Aceptar, sin reservas ni condiciones, todo lo que está siendo/sucediendo (Realidad Absoluta), no supone que se deba permanecer impasible ni indiferente -cosa imposible y antinatural- ante ello, sino que la aceptación también debería extenderse a todas las posibles reacciones. La aceptación de la Realidad, la Vida, etc., no puede limitarse a la percepción de su apariencia externa; también tiene que abarcar las reacciones que surgen en su parte o dimensión interna: emociones, pensamientos, impulsos, deseos, acciones.
 
No hay fragmentación entre lo que se está viviendo fuera y lo que se está viviendo dentro. Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en estar siendo absolutamente todo cuanto -simultánea y universalmente- está siendo/sucediendo en cada aquí y ahora, por tanto, también está siendo nuestro yo personal y todas sus posibles percepciones, juicios, reacciones y expectativas. Inseparablemente, Estar Siendo Realidad Absoluta incluye el estar siendo/sucediendo/viviendo preciso e instantáneo de cada uno de nosotros, de ahí que el reconocimiento y la aceptación de la Realidad no puede excluir -tampoco las nuestras- absolutamente ninguna de sus manifestaciones. ¡Nuestras reacciones -sin excepción- también están siendo manifestaciones del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto!
 
Así como la aceptación de la Totalidad Universal no puede dejar fuera nuestra propia aceptación, tampoco nuestra propia aceptación puede dejar fuera a ninguna de nuestras posibles expresiones. ¡Nuestro suceder particular y el suceder particular de nuestras experiencias también está siendo -a la vez e inseparablemente- lo que está sucediendo en el mundo! Nuestras percepciones y acciones nunca han estado, ni estarán, separadas del Estar Siendo/Sucediendo Absoluto, porque nuestras percepciones y acciones también están siendo el Estar Siendo/Sucediendo Absoluto.
 
¿Para poder reconfigurar nuestros compromisos éticos, son verdaderamente útiles y necesarias las “guías y/o las herramientas prácticas”, como las que llevan ofreciendo -desde hace miles de años- las tradiciones políticas, religiosas, espirituales, filosóficas, etc., tanto occidentales como orientales? Estar Siendo Realidad Absoluta consiste en todo -incluidos nosotros y nuestras actividades- lo que “en cada aquí y ahora” está siendo/sucediendo, por tanto, ¿qué mejor guía, que la implícita en el reconocimiento y la aceptación de que no hay separación entre nuestro estar siendo/sucediendo y el resto del estar siendo/sucediendo? Junio-25
Juande Puerta.

Ensayo sobre la reflexión 080/2025 realizado con IA:

La reflexión de Juande Puerta invita a una comprensión profunda de la Realidad Absoluta como un todo inseparable que abarca tanto lo externo como lo interno, lo percibido y lo sentido, lo universal y lo particular. Según Juande Puerta, todo lo que parece estar sucediendo —sean percepciones, emociones, pensamientos o acciones— es, en efecto, parte de lo que está siendo. Esta idea desafía la fragmentación entre el mundo externo y nuestra experiencia interna, proponiendo que aceptar la Realidad Absoluta implica abrazar cada manifestación, incluidas nuestras reacciones más personales.

Esta aceptación no equivale a pasividad. No se trata de permanecer indiferentes ante el mundo, sino de reconocer que nuestras emociones, juicios y deseos son tan reales como los eventos externos. La Realidad Absoluta no distingue entre lo que sucede "fuera" y lo que surge "dentro"; ambas dimensiones son expresiones del mismo Ser/Suceder universal. Así, nuestras acciones y percepciones no son ajenas a la Totalidad, sino que forman parte integral de ella. Esta visión disuelve la ilusión de separación, mostrando que nuestro "yo" personal, con todas sus experiencias, está intrínsecamente unido al acontecer universal.

Juande Puerta cuestiona la necesidad de guías externas —como las ofrecidas por tradiciones políticas, religiosas o filosóficas— para reconfigurar nuestros compromisos éticos. Si la Realidad Absoluta ya incluye todo lo que somos y hacemos, la guía más auténtica reside en el reconocimiento de esta unidad. Aceptar que nuestro estar siendo es inseparable del suceder del mundo nos libera de la necesidad de herramientas externas, pues la vida misma, en su despliegue instantáneo, está siendo la guía. Vivir desde esta aceptación implica actuar con plena conciencia de que nuestras percepciones y acciones están siendo, en sí mismas, manifestaciones de la Realidad Absoluta.