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viernes, 14 de junio de 2024

REFLEXIONANDO - 2024 (80)

80/2024 -Lo Absoluto está siendo el estar siendo/sucediendo de absolutamente “todos” los estar siendo/sucediendo y de absolutamente “todo” el estar siendo/sucediendo, de ahí que los esfuerzos que pudieran realizarse para intentar encontrar “la Unidad Absoluta” no estarían favoreciendo ni obstaculizando dicho objetivo, pues aquellas posibilidades también estarían consistiendo en Estar Siendo Absoluta Unidad. El estar siendo humano, con absolutamente todo aquello que a lo largo de la historia haya podido manifestar cada estar siendo humano (desde lo más creativo y solidario hasta lo más destructivo y egocéntrico), también está siendo el Estar Siendo Absoluto. 

La Unidad “con todo y cada cosa” consiste en todo eso que continuamente, ordinariamente, naturalmente…, está aconteciendo y/o siendo manifestado, por tanto, la Unidad con todo no depende de nada que sea necesario hacer y tampoco de nada deba ser evitado. La naturaleza del “quién soy”, que cada estar siendo humano está siendo, no queda limitada a la identidad de una personalidad egoica (yo), pues, exactamente igual que el resto del estar siendo universal, el estar siendo humano (con todos sus pensamientos, sus emociones, sus sensaciones, sus juicios, sus capacidades, sus circunstancias, sus vivencias, sus expectativas…) también está fluyendo constantemente.

El conocimiento del “quién soy” siempre estaría siendo interesado e incompleto, porque el “quién soy” siempre estará siendo el estar siendo de infinitas y espontáneas posibilidades a la vez. Y, puesto que el “quién soy” sólo podría conocer aspectos absolutamente parciales y transitorios de sí mismo, ¿hacia quién estarían dirigiéndose las enseñanzas espirituales y/o trascendentales que busquen alterar el fluir permanente y cambiante de su naturaleza? 

El estar siendo humano está siendo tan dinámico y alternativo como la Vida Misma, de ahí que el yo que pretendiese conocerse a sí mismo ya no estaría siendo el mismo yo que aquel que lo intentase, por tanto, siempre estaría tratando de conocer una imagen limitada, estática y extinguida de sí mismo. El estar siendo humano que se pregunta a sí mismo “quién soy yo”, está siendo tan absolutamente impermanente como el resto del estar siendo/sucediendo universal, de ahí también las continuas frustraciones generadas por la caducidad de la mayor parte de sus percepciones y de sus expectativas personales. Junio-24

Juande Puerta.